Bogotá, 5 abr (SP). El Comandante General de las Fuerzas Militares, general Freddy Padilla de León, expresa su sentido pesar por la inmisericorde desaparición del teniente coronel de la Policía Nacional Julián Ernesto Guevara, ocurrida mientras permanecía secuestrado en poder de las organización narcoterrorista Farc, y ruega a Dios Todopoderoso para que brinde consuelo a su señora madre, doña Emperatriz de Guevara; a familiares, amigos y a sus compañeros de la Policía Nacional.

El señor teniente coronel Julián Ernesto Guevara fue secuestrado por las Farc y fue sometido a penoso confinamiento, aún cuando su estado de salud se hizo delicado. Las Farc, vulnerando todos los derechos de quien mantenían bajo su poder e infringiendo el Derecho Internacional Humanitario, omitió brindarle atención médica y liberarlo de inmediato, como era su deber. El secuestro y muerte del teniente coronel Guevara merecen repudio y condena nacional e internacional, por tratarse de delitos de lesa humanidad.

La muerte del teniente coronel Guevara, secuestrado en noviembre de 1998 mientras defendía a la población de Mitú de un violento ataque perpetrado por las Farc, fue ocultada por las Farc luego de ocho años de penoso secuestro y sólo se conoció en 2008 gracias a revelaciones de sus compañeros de secuestro rescatados durante la Operación Jaque.

Tratar de confundir esa suma de actos inhumanos con el supuesto acto de bondad de la tardía devolución de sus restos mortales sería un acto de cinismo y burla que ofendería al pueblo colombiano y a su familia.

Las Fuerzas Militares de Colombia clamamos por la libertad inmediata de todos y cada uno de los ciudadanos secuestrados y para que de Colombia sea proscrita la infame práctica del secuestro en cualquiera de sus modalidades. No descansaremos en el esfuerzo hasta que ello sea una realidad.