Barranquilla, 23 may (SP).Poblaciones en situación de vulnerabilidad y otros grupos especiales reciben, a través del Servicio Nacional de Aprendizaje (Sena), formación ocupacional de acuerdo con las necesidades del mercado laboral, con el fin de mejorar sus niveles de empleabilidad, promoviendo su formación e inserción laboral.
En 2002, el Sena asignó un total de 54 mil 112 cupos de formación para atender a grupos considerados entre la población vulnerable: mujer cabeza de hogar, artesanos, discapacitados, indígenas, reclusos, menor infractor, reintegrados, sobrevivientes de minas antipersonal, personas de la tercera edad, trabajador infantil, negritudes y minorías étnicas. Adicionalmente, los desplazados por la violencia se beneficiaron con un total de 9 mil 199 cupos.
Para el año 2009, la cifra se incrementó significativamente con un total de un millón 614 mil 879 cupos de formación para poblaciones en situación de vulnerabilidad y demás grupos especiales a nivel nacional. Igual situación se presentó con los cupos otorgados a desplazados por la violencia, cuyo total aumentó a 443 mil 332.
El Sena busca favorecer los procesos de inclusión social, donde se reconozca la diferencia y se impulse la equidad de este grupo de la población colombiana, conocido como el conjunto de personas que se encuentran en condiciones de fragilidad, ya sea por su condición étnica, género, edad, capacidad funcional, nivel económico, cultural, o porque requieren atención especializada por parte de las entidades del Estado.
La atención que la entidad le proporciona a este colectivo tiene como base la formación complementaria, la formación titulada, los programas de formación ocupacional, algunos convenios interinstitucionales, la formación en emprendimiento y empresarismo y la asesoría para el desarrollo de proyectos productivos.
Estrategias que trabajan por la población vulnerable
A través de la estrategia Sena Incluyente, dirigida a todo tipo de discapacitados y a víctimas de minas antipersonal, se han generado acciones de formación profesional en los 115 centros del país, promoviendo su participación en todos los espacios de la vida social, certificando competencias laborales y haciendo intermediación laboral a través de los centros del Servicio Nacional de Empleo, con el fin de llegar a la inclusión socioeconómica de este colectivo.
Gracias a esto, el año pasado 1.004 personas en condición de discapacidad encontraron empleo, 428 iniciaron sus proyectos productivos y 20.853 se formaron en un programa de la entidad.
Para mitigar el impacto de la violencia en la juventud, se creó Sena en mi Barrio, una estrategia que llega a los jóvenes de las comunas en ciudades como Medellín, con programas de formación que ayudan a menguar los conflictos de la zona y que son acordes a sus necesidades.
El Sena también participa en la Red Juntos, estrategia del Gobierno Nacional que articula los esfuerzos de las entidades del Estado para lograr que un millón y medio de familias colombianas superen la pobreza extrema. |