Encuentro del presidente Uribe con la Premio Nobel de Paz 2003
"FUE UNA REUNIÓN CONSTRUCTIVA"
Bogotá, 29 feb (SNE). La reunión entre la Premio Nobel de Paz, Shirin Ebadi y el Presidente, Álvaro Uribe Vélez fue cordial y productiva.
Durante dos horas -sólo estaba prevista media hora de conversación- el Presidente le explicó a la Premio Nobel todos y cada uno de los componentes de su política de Seguridad Democrática y sus programas de Reactivación Económica y Social.
"Mi concepto de seguridad no es autoritario. Es para proteger a todos los ciudadanos por igual, más allá de sus creencias religiosas o ideológicas. Por eso se llama de Seguridad Democrática", le dijo Uribe.
Le contó, por ejemplo, que en las dos jornadas electorales que tuvo el país el año pasado, todos los partidos y movimientos, incluidos los de oposición, gozaron de todas las garantías.
"Hasta ahora las garantías políticas en Colombia habían sido teóricas, formales. El año pasado fueron reales y efectivas. Todos los candidatos, en el caso de las elecciones para gobernadores, alcaldes, diputados y concejales, tuvieron acceso a los medios de comunicación. Lo mismo quienes se opusieron al Referendo y defendieron las abstención", le explicó el Presidente.
Ante las dudas de la señora Ebadi y de sus acompañantes sobre el llamado Estatuto Antiterrorista y la Ley de Alternatividad Penal, el Presidente Uribe explicó que se trata de herramientas que necesita el Estado para enfrentar eficazmente a los grupos terroristas, tanto guerrilleros como paramilitares, y que la Ley de Alternatividad Penal servirá por igual para facilitar el desarrollo de procesos de paz serios con los mismos grupos al margen de la ley.
"Las medidas adoptadas en el Estatuto Antiterrorista -agregó Uribe Vélez- tendrán la vigilancia de la Fiscalía , la Procuraduría y el Congreso".
Sidiki Kaba, presidente de la Federación Internacional por los Derechos Humanos, expresó al Presidente su preocupación sobre los desplazados y su inquietud porque, según él, las tierras de los desplazados que van a quedar en manos de los paramilitares.
El Presidente le explicó que los grandes terratenientes hoy en Colombia son los narcotraficantes, los paramilitares y la guerrilla. Que para combatirlos fue aprobada, por iniciativa del Gobierno, la Ley de Extinción de Dominio que, hasta el momento, ha permitido la confiscación de más propiedades en un año, que las que había confiscado la justicia colombiana en toda su historia.
Al final de la reunión, que se desarrollo en inglés, la Premio Nobel de Paz, Shirin Ebadí, le dijo al Presidente que para que la paz sea posible, es indispensable que la gente olvide y que el Estado debe pensar en las víctimas de la violación de los derechos humanos. "Si bajan la tensión y el odio, la Paz es posible", dijo la señora Ebadi.
El Presidente le contó que el 50% de los colombianos ha sido víctima de la violencia o del secuestro. Que él mismo perdió a su padre durante un intento de secuestro por parte de las Farc y que, a pesar de eso, participó en el proceso de paz del Presidente Belisario Betancur aún contra la opinión de su familia. "Soy un combatiente de las ideas. Vehemente a veces, pero soy un Presidente de profundas convicciones democráticas".
El Presidente autorizó a la Premio Nobel , Shirin Ebadi, a llamarlo cada vez que tenga una queja. "De usted si recibiré con humildad sus regaños".
Al final del encuentro, el presidente Uribe declaró a los periodistas: "Fue una reunión constructiva. Examinamos ampliamente la situación del país. La Premio Nobel se refirió a toda la situación de Colombia con mucho cariño, con mucha preocupación. Tiene ella una actitud muy noble, muy considerada, y yo diría que fue una muy buena reunión".
¿QUIÉN ES LA PREMIO NOBEL 2003?
Shirin Ebadi es la primera mujer musulmana en obtener el Premio Nobel. El Comité Noruego se lo otorgó por su lucha por la democracia y los derechos humanos, en particular los de las mujeres y los niños de su país natal.
La señora Ebadi nació en Irán en 1947. En 1969 se graduó en la facultad de leyes de la Universidad de Teherán. En 1975 y 1979 se desempeñó como la primera jueza de su país, puesto que abandonó tras el triunfo de la revolución en ese país.
De inmediato regresó a sus labores de abogada, siempre defendiendo los derechos civiles de mujeres y niños.
En 1994 participó en la fundación Sociedad para Proteger a los Niños de Irán. En 1996 recibió un premio otorgado por la organización Human Rights Wacht. En el 2001 recibió el Premio Rafto, que otorga la organización noruega Human Rights Prize.
Ebadi, de 56 años, se distingue por rechazar el uso político que se le da en el mundo al concepto de derechos humanos y por cuestionar la diferenciación que se hace entre los musulmanes y el resto de la humanidad.
"Como abogada, jueza, ponente, escritora y activista, ella ha hablado de manera clara y firme en su país, Irán, y mucho más allá de sus fronteras", dijo el Comité Noruego en la declaración que oficializó el Premio Nobel para Shirin Ebadi.