Bogotá, 2 mar (SP). Este lunes fue la presentación de la Segunda Conferencia de Examen de la Convención de Ottawa sobre Minas Antipersonal, que tendrá lugar en Cartagena del 30 de noviembre al 4 de diciembre de este año.
¿En qué se fundamenta la Convención? ¿Hacia dónde apunta? ¿Cómo surgió? ¿Cómo se ubica Colombia en este contexto? Estas y otras preguntas son respondidas en el siguiente ABC:
¿En qué se fundamenta la Convención de Ottawa?
La Convención de Ottawa se fundamenta en normas consuetudinarias del Derecho Internacional Humanitario aplicable a todos los Estados y es una respuesta internacional orientada a mitigar el sufrimiento causado por el uso de las minas antipersonal.
¿Hacia dónde apunta la Convención?
Sus obligaciones tienen que ver con la prohibición del uso, producción, almacenamiento y tráfico de minas antipersonal y la destrucción de sus existencias. Se exceptúa una cantidad reservada para entrenamiento en técnicas de detección, limpieza o destrucción.
Igualmente, apunta al ‘desminado’, es decir, a la destrucción de todas las minas colocadas en las zonas minadas que estén bajo jurisdicción o control del Estado en un plazo de 10 años, contados desde la entrada en vigor de la Convención para cada Estado, prorrogables hasta por 10 años más. Para esta labor es necesario que se identifiquen primero los campos minados.
¿Cómo surgió la Convención?
El Proceso de Ottawa surgió como respuesta al fracaso de las negociaciones en 1995-1996 para adoptar un instrumento en el marco de la Convención sobre Ciertas Armas Convencionales de 1980 que prohibiera el uso de las minas antipersonal.
El entonces Ministro de Relaciones Exteriores de Canadá, Lloyd Axworthy, hizo un llamado para que la comunidad internacional incrementara sus esfuerzos encaminados a lograr dicho instrumento.
Un grupo de países (core group) y la presión de las organizaciones no gubernamentales liderada por la Campaña Internacional contra las Minas Antipersonal hizo posible la adopción de la Convención de Ottawa en septiembre de 1997.
El core group estuvo conformado por Austria, Bélgica, Canadá, Irlanda, Filipinas, México, Países Bajos, Noruega, Sudáfrica, Suiza, Colombia, Alemania, Brasil, Francia, Malasia, Nueva Zelanda, Portugal, Eslovenia, Reino Unido y Zimbabwe.
Ese esfuerzo conjunto dio como resultado un instrumento jurídico internacional capaz de generar conciencia sobre el impacto humanitario de las minas antipersonal y proteger a la población civil por el uso indiscriminado de las mismas.
¿Qué obligaciones tienen los estados miembros?
Proveer información sobre el cumplimiento de la Convención. Incluye el requisito de presentar un informe nacional anual. Deben desarrollar normatividad y tomar acciones para el cumplimiento nacional de la Convención.
Los estados se consultarán y cooperarán entre sí para resolver cualquier controversia que pueda surgir en relación con la aplicación e interpretación de la Convención. Cada Estado puede presentar el problema a la Reunión de Estados Parte.
¿Cuántos estados hacen parte de la Convención?
La Convención cuenta con 156 estados, que trabajan para dar aplicación a las obligaciones relacionadas con la destrucción de arsenales, remoción de minas, asistencia a víctimas y el fomento de la asistencia y cooperación internacional.
¿Cómo se conformó la Convención y cuándo entró en vigor?
Este proceso se realizó por fuera de Naciones Unidas, con activa presencia de las organizaciones no gubernamentales. Participaron activamente países de distintas partes del mundo, que se unieron en el core group para lograr un objetivo común: la prohibición de las minas antipersonal.
En marzo de 2009 se cumplen 10 años de la entrada en vigor de la Convención de Ottawa. Esta entró en vigor en marzo de 1999 y fue el instrumento internacional en su categoría más rápido en entrar en vigencia, reflejando la urgencia y el interés de la comunidad internacional en trabajar de manera concertada para lograr la eliminación total de las minas antipersonal.
¿Qué desafíos y retos hay por delante?
Se pueden enumerar los siguientes: universalización de la Convención, destrucción de arsenales, ‘desminado’, asistencia a víctimas, cooperación y asistencia, transparencia e intercambio de información, medidas nacionales y apoyo a la implementación.
¿Cómo hacer para que avanzar en la universalización de la Convención?
La comunidad internacional, incluyendo las organizaciones internacionales y la sociedad civil, deben aumentar sus esfuerzos con el fin de avanzar en la universalización de la Convención.
La Segunda Conferencia de Revisión se puede constituir en una oportunidad para compartir experiencias nacionales que, como la colombiana, son prueba de la voluntad política para ratificar y aplicar la Convención. El enfoque regional es un valioso argumento que se puede mencionar como instrumento para mejorar la universalización.
Se sabe que los temas por abordar son diversos, pero ¿cuál es el enfoque central?
La asistencia a las víctimas es el elemento central de la Reunión. Se debe resaltar la importancia de la atención a las víctimas, de la asistencia para su rehabilitación, mostrar su problemática, destacando la relevancia de la cooperación internacional para poder dar respuesta, de la manera más integral posible, a sus necesidades. Son las víctimas las que deben estar en el centro de los esfuerzos mundiales para erradicar las minas antipersonal.
¿En qué consiste la responsabilidad nacional?
Se trata de la apropiación y compromiso individual del país con la lucha contra el flagelo de las minas antipersonal y la aplicación de la Convención. Colombia es un ejemplo de que, pese a las dificultades y a las problemáticas particulares de cada país, es posible comprometerse y aplicar la Convención.
¿Cómo se da la cooperación y la asistencia internacional?
Se establece el derecho a solicitar y recibir asistencia para el cumplimiento de la Convención (incluida la asistencia a las víctimas) y el compromiso de los estados a facilitar el intercambio de equipo, material e información científica, así como el otorgamiento de asistencia para la aplicación de la Convención (incluido desminado y atención a víctimas y destrucción de existencias). Puede ser canalizada por el sistema de Naciones Unidas o de manera bilateral.
¿Cómo se postula Colombia para ser sede de la II Conferencia de Revisión?
El pasado 8 de enero Colombia se postuló para ser sede de la II Conferencia de Revisión de la Convención de Ottawa sobre Minas Antipersonal. Colombia competía en esta postulación junto con Camboya. Durante 2008, Colombia desplegó una agresiva campaña a favor de su postulación.
El pasado 3 de octubre de 2008, Camboya retiró su postulación y manifestó su apoyó a la candidatura de Colombia. Este retiro y apoyo fueron expresados oficialmente al Embajador Streuli, Presidente de la IX Reunión de Estados Parte de la Convención de Ottawa, quien es el encargado de informar a los Estados Parte sobre el particular. Ante este retiro, Colombia fue el único país postulado para ser sede, la cual fue otorgada en la IX Reunión, que se llevó a cabo en Ginebra, del 24 al 28 de noviembre.
¿Por qué es importante para Colombia el tema de las minas antipersonal?
Colombia es el país con el mayor número de víctimas mundiales por estos artefactos. Adicionalmente, cuenta con un problema vivo, debido a la siembra de minas por parte de grupos armados ilegales.
¿Qué progresos ha tenido Colombia para combatir las minas antipersonal?
Ha tenido los siguientes avances normativos: Institucionalización de la Acción Integral contra Minas Antipersonal en Colombia (Ley 759 de 2002); Adopción del ‘Plan Nacional de Acción Integral contra Minas Antipersonal y Municiones sin Explotar (2004 – 2009)’; Creación del Departamento de Desminado Humanitario en la Escuela de Ingenieros Militares del Ejército Nacional; Creación del Programa Presidencial para la Acción Integral contra Minas Antipersonal (Decreto 2157 de 2007) en reemplazo del Observatorio de Minas Antipersonal.
Igualmente, ha habido logros en la lucha integral contra las minas antipersonal como los siguientes: Posicionamiento del tema en la agenda política nacional; Desarrollo de acciones en Educación en el Riesgo de Minas Antipersonal en departamentos priorizados por su nivel de afectación; Definición de una Ruta de Atención Integral para las víctimas; Destrucción del arsenal almacenado y ampliación de la capacidad de desminado; Consolidación de un sistema de información robusto (IMSMA), en donde se registran las variables relativas a la Acción Integral contra Minas Antipersonal en Colombia; Formulación de iniciativas territoriales en Acción Integral contra Minas Antipersonal.
En cifras, ¿cómo ha avanzado Colombia en su lucha con el desminado?
Desde la ratificación de la Convención, Colombia ha destruido 19 mil minas pertenecientes a las Fuerzas Armadas. Sólo conserva 586 minas en inventario, para fines de entrenamiento, de conformidad con lo dispuesto en Artículo III de la Convención. Fueron destruidos 12 de los 34 campos minados bajo la jurisdicción de las Fuerzas Armadas.
¿Cuál es la problemática particular de Colombia en el caso de las minas antipersonal?
Este es un problema vivo, en la medida en que los actores armados ilegales continúan sembrando el suelo colombiano de minas antipersonal y otros artefactos explosivos improvisados, lo cual tiene un impacto alto e indiscriminado sobre la población civil, especialmente en comunidades rurales marginadas y vulnerables, niños, mujeres y ancianos.
En Colombia la mayor parte de las minas que se siembran son de fabricación artesanal (artefactos explosivos improvisados), diseñadas para causar un daño mayor a las víctimas.
Entre 1990 y octubre de 2008, 7.204 colombianos fueron víctimas de minas antipersonal (MAP) y municiones sin explotar (Muse). Colombia ocupa el primer lugar mundial de número de víctimas causadas por MAP y Muse, seguida de Camboya, Pakistán y Afganistán (a los cuales duplica). Colombia es el país del hemisferio más afectado por las minas antipersonal. Colombia registra dos víctimas diarias por MAP y Muse. El 46 por ciento de los municipios del país han reportado alguna víctima y 61,8 por ciento registra algún grado de contaminación por MAP – Muse. Veintidós de los 32 departamentos del país han reportado accidentes. Aunque hay una alta concentración en cinco departamentos (que representan 47.8 por ciento de los accidentes).
¿Quiénes son las víctimas?
Desde 2000 se han incrementado los accidentes por minas, debido al aumento de su uso indiscriminado por parte de los grupos armados ilegales. El perfil de las víctimas es: mayoría militares (65.8 por ciento), hombres (86.6 por ciento) y mayores de edad (90.1 por ciento). Sin embargo, es preocupante el porcentaje de menores de edad víctimas (28 por ciento de los accidentes entre los civiles). Los usuarios de minas antipersonal son los grupos armados ilegales, responsables del incremento de accidentes con minas, en la medida en que las siembran en áreas de habitación y tránsito de la población civil.
Las minas usadas por los grupos armados ilegales son irregulares y no corresponden con las minas MAP-1 utilizadas en la formación de desminado. Existe una clara relación entre los eventos con minas y la localización de los corredores estratégicos de tráfico de armas y de drogas. El desplazamiento de la población por la acción de los grupos armados ilegales hace que las zonas minadas sean ocupadas por nuevos grupos poblacionales, generando un nuevo ciclo de accidentes por minas. |