“A nosotros nos duele por igual un crimen aquí, que un crimen allá”, expresó el Mandatario al referirse al secuestro y asesinato de colombianos en territorio venezolano y señaló que estas circunstancias demuestran que la capacidad criminal del terrorismo no respeta fronteras.

Tuluá, Valle, 26 oct (SP). Un llamado al Gobierno y al Presidente de Venezuela para coordinar actividades y que se proteja el derecho a la vida de colombianos y venezolanos, por encima de las diferencias, hizo este lunes el Presidente Álvaro Uribe Vélez.

El Jefe de Estado, que lideró un Consejo de Seguridad en la ciudad vallecaucana de Tuluá, se refirió al secuestro y asesinato de diez colombianos en territorio venezolano y señaló que estas circunstancias demuestran que la capacidad criminal del terrorismo no respeta fronteras.

“Nosotros no tenemos ninguna hipótesis oficial del Gobierno de Venezuela. Extraoficialmente se ha dicho lo siguiente: Se dijo que podía ser el Eln; grave. También se ha dicho que podría haber sido un grupo de milicianos de Venezuela; grave. También se ha dicho que podría haber sido una venganza, porque algunos podrían haber participado en un atraco; grave”, expresó.

El Mandatario subrayó que el derecho a la vida es para todos los ciudadanos, venezolanos o colombianos y añadió que las autoridades tienen la obligación de proteger a todos los ciudadanos, los buenos y los malos.

“Y desde el centro del Valle del Cauca hago un llamado al Gobierno de Venezuela, a su Presidente, para que por encima de cualquier diferencia, busquemos cómo puede haber una coordinación de actividades para proteger el derecho a la vida de los ciudadanos colombianos y de los ciudadanos venezolanos”, manifestó Uribe Vélez.

Repatriación de cuerpos

El Presidente de la República reiteró que la Fuerza Pública, con la responsabilidad del Comandante de las Fuerzas Militares, general Freddy Padilla de León, transportará los restos de las víctimas de regreso a Colombia en un avión estatal.

Indicó que la Agencia Presidencial para la Acción Social de la Presidencia de la República debe darles a las familias de los asesinados el mismo apoyo que se da cuando los actos terroristas ocurren en Colombia.