Bogotá, 23 sep (SP). El Consejo Nacional de Política Económica y Social (Conpes) dio su aval a la Fase I del Programa Estratégico de Autopistas (Proesa), que incluye la Transversal de las Américas, la Autopista de la Montaña y la construcción de la segunda calzada Bogotá-Villavicencio, las cuales tendrán inversiones por más de 10 billones de pesos.
“La aprobación de estos corredores viales permitirá que el país siga avanzando y mejorando su infraestructura, lo que fortalecerá la competitividad y redundará en un mayor bienestar económico y social para millones de colombianos”, dijo Juan Mauricio Ramírez, director (e) del Departamento Nacional de Planeación.
Transversal de las Américas
Este corredor, que integrará los departamentos de la costa Caribe a través de un sistema de dobles calzadas, favorecerá a los departamentos de Chocó, Antioquia, Córdoba, Sucre, Bolívar, Atlántico, Magdalena y la Guajira. Se contemplan recursos de la Nación por 6,2 billones de pesos de 2008, entre los años 2011 y 2021.
A lo largo de sus 1.090 kilómetros, se adelantarán obras de rehabilitación y mejoramiento de vías existentes en un trayecto de 930,5 kilómetros, la construcción de 703 kilómetros de dobles calzadas, y la construcción de 161 kilómetros nuevos.
El proyecto se ejecutará a través de dos contratos de concesión. El primero, con un plazo máximo de 7 años, comprende en su mayoría obras de mejoramiento y/o mantenimiento en el corredor que une la región del Urabá antioqueño con el departamento de Córdoba. Para este sector, se estiman aportes de la Nación por 1,9 billones de pesos.
Por su parte, el desarrollo de las obras del segundo sector se realizará por medio de un contrato de concesión de largo plazo, el cual incluirá la construcción de segundas calzadas a lo largo de los corredores existentes desde el departamento de Córdoba hasta la frontera con Venezuela, en el departamento de La Guajira, con aportes de la Nación que ascienden a 4,2 billones de pesos.
Segunda calzada Autopista Bogotá-Villavicencio
El proyecto de doble calzada entre la Capital de la República y Villavicencio, que permitirá aumentar la capacidad vial y reducir el tiempo de recorrido sustancialmente, requiere de aportes estatales hasta por un monto de 1,85 billones de pesos de 2008, de los cuales 1,52 billones aportará el Gobierno nacional y los restantes 300 mil millones de pesos, la Gobernación del Meta.
La obra incluye la construcción, operación y mantenimiento de 45,5 kilómetros de nueva calzada; la construcción de 19 túneles con una extensión de 14,6 kilómetros, 23 puentes y viaductos con una longitud de 4 kilómetros, y 9 kilómetros de vía a superficie, entre otros.
Autopista de la Montaña
Este proyecto es el resultado de una iniciativa nacional, regional y local, que busca mejorar las condiciones de conectividad de los departamentos de Antioquia y del Eje Cafetero con Bogotá, el Magdalena Medio, la Ruta del Sol y la Costa Atlántica.
Las inversiones necesarias para adelantar el mejoramiento y ampliación de esta autopista suman 2 billones de pesos de 2008, de los cuales hasta 1 billón de pesos corresponden a la Nación, 600 mil millones de pesos a la Gobernación de Antioquia y 400 mil millones de pesos a la Alcaldía de Medellín.
El proyecto que será desarrollado por Interconexión Eléctrica S.A. (ISA) contempla la ampliación de cuatro corredores viales que tendrían una extensión aproximada de 900 kilómetros y la operación y mantenimiento de aproximadamente 1.251 kilómetros.
Financiación de los proyectos
Desde el punto de vista fiscal, la premisa esencial con base en la cual el Gobierno Nacional toma la decisión de financiar el Programa Estratégico de Autopistas es que el desarrollo de estos proyectos de infraestructura no aparta a la Nación, en ningún caso, de la senda actual de deuda sostenible en el mediano plazo, definida en el Marco Fiscal de Mediano Plazo (Mfmp) de 2009.
Si la economía colombiana se comporta en línea con el escenario de recuperación gradual entre 2011 y 2014, la fuente de financiación de los aportes deberá provenir de un programa gradual de enajenación de la participación de la Nación en Ecopetrol S.A., de hasta el 10 por ciento, con el fin de garantizar la senda sostenible de la deuda pública definida en el Mfmp-2009.
Dado que las obras y las necesidades de financiación se inician en 2011, en ese momento el Gobierno podrá contemplar mecanismos de financiación alternativos, sólo si la economía colombiana y los ingresos de la Nación muestran un comportamiento más favorable que el contemplado en el Mfmp 2009.
En todo caso, el mecanismo elegido deberá asegurar que no se apartará a la Nación de la senda sostenible de mediano plazo que se defina en este marco fiscal. |