A través del Centro de Coordinación de Acción Integral (Ccai), se desarrollaron acciones integrales de tipo económico y social. Más de 1,5 billones de pesos invertidos en proyectos para recuperar socialmente territorios donde no existía presencia institucional. Es de destacar 11 proyectos movilizadores de alto impacto en las zonas de consolidación.

Florencia, Caquetá, 22 may (SP). Desde el año 2003, 15 entidades del Estado entre ellas la Agencia Presidencial Acción Social, asumieron el reto de recuperar socialmente 15 zonas de Colombia en las cuales la presencia estatal era nula.

Luego de ocho años, la presencia de los programas sociales, económicos, de infraestructura y gobernabilidad son una realidad en estas regiones, gracias al trabajo del Centro de Coordinación de Acción Integral (Ccaii) que se constituye en uno de los principales legados de esta administración.

Durante la jornada de Balance de Gobierno 2002-2010 ‘Trabajo, Hechos y Corazón’, realizada este sábado en Florencia, Caquetá, la Agencia presidencial explicó que más de 1,5 billones de pesos se canalizaron en zonas como la Cuenca del Rio Caguán, en Caquetá, La Macarena, Sierra Nevada de Santa Marta, Montes de María, Tumaco, Sur del Tolima y Catatumbo, entre otras.

El desarrollo social ha hecho que la cobertura en salud haya aumentado al 91,5 por ciento, en educación al 91,8 por ciento y Familias en Acción al 90 por ciento de los 100 municipios de influencia del Ccai.

La recuperación social del territorio ha sido el eje de proyectos que han sido emblema del trabajo coordinado de las entidades del Estado, como la reubicación de Bojayá (Chocó) y el Cordón Ambiental de la Sierra Nevada de Santa Marta.

En Bojayá se invirtieron 33 mil millones de pesos, lo que permitió la construcción de 264 viviendas —un nuevo pueblo—, con acueducto, energía, colegio, hogar del Icbf, centro de salud, estación de policía y muelle, entre otras obras de infraestructutra.

Mientras tanto, la Sierra Nevada se recupera para el mundo con la construcción de ocho pueblos indígenas, respetando sus tradiciones arquitectónicas pero con servicios como colegio, centro de salud, restaurante escolar, con proyectos de seguridad alimentaria y de Familias Guardabosques, con los que se espera evitar de la deforestación de la Sierra y que este importante pulmón vuelva a respirar.