Mayo 22

   

Declaración del Presidente Álvaro Uribe Vélez sobre acciones del Gobierno a favor del sector lechero y beneficios del TLC con la Unión Europea

Florencia, Caquetá, 22 may (SP). “Con Europa el acuerdo es un acuerdo muy amplio. El acuerdo con Europa tiene el capítulo de derechos humanos, el capítulo del diálogo político, el capítulo de la protección de los derechos de los trabajadores. Con Europa el tratado tiene el capítulo de respeto de las normas ambientales.

En lo comercial siento que en la ciudadana hay una percepción de tranquilidad. Los gremios tienen satisfacción, menos el sector lechero. ¿Que hemos hecho nosotros frente al sector lechero? Voy a enumerarles, por lo menos, seis medidas o siete.

Primero, cuando llegamos. Un sábado, después del 7 de agosto, el primer Consejo Comunitario fue en Pasto. Me dijeron: ‘Mire, aquí cuando hicieron la apertura, se acabaron los cultivos de cebada y los cultivos de trigo. Nos pusieron a ordeñar en estos minifundios. Y hoy no hay a quien venderle la leche. Valía a 250 pesos el litro. Y no había quien la recogiera’.

¿Qué hicimos? Llegamos a Bogotá y revisamos. Ese año habían entrado 27 mil toneladas de leche al país. El Gobierno puso eso en licencia previa y empezamos a proteger el sector lácteo.

Después vinieron protecciones muy importantes, como el ICR, como la Ley de Agro Ingreso Seguro. Etcétera. Ahí hablamos de dos medidas.

Tres: frente a Europa, hay medidas con la Unión Europea, con España y el Gobierno Nacional. Con la Unión Europea firmamos una declaración conjunta obligatoria. ¿Qué dice? Que desde el año tercero de aplicación del tratado en adelante, en cualquier momento, se puede revisar por ambas partes el tema lechero.

O sea que si nos va mal con lo de la leche, quedó en la carta complementaria la cláusula explícita, por ambos gobiernos, la Unión Europea y el Gobierno de Colombia, de la revisión. Esa es la cuarta medida.

La quinta: los europeos se comprometieron, la Unión Europea, a dar un aporte de 30 millones de euros para ayudarle al sector lechero colombiano a ser más competitivo.

La sexta: el Gobierno de España se compromete, por su lado, a dar un apoyo para lo mismo.

La séptima: aquí la semana anterior tomamos dos medidas: una para la leche y otra para los lactosueros. El lactosuero es esa leche acuosa o esa agua enlechada que queda después de que se producen quesos.

¿En qué consisten esas medidas? Que una leche que va a entrar al país proveniente de cualquier mercado, un lactosuero que va a entrar al país proveniente de cualquier mercado, tiene que tener por lo menos que le falte un año de vigencia, para que no nos entren leche aquí y lactosueros viejos.

Dicen: ‘Mire, se nos va a vencer esto, mándemelos para Colombia. Lo vendemos bien barato, pero no dejemos que se venza’. Ahora eso se impide. Las medidas del Gobierno dice: se necesita que por lo menos le falte un año de vigencia a la leche o al lactosuero que se vaya a importar a Colombia. Creo que esto es bien importante.

Y estamos trabajando el Conpes para la leche, para ayudar a todos los productores de leche.

Un crítica, muy respetuosa, constructiva: Colombia produce hoy 17 – 18 millones de litros de leche, pero apenas se industrializa la mitad. Hombre, creo que la industria de leche de Colombia, si no es capaz de industrializar todo esto solita, tiene que hacer alianzas internacionales. Y cuánto ayuda en el mercadeo.

Creo que hay que invitarlos. Y sería muy importante en el Conpes dejar eso: una recomendación a la industria lechera colombiana de aliarse con la comunidad internacional para poder industrializar toda la leche. El documento Conpes tiene recomendaciones, tiene apoyos, tiene diagnósticos.

Por favor, Ministro de Agricultura, que en el diagnóstico esté esa brecha que hay entre 17 – 18 millones de litros que se producen y una industrialización mínima. No alcanza a industrializar más del 50 por ciento. Y en las recomendaciones, esa observación.

Ahora: no creo que sea difícil que encuentre socios internacionales, porque Alpina ha avanzado algo. Veo que hay una sociedad de Alquería y Danone en la Sabana de Bogotá, reciente.

Creo que en las compañías colombianas, para crecer pueden buscar socios internacionales. Un ejemplo, apreciados productores de leche de Colombia. Nueva Zelandia, no lo conozco, pero el informe que uno tiene de ese país es que es un país muy exitoso en leche. Porque es un país con una pradera fértil y con una pradera fresca, sin inundaciones y sin sequías. Una pradera en donde todos los días llueve un poquito, como en un invernadero. Apenas cae el agua necesaria.

Entonces produce mucha leche. Y los países que van a negociar con nueva Zelandia se mueren de miedo. Dicen: ‘Nueva Zelandia nos arruina el sector lechero’.

¿Qué hizo Brasil para poder negociar con Nueva Zelandia? Los productores y los industriales de leche de Brasil se han aliado con los neozelandeses y están saliendo adelante. La alianza con el industrial internacional ayuda también en el mercadeo internacional de la leche a abrir mercados, a hacer acuerdos, a tener menos dificultades.

El acuerdo con Europa es bueno para Colombia. Es que el mercado europeo tiene hoy 500 millones de consumidores. Les pregunto a ustedes: ¿nos quedamos en la vieja apertura y que nos llenen aquí de productos extranjeros y no tengamos donde mandar los nuestros, o hacemos estos acuerdos?

Es mucho mejor tener acuerdos para tener con quien discutir. Si uno no tiene acuerdos, uno va y les hace un reclamo a los europeos. Y dicen: ‘No, es que yo no tengo acuerdo con ustedes, a nada de esto estoy obligado’. En cambio un acuerdo sí crea las condiciones para poder discutir.

Si uno abre unilateralmente la economía y va y les dice a ellos: ‘Pero, miren, fue que yo les abrí, allá me están llegando máquinas, productos químicos, bienes de capital de ustedes, abrí para que me favorecieran, ayúdeme usted con este producto, ayúdeme con las flores, con el banano, con los biocombustibles’. Entonces ellos le dicen: ‘Yo no tengo compromiso con ustedes. Ustedes abrieron porque quisieron, unilateralmente, pero conmigo no tienen acuerdo’. Creo que el acuerdo da la posibilidad de equilibrar las cargas.

Entonces invito a los lecheros colombianos, les he contado esto de buena fe, invito a que salgamos adelante, pero además hay que tener en cuenta una cosa: el plazo es de 20 años, porque se demoran 17 años en la desgravación, y es difícil que antes de dos años el tratado esté implementado. Entonces mínimo 19 años. Es una transición larga, en la cual creo que tenemos tiempo para mejorar muchísimo.

Y miren una preocupación que a mí me asalta. En el Caquetá hoy hay hoy menos capacidad de procesamiento de la leche que antes. No obstante que se ha triplicado la producción”.

 

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