Bogotá, 9 mar (SP). El Ministerio de Cultura preparará un proyecto de intervención en el muelle de Puerto Colombia, declarado Monumento Nacional (hoy Bien de Interés Cultural del ámbito Nacional), el cual sufrió un desplome el sábado pasado en uno de sus sectores, debido al fenómeno natural del mar de leva.
El anuncio lo hizo la directora de Patrimonio del Ministerio, María Claudia López, al manifestar que se readecuará su estructura y será adaptada a las necesidades actuales de la comunidad, con el propósito de incorporarlo a la dinámica social y económica del municipio de Puerto Colombia, del departamento del Atlántico y del país.
”El muelle perdió su función desde hace más de 60 años. Esto, aunado a su grave estado de conservación, hace improcedente una restauración integral del mismo, incluso por los altos costos de las obras que hoy día podrían superar los 20 mil millones de pesos”, indicó la funcionaria.
Con este propósito, el Ministerio de Cultura realiza gestiones mancomunadas con el Ministerio de Transporte, propietario del muelle, el departamento de Atlántico y el municipio de Puerto Colombia, con el fin de gestionar los recursos para el proyecto de intervención y las obras que de éste se deriven.
La directora de Patrimonio del Ministerio destacó la gestión que ha venido desarrollando en los últimos años el departamento del Atlántico y el municipio de Puerto Colombia en la formulación del Plan Especial de Manejo y Protección del muelle (PEP), que se encuentra en proceso de ajuste y que ha contado con los lineamientos de esta cartera.
Según la Ministra de Cultura, Paula Marcela Moreno, la entidad a su cargo brindará la asesoría técnica que este proceso requiere.
“El Ministerio asignó una partida de 80 millones de pesos en la actual vigencia, para asesorar técnicamente este proceso. Con el PEP, el muelle podrá salir de la postración y volverá a convertirse en uno de los lugares turísticos más importantes de la región”, indicó Moreno.
Sobre el Muelle
La primera construcción del muelle, de madera, hierro y acero, realizada por el ingeniero cubano Francisco Cisneros entre 1888 y 1893, permitió el atraque de barcos de alto calado.
El muelle fue ampliado y reforzado en su estructura entre 1913 y 1923, y se constituyó, con sus 1.219 metros de longitud, en uno de los tres muelles más largos del mundo en su momento, junto al de South End y Southport en Inglaterra. En 1943 se prohibió el atraque de buques en este muelle y se ordenó el levantamiento de los rieles ferroviarios, quedando así en desuso.
En 1998 fue declarado Bien de Interés Cultural del ámbito Nacional, por constituirse en una de las obras de infraestructura más importantes de la segunda mitad del Siglo XIX, fundamental en el desarrollo portuario del país. |