Bogotá, 17 sep (SP). “Quiero agradecer al Congreso de la Republica estas dos Leyes que hoy se promulgan, de gran importancia para el país. La honorable senadora Dilian Francisca Toro nos ha explicado los alcances de la Ley para evitar el tabaquismo en Colombia. Una legislación que va poniendo al país a la altura de las legislaciones más modernas en estos temas de prevención de salud. Un gran esfuerzo del Congreso de la República. No fácil.

Puede haber una contradicción. Hoy jueves promulgamos esta Ley y el sábado pasado, en Colosó, en el departamento de Sucre, firmábamos el acuerdo para extender el área de producción de tabaco de exportación en la zona de los Montes de María.

Y nos toca asumir responsabilidades ante el país. Hay unas zonas agrícolas que habían sido destruidas por los grupos terroristas y que tienen en el tabaco de exportación una gran posibilidad. Y hay empresas internacionales que lo están promoviendo. Pero una cosa es recuperar esas zonas agrícolas con tabaco de exportación, el acuerdo del sábado es para sembrar 15 mil hectáreas, y otra cosa es que todo el mundo se tiene que someter a esta Ley de prevención de temas de salud.

Me parece que es un gran paso del Congreso de la República. Tenemos una dificultad grande con el tema del impuesto al tabaco. En cada ocasión que se toca el tema tributario en el Congreso, se cambia ese impuesto. Y al otro día de haberlo cambiado, de inmediato aparece otra proposición: que quedó malo, que hay que volver a cambiarlo.

Ahora se está cobrando un impuesto específico por cajetilla. Entonces hay una queja muy grande porque algunas cajetillas se bajaron del rango de los 2 mil pesos, para pagar la menor cantidad en la escala del impuesto. Y nos han pedido reformar nuevamente el tema.

Se venía concertando para sacarlo adelante en la reforma tributaria de los departamentos. Pero esa reforma no ha avanzado en el Congreso de la República. Vamos a vamos a volver a mirar este tema.

La felicito, apreciada senadora Dilian Francisca Toro, por todo su esfuerzo. A todos sus compañeros del Congreso de la República.

Caficultura colombiana

Y me alegra mucho esta Ley para la caficultura colombiana. Cuando se introdujo la contribución, se tomaron unas decisiones muy al inicio de este Gobierno. Empezó una gran discusión. Había quienes, opuestos a la contribución, querían eliminarla o reducirla a la más minima expresión.

Y por supuesto, desde los comités, desde muchas comunidades cafeteras, desde la Federación, se reclamaba la necesidad de esos recursos. Creo que ha sido un paso bueno evitar que año tras año se tenga que discutir el tema de la contribución. Dejarlo ya incluido en una ley indefinida. Los seis centavos de dólar: los dos para los comités departamentales. Creo que quita motivos de angustia, porque era año tras año buscando la renta y siempre generando el debate.

Las cuentas que tenemos dan que esta contribución puede representar este año unos 170 mil millones para la Federación. Se constituye en un ingreso bien importante y, por supuesto, la Ley le da más legitimidad a los esfuerzos que ha venido haciendo el Gobierno para contribuir en los programas de la caficultura colombiana.

En algunas épocas tuvimos que ayudar a entrar en el precio. El Ministro Juan Manuel Santos había creado ese buen antecedente. Y muy al principio del Gobierno, el presupuesto nacional debió dar unas ayudas para el precio. Diría que hay dos temas a destacar de los últimos años: el aporte del Gobierno a lo que es la renovación cafetera y los acuerdos con la Federación para los programas de Acción Social, de Protección Social, en las diferentes áreas cafeteras del país.

Creo que esta Ley ratifica ese deber que tiene el Gobierno de seguir contribuyendo con la comunidad cafetera en todo el país.

Quiero agradecer la presencia esta mañana del Presidente de la Federación Nacional de Cafeteros, el doctor Luis Genaro Muñoz, y de los muy distinguidos miembros del Comité Nacional. Y reiterarles todo nuestro propósito de seguir trabajando con los cafeteros de Colombia, porque la caficultura es tejido social de la Nación.

Estamos bastante preocupados por la caída de la producción. Han confluido varios temas. Uno, lluvias de los años anteriores, afectaron mucho la producción. Y también las áreas que salen transitoriamente porque están en proceso de renovación.

El informe que nos dan ahora es que hay mejor florescencia, que el tiempo que ha amainado… Y ojalá no nos vayamos al otro extremo, pasar de esas lluvias tan intensas de los dos últimos años a una sequía. Ojalá no. Pero el tiempo que amainó, ha ayudado mucho a que se dé esa florescencia.

Uno no encuentra a los ciudadanos de las ciudades cafeteras no optimistas, sobre la recolección de ahora de octubre, de noviembre, pero sí optimistas sobre lo que pueden ser las primeras producciones del año entrante, gracias a la mejor florescencia. Ojalá.

Creo que el país, sin miedo, debe apostarle a volver a producir por encima de 15 millones de sacos. Además se ha comprobado que, como factor de construcción de capital social, el café, en las regiones de Colombia, montañosas, de ladera, es insustituible.

Los saludo a todos muy respetuosamente. A las comunidades científicas de la salud, a los cafeteros, al Ministro de la Protección, al Ministerio de Agricultura, representado por su Viceministro, y muy especialmente a ustedes, distinguidos senadores y representantes, que hicieron posible entregarle al país estas dos Leyes.

El tema de la contribución cafetera ha sido de mucha controversia y celebro que se haya aprobado esta Ley en un proceso tranquilo. No sé cómo lo lograron. Diría que el proceso fue más tranquilo de lo que habría podido esperarse. Increíble. Felicitaciones por eso y muchas gracias a todos.