Impresores, distribuidores y editores manifestaron que cumplieron las metas que se habían propuesto, mientras que la delegación de artistas, músicos, cineastas y escritores se fueron felices de haber mostrado la cara amable del país.

Bogotá, 3 dic (SP). Con un positivo balance para la cultura y el arte colombiano, concluyó en México la participación de más de 300 artistas, escritores, cineastas y músicos, en la 21° Feria Internacional del Libro de Guadalajara.

Colombia ofreció a los 559.217 asistentes a la Feria, en los nueve días que duró, un total de 132 actividades entre exposiciones, foros literarios, conciertos, funciones de teatro y cine, y eventos académicos.

“Ninguna campaña de promoción en el exterior podría haber sido tan efectiva como lo ha sido estar en el corazón de esta Feria, una verdadera ventana al mundo”, aseveró la directora de la Biblioteca Nacional de Colombia, Catalina Ramírez.

Más de 1.600 periodistas de todo el mundo publicaron diariamente noticias sobre nuestro país, agregó la funcionaria y explicó que los diarios internacionales pusieron a figurar a Colombia en sus primeras páginas.

“Todas las manifestaciones culturales que trajimos a esta Feria permanecerán en el alma de esos 60 mil visitantes diarios que pisaron nuestro pabellón”, agregó Ramírez.

Los editores, impresores y distribuidores colombianos también presentaron un balance satisfactorio.

El presidente de la Cámara Colombiana del Libro, Moisés Melo, destacó la gran participación de las pequeñas editoriales y las universitarias, que lograron hacer visibles sus libros en los salones de negocios de la Feria, con lo cual consiguieron alianzas con editores locales y distribuidores.

Destacó el éxito que obtuvo la librería colombiana, la cual permitió mostrar un panorama general de la literatura y la edición nacional.

“Se ofrecieron 4.100 títulos, de los cuales el 90 por ciento han sido editados en los dos últimos años. Fue una oferta viva y reciente y muchos libros se agotaron desde el primer día. Se vio un gran interés del público por toda nuestra producción editorial, especialmente por la narrativa, los libros infantiles y académicos”, dijo Melo.

El sector del turismo también se vio beneficiado con la participación de Colombia como país invitado de honor a la Feria. En el pabellón nacional se entregaron más de 150 mil folletos sobre los diversos sitios de interés que tiene el país.

El representante de Proexport en el evento, Augusto Zanabria, manifestó que la gente que visitó la Feria quedó enamorada de Colombia.

“Entendieron el eslogan que dice que ‘el único riesgo de ir a nuestro país es que se quieran quedar’. Colombia les mostró a los mexicanos que hay opciones de inversión. Con esta participación mostramos una cara amable de un polo de desarrollo nuevo para el mundo”, dijo.

Por otra parte, las artesanías colombianas se robaron el show. La empresaria mexicana Leticia Olmedo, quien estuvo encargada de su comercialización en la Feria, afirmó que se vendió un estimado de 50 mil dólares, y anunció que se solicitó la representación de la marca para México, y que próximamente abrirá un par de tiendas en este país.

Finalmente, el presidente de la Cámara Colombiana del Libro, Moisés Melo, manifestó que lo más valioso que se lleva Colombia de su participación en este evento, es saber que a través de su producción cultural Colombia puede conquistar el mundo.

“El país tiene que tener confianza en sí mismo para salir a conquistar el mundo con su música, su literatura, su pintura, sus estudios académicos, pues esto crea un espíritu de entusiasmo en toda la población, tal y como pasa cuando se sale a competir con la Selección Colombia de Fútbol”, concluyó.

Datos curiosos de la Feria

• Cartagena y San Andrés fueron las ciudades de Colombia por las que más preguntaron los mexicanos.

• Un video de la cantante barranquillera Shakira fue uno de los éxitos de pabellón de Colombia. Cada vez que lo pasaban, la gente se aglomeraba para verlo.

• El éxito que tuvo el café literario con la marca Juan Valdez fue arrollador. Los mexicanos participaron en clases de café y las solicitaban.

• Las chivas fueron los objetos artesanales más cotizados de la Feria y los que más rápido se agotaron. También las mulas, el sombrero vueltiao y la cañaflecha llamaron mucho la atención.

• Los libros más pedidos en el stand de Colombia fueron los de Héctor Abad Faciolince, Efraim Medina, Germán Espinosa, Fernando Vallejo, Laura Restrepo y Álvaro Mutis. Sin embargo, el que más se vendió en el pabellón fue el de María Villegas, titulado “Cosas de niñas”.

• En la librería de Colombia no se pudo vender ningún libro de García Márquez por cuestión de derechos. Pero “Cien años de soledad”, la edición conmemorativa que publicó el Grupo Santillana, fue el libro más vendido de la Feria.