Bogotá, 25 mar (SP). El Presidente de la República, Álvaro Uribe Vélez dio a conocer este jueves el testimonio de un testigo según el cual el narcotráfico hizo alianzas con sectores de la Brigada del Ejército en Ocaña, Norte de Santander, en donde asesinaron a personas inocentes para aparentar la persecución a narcotraficantes, entre 2006 y 2007.
En su intervención en el Congreso Nacional de Productores de Papa, el Jefe del Estado relató que escuchó el testimonio del testigo en la oficina del Delegado de la Alta Comisionada de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, Cristian Salazar, junto al Ministro de Defensa, Gabriel Silva, y el Director del Programa de Derechos Humanos de la Vicepresidencia, Carlos Franco, así como funcionarios de la ONU.
Al reiterar la posición del Gobierno de llevar a cabo, desde el primer día de su administración, una política de Seguridad Democrática transparente y eficaz, el Presidente de la República afirmó que defenderá el honor militar cuando haya falsas acusaciones, pero también castigando los denominados “falsos positivos”.
El Jefe del Estado manifestó que el testimonio escuchado será transmitido al Fiscal General encargado.
El siguiente es el texto de la declaración del Presidente de la República:
“En la mañana de hoy acudí a la sede de las Naciones Unidas en Bogotá, me acompañó el señor Ministro de la Defensa y el señor Director de Derechos Humanos de la Vicepresidencia de la República, el Ministro Gabriel Silva y el Director de Derechos Humanos, el doctor Carlos Franco.
En presencia del doctor Cristian Salazar, delegado de la Alta Comisionada de Derechos Humanos, y en territorio diplomático de las Naciones Unidas, en presencia de otros funcionarios de las Naciones Unidas, escuchamos un testigo del caso de falsos positivos. Ese testigo nos transmitió su testimonio referente a casos presentados en Ocaña, Norte de Santander.
Ese testigo ha traído unas pruebas bien significativas de que en 2006 y 2007 sectores del narcotráfico, bandas criminales del narcotráfico de la región de Ocaña penetraron la Brigada y consiguieron alianzas con sectores de la Brigada para poder avanzar en el negocio ilícito de la coca, y para aparentar que sí perseguían a los narcotraficantes asesinaron a personas inocentes.
El testigo me expresó que había comentado casi todo a la Fiscalía. Pedí, en presencia de las personas que asistimos a la reunión y en territorio de Naciones Unidas, que la Constitución colombiana obliga a poner todos esos hechos en conocimiento de la Fiscalía. El testigo va a hacerlo, agregarle a la Fiscalía aquello que todavía no le ha dicho, y, por supuesto, yo transmitiré ahora mismo el tema al Fiscal General de la Nación (encargado, Guillermo Mendoza Diago).
El Gobierno, desde el primer día, ha expresado que la Política de Seguridad Democrática tiene que ser eficaz y tiene que ser transparente. Así como siempre hemos defendido a las Fuerzas Armadas cuando hay falsas acusaciones, también tenemos que defender el honor militar castigando falsos positivos.
Al Gobierno jamás le ha temblado la mano para castigar violaciones a la Ley. Recuerdo al principio de nuestro Gobierno, Guaitarilla, Cajamarca, después Jamundí; tan pronto conocimos casos de falsos positivos en 2008, en una reunión que empezó a las 9:00 de la noche en la Presidencia, a las 12:00 de la noche tomamos decisiones administrativas rigurosas, que se comunicaron al otro día a las 7:00 de la mañana.
Procederé de la siguiente manera: trasladaré este informe ahora mismo al Fiscal General de la Nación. Espero que el señor Ministro adelante una veloz investigación administrativa a ver si las decisiones administrativas tomadas por nuestro Gobierno son suficientes o a mirar si se requiere otra, u otras que no demoraríamos y que no vacilaríamos en tomar.
Y quiero hacer este llamado a las Fuerzas Armadas de Colombia: hay integrantes de las Fuerzas Armadas de Colombia que han denunciado violaciones de derechos humanos por parte de otros integrantes de las Fuerzas Armadas de Colombia.
Aquellos testigos comprometidos con la verdad, que se requieren para el buen nombre de las Fuerzas Armadas de Colombia, tienen que ser protegidos y rodeados del mejor ambiente.
Hace poco, en un informe que entregó las Naciones Unidas en Bogotá, nos expresó que en el último tiempo no ha habido falsos positivos y que las acciones tomadas por el Gobierno han sido eficaces, pues bien, lo que queremos es que en Colombia haya total eficacia de las Fuerzas Armadas y cero casos de violaciones a derechos humanos. Es mi llamado.
Así como tenemos que derrotar los terroristas que todavía tienen capacidad de hacer daños, como el carro bomba de Buenaventura, el país tiene que quitarse definitivamente cualquier sombra de duda en materia del respeto a los derechos humanos.
Quería aprovechar este generoso auditorio de Fedepapa para hacer esta comunicación a toda la comunidad de compatriotas”. |