Bogotá, 13 abr (SP). Con el propósito de ofrecer a los ciudadanos mejores y claras explicaciones sobre las acciones de sus gobernantes, la rendición de cuentas tanto del Gobierno Nacional como de las administraciones regionales tendrá carácter de política pública.

La estrategia, que fue aprobada por el Consejo Nacional de Política Económica y Social (Conpes) se centra en la que se ha denominado “rendición de cuentas social”, y tiene como objetivo consolidarla como una actividad permanente, que comprende tanto la oferta de información comprensible para la ciudadanía, como espacios institucionales en los que se expliquen y justifiquen las decisiones, acciones y resultados de la gestión pública.

El documento aprobado por el Conpes reitera la importancia de que la rendición de cuentas se convierta en una práctica organizada y permanente, que sea posible a través de los diferentes espacios de encuentro con la ciudadanía, tales como mesas de trabajo, foros, ferias, audiencias públicas y consejos comunitarios.

En el largo plazo, además de que haya más transparencia en las acciones de los gobiernos, que la ciudadanía confíe cada más en la gestión pública y se ejerza el control social a un mayor número de políticas y proyectos de gobierno, se espera construir una cultura de la rendición de cuentas en todo el país, en la cual tanto los funcionarios como los colombianos en general conozcan sus deberes y derechos en esta materia.

Para hacer posible dicha política se adelantarán acciones para mejorar la calidad de la información que se entrega a la ciudadanía; fomentar el diálogo y la retroalimentación entre los gobiernos y los ciudadanos; generar incentivos para que las entidades públicas rindan cuentas; y, generar incentivos para que los ciudadanos pidan cuentas.

Para cumplir con los objetivos de la política de rendición de cuentas se estima una inversión alrededor de los seis mil 800 millones de pesos en el periodo 2010 – 2013.