Durante un conversatorio con estudiantes universitarios, en Cartagena, el Presidente Álvaro Uribe Vélez reiteró que la palabra guerra no existe frente a países vecinos y hermanos. Destacó la colaboración mutua entre Colombia y Ecuador para luchar contra el terrorismo.

Cartagena, 29 abr (SP). En las buenas relaciones con los vecinos, para Colombia resulta fundamental el compromiso de eliminar el terrorismo, aseguró este jueves el Presidente de la República, Álvaro Uribe Vélez, durante un conversatorio con estudiantes de la Universidad Tecnológica de Bolívar, en Cartagena.

Al referirse al tema de las relaciones internacionales, el Jefe de Estado recordó, además, que el acuerdo de seguridad con Estados Unidos tiene como objetivo la lucha contra el narcotráfico y el terrorismo, al tiempo que aseguró que el Plan Colombia nunca ha sido utilizado para ofender a otros países.

Así mismo, destacó la colaboración mutua que han logrado Colombia y Ecuador en la lucha contra el terrorismo, subrayando que el interés del Gobierno Nacional es seguir avanzando en ese sentido.

La siguiente es la declaración del Jefe de Estado en su diálogo con los universitarios cartageneros:

“La palabra guerra no existe entre nosotros, ni estamos interesados, menos frente a vecinos, países hermanos.

Lo que sí hemos cambiado es la política internacional, porque nosotros no nos podemos quedar en la política internacional como abogados o poetas o diplomáticos, sin que nos respeten.

Nada ganamos que nos digan, qué excelentes poetas, que buenos abogados, qué diplomáticos tan corteses, si los países del extranjero no nos ayudan en la lucha contra el terrorismo.

Yo creo que lo que ha hecho este Gobierno en materia internacional ha sido evolucionar, de un país que no le había reclamado a la comunidad internacional que había que luchar contra los terroristas de Colombia, a un Gobierno que sí ha reclamado.

Para nosotros en las buenas relaciones con los vecinos, es fundamental el compromiso para eliminar el terrorismo. Si uno no combate el terrorismo del vecino, entonces lo que está haciendo es permitiendo que ese terrorismo mine la democracia del vecino. Para nuestra democracia es fundamental eso.

¿Qué eso ha creado problemas? Claro, claro, indudablemente. En una de esas bellísimas historias de Shakespeare dice: ‘Para despejar el firmamento se necesita una tormenta’.

Teníamos un firmamento sumamente enredado, un firmamento sumamente cargado con la permisividad internacional con el terrorismo colombiano. Este Gobierno ha producido una tormenta para despejarle al país ese problema, y yo creo que si eso se entiende bien, los gobiernos del futuro tendrán que saber que lo que interesa no son risitas y abrazos en las relaciones internacionales; que lo interesa no es que nos den aplausos, nos den palmaditas en los hombros como señal de pésame cuando sufrimos tragedias, que lo que interesa es respeto y solidaridad efectiva.

El respeto a la autonomía de los pueblos, a la libre determinación de los pueblos, el respeto a la soberanía de los pueblos, pasa por el principio de no proteger a los terroristas de los pueblos.

Cómo vamos a decir nosotros que nos respetan la soberanía, si albergan a los terroristas. De ninguna manera.

Yo creo que ahí hay un cambio en la visión internacional de este país. Entonces que por lo menos yo quisiera que quedara ese legado.

¿Ahora, para qué se hace ese acuerdo con los Estados Unidos? Para la lucha contra el narcotráfico y contra el terrorismo.

¿Por qué digo yo que no es para ofender terceros países? Porque nunca lo hemos hecho. En los años del Plan Colombia nadie puede levantar la mano para decir, Colombia utilizó el Plan Colombia para ofender a este o aquel otro país, hemos sido muy respetuosos.

Ahora, lo que sí dejamos nosotros como legado de nuestra política internacional, es que nosotros levantamos nuestra voz para que un firmamento bastante congestionado de oscuras nubes por la presencia de nuestros terroristas protegiéndose en otros territorios, se despejara. Y eso exigió que una tormenta, que ha sido esta reorientación de política internacional en este Gobierno ¿Qué tal que no?

Ahora, como hay que señalar lo bueno, yo veo cosas buenas con Ecuador, que ojala podamos seguir construyendo. Hoy hay una gran colaboración mutua entre Colombia y Ecuador, para luchar contra el terrorismo. Lo que queremos es que eso siga.

La hermandad entre los países pasa por la protección recíproca entre los hermanos. Yo no puedo abrazar a mi hermano, y decirle, lo quiero mucho, si dejo que los terroristas estén maltratando a mi hermano.

El Caribe es tierra fértil para entender eso. La elección del señor (Rafael) Núñez, hijo de esta tierra, la Presidencia del Estado de Bolívar, y a la Presidencia de la República, en alguna forma fue una rebelión del Caribe contra el desorden. El Caribe es tierra firme para entender eso.

Ese episodio tan bello del nacimiento de la Batalla de Flores en el Carnaval de Barranquilla, también es expresión de esa idiosincrasia Caribe.

El Caribe entiende que la hermandad entre los pueblos pasa por el respeto, y que un punto fundamental del respeto es la lucha contra el terrorismo. Yo no puedo pretender que mi hermano me reciba bien, si mi hermano no siente que yo estoy ayudando a que el terrorismo no lo maltrate a él.

El terrorista contra mi hermano, yo lo tengo que declarar el terrorista contra mí”.