Madrid, España, 26 nov (SP). La siguiente es la intervención del Alto Comisionado para la Paz, Frank Pearl, durante la Presentación del Segundo Informe del Observatorio Internacional sobre DDR y la Ley de Justicia y Paz, y balance sobre el proceso en 2009, que se cumplió este jueves en la Casa de América, Centro Internacional de Toledo para la Paz, en Madrid.

"El proceso colombiano es de una magnitud y una complejidad sin precedentes en ningún país del mundo"

Es un privilegio estar aquí debatiendo este tema. Antes de entrar en el tema de las extradiciones yo quisiera decir que el proceso que está viviendo Colombia es un proceso histórico y único en el mundo, y que los colombianos debemos estar orgullosos de lo que estamos haciendo.

El proceso colombiano es de una magnitud y una complejidad sin precedentes en ningún país del mundo, estamos buscando como país tener un equilibrio entre la Justicia y la Paz para crear condiciones para la paz, la equidad y la prosperidad en nuestro país, y en eso la responsabilidad no es exclusiva del Gobierno y de las instituciones judiciales, es una responsabilidad del Estado en su conjunto y de todos los ciudadanos, y por eso este foro, donde hay representación diversa, es considerado por el Gobierno como una oportunidad para identificar lo que esta funcionando bien, identificar lo que tenemos que mejorar, pero sobre todo construir puentes y caminos, porque estamos en el momento de corregir lo que se necesario en estos procesos que son difíciles y que no están inventados.

Las extradiciones

Sobre el tema en particular de las extradiciones quisiera decir lo siguiente. Antes de que el Gobierno hiciera lo de la extradición de los ex comandantes paramilitares, algunos opositores al Gobierno decían lo que está diciendo Iván Cepeda: el Gobierno no los va a extraditar porque el Gobierno tiene algo que esconder, y ahora que el Gobierno los extraditó, dicen que el Gobierno los extraditó para esconder la verdad.

Entonces es un argumento que se contradice, que no se sostiene así mismo. Aquí el mensaje es, distingamos y diferenciemos los argumentos de tipo político de los hechos de tipo jurídico. Porque si el Gobierno tuviera algo que esconder no tendría ningún sentido que los extraditara, porque ellos en los Estados Unidos tienen muy poco que perder y entonces se hubieran despachado, pero como ese no es el caso.

Hay tres cosas concretas: en primer lugar, los procesos de Justicia y Paz en Colombia no se suspenden; en segundo lugar, una vez cumplidas las penas en los Estados Unidos, ellos tiene que regresar a Colombia a cumplir sus penas de Justicia y Paz; en tercer lugar, aquí hay una carta que es un compromiso del Gobierno de los Estados Unidos para un acuerdo de cooperación que obviamente hay que perfeccionar, y en cuarto lugar, claro que es fundamental la verdad de los ex comandantes paramilitares para contextualizar lo que sucedió con todos los crímenes, pero muy buena parte de la verdad sigue estando en Colombia y cuando ellos estaban en Colombia teníamos una dificultad y es que los ex comandantes tenían el incentivo de silenciar a las personas que estaban abajo, entonces había incentivo de silenciar desde arriba y miedo de declarar desde abajo.

Entonces, son complejidades del proceso que sí se resuelve con el tema de la extradición, pero yo creo que hay que reconocer que hay que poner a funcionar los mecanismos de cooperación.

Reintegración

Pregunta del moderador, Julio Sánchez Cristo: ¿Cuáles son las cifras Frank, en Colombia?

Alto Comisionado para la Paz, Frank Pearl: En Colombia se han desmovilizado más de 51 mil personas en siete años, de ellos más de 15 mil viene de las Farc principalmente, de resto son casi 32 mil paramilitares que lo hicieron como resultado de las negociaciones de paz con el Gobierno y otros tres quinientos paramilitares que se desmovilizaron por su cuenta.

Pregunta del moderador, Julio Sánchez Cristo: ¿Qué números tiene de Medellín?

Alto Comisionado para la Paz, Frank Pearl: En Medellín tenemos 4.200 personas activas en el proceso de reintegración, que vienen de los grupos paramilitares y cerca de otros mil 800 que vienen de los grupos de la guerrilla; es la ciudad del país con un mayor número de desmovilizados.

El porcentaje en nivel de reincidencia a nivel nacional está en el 7.4 por ciento, estoy hablando de números, nombres, cédulas, bases de datos cruzadas de Policía Nacional, Medicina legal, Inpec y niveles de deserción del proceso de reintegración. En Medellín el porcentaje es más alto y sí es cierto que últimamente hemos notado una deserción mayor. Hay 250 desmovilizados en Medellín sobre los cuales no sabemos dónde están y hay cerca de 260 ó 270 desmovilizados en Medellín que comprobadamente volvieron a delinquir.

Aquí hay un tema de fondo y es que cuando se hizo la desmovilización no hubo un incentivo para que los mandos medios entraran al programa porque lo que se hacía era reinserción, y reinserción significa trabajar solamente con quien se desmoviliza, en un acuerdo para que la persona entregue su uniforme, entregue su arma, si la tiene, y reciba un apoyo económico del Gobierno por un periodo limitado, pero no hay un valor agregado y una intervención sobre la persona para que cambie su conducta.

Cuando empezamos a hacer reintegración vimos que había un bache, y que los mandos medios no tuvieron un incentivo para entrar al proceso. Nosotros calculamos que hubo cerca de 450 mandos medios a nivel nacional que nunca entraron a ningún proceso de reintegración y otros 500 que se fueron directamente a ser narcotráfico.

Extradición de ex paramilitares

Pregunta del moderador, Julio Sánchez Cristo: ¿Alto Comisionado de Paz, decía usted que hay un memorando de entendimiento pero no hay acuerdo, ante esa preocupación que tiene el juez Baltazar Garzón y las víctimas, qué es lo que tenemos con Estados Unidos los colombianos acordado para tratar de llegar a lo que tanto preocupa al Juez Baltasar Garzón?

Alto Comisionado para la Paz, Frank Pearl: El detalle del acuerdo lo puede contar ahora el Viceministro que tiene el documento en la mano. Yo quiero presentar una perspectiva más amplia, y estoy de acuerdo con las palabras del Fiscal General y el Juez Baltasar Garzón, en el sentido en que la calificación sobre el proceso que adelanta Colombia no puede hacerse en términos absolutos, porque es un proceso increíblemente complejo.

Yo voy a decir unas cuatro, cinco cifras. Tenemos más de 50 mil hechos conocidos, más de 16 mil hechos confesados, más de 3.800 versiones libres en alguna etapa del proceso. Pero miren, en Colombia las víctimas antes eran invisibles, así como los paramilitares, todo el mundo sabía que existían, pero nadie sabía quiénes eran.

Gracias a la Ley de Justicia y Paz tenemos plenamente identificadas a las personas que hacían parte de estas estructuras, con toda la información que les corresponde, hay una comisión Nacional de Reparación y Reconciliación que representa a todas las víctimas en Colombia, gracias a eso hay 265 mil 800 víctimas que se han registrado porque las víctimas en Colombia saben que hoy tiene derecho; y hay otras organizaciones, como la que representa Iván Cepeda, que agrupan otras víctimas que están reclamando sus derechos.

Pero mire, otro tema del que no hemos hablado, hemos hablado de verdad, de justicia, de reparación; la garantía de no repetición. Los colombianos y las instituciones estamos haciendo esto porque queremos dejar la violencia atrás, queremos que esto no se repita, necesitamos entender el pasado, para no repetir los errores y dentro de eso el proceso de reintegración que se adelanta en Colombia con todas las complejidades, con todas las dificultades, con todos los errores, es el proceso de reintegración más avanzado en el mundo. Yo quiero que alguien aquí me diga ¿qué país del mundo puede mostrar estos resultados en un periodo de cinco años?

Sumemos, todas las personas que fueron llevadas ante la justicia en todos los países de América Latina, en todos los países de America central, en todos los países de África y en los países Europeos que han adelantado procesos similares, porque ninguno es comparable y vamos a encontrar que no se encontraron ni siquiera el diez por ciento de personas que fueron llevadas ante la justicia en todos esos países sumados.

En conclusión, el proceso de Colombia es de vanguardia, es ambicioso, hay que perfeccionarlo y el mensaje es, trabajemos juntos para perfeccionar los mecanismos que nos lleven a un feliz término.

“La contrucción de condiciones de paz en nuestro país es responsabilidad de todos”

Yo quisiera aprovechar esta oportunidad para recalcar que la contrucción de condiciones de paz en nuestro país es responsabilidad de todos. Todas las instituciones que estamos aquí representadas y algunas que no están, están haciendo esfuerzos enormes. La Fiscalía General de la Nación, la Corte Suprema de Justicia para definir las reglas de juego bajo las cuales se aplica la Ley de Justicia y Paz y el Gobierno mismo multiplicando el presupuesto de la Fiscalía. Ningún Gobierno ha invertido tanto en este tema en la historia de Colombia.

Hay avances y hay dificultades y el mensaje que yo quisiera pasar es que nos unamos en el propósito común de que se sepa qué pasó, que las víctimas sean reparadas y en perfeccionar los mecanismos hasta donde sea posible. Nosotros, quienes trabajamos en el Gobierno, representamos instituciones y también los representantes de los ciudadanos y de las víctimas no podemos tener discursos que dividan.

Aquí tenemos que unirnos a propósitos comunes, la justicia, la paz y la equidad deben estar por encima de diferencias personales o eventualmente de diferencias institucionales que son entendibles, que son normales en estos procesos tan complejos. Miremos más allá y trabajemos juntos.