• El Presidente reiteró el llamado a los beneficiarios de este programa para que sean cumplidos en el pago de los créditos. También destacó el impacto social de la iniciativa y su contribución al desarrollo del país.

Cartagena, 7 sep (SP). La Banca de las Oportunidades es un programa social pero su carácter no es asistencialista, advirtió el presidente de la República, Álvaro Uribe, al intervenir este viernes en el seminario internacional “Masificar el acceso a los servicios financieros: estrategias comerciales y tecnológicas”, que se realiza en Cartagena.

El Jefe de Estado hizo la precisión al llamar la atención de los beneficiarios de la iniciativa para que sean cumplidos en los pagos de las cuotas de sus créditos y, de esta manera, contribuyan a la consolidación del programa.

“Hay que ser muy insistente en que esto es una política social estructural, no asitencialista, que necesita un gran compromiso del sector privado, del Gobierno, y un gran compromiso de los usuarios de esos créditos”, subrayó el Mandatario.

Por eso, dijo que es fundamental mantener una gran pedagogía para crear una sólida conciencia popular sobre la importancia en el cumplimiento en los pagos.

En este sentido destacó el experimento que se busca implementar en el municipio de Maicao (Guajira), con el apoyo de las empresas de servicios públicos.

“Yo confío que en la medida en que el experimento de Maicao, de vincular las empresas de servicios públicos para que, a través de las facturas, se vayan pagando las cuotas, los intereses y las cuotas de capital de estos créditos me parece que es un buen camino”, explicó el mandatario.

En su discurso, Uribe también resaltó el efecto social del programa en las distintas regiones del país, constituyéndose como tejido social de la Nación y factor dinamizador de la economía, mediante la oferta y la demanda.

“Se desembolsa un microcrédito, ese microempresario compró un equipo, se amplió y empezó él a percibir un ingreso. Entonces, él aumentó esa oferta y aumenta su demanda como consumidor, rápidamente. No creo que eso se dé en otros niveles de la economía”, indicó.

Así mismo, destacó el efecto que genera la iniciativa dentro del propósito del Gobierno de reducir la deserción escolar y el desempleo en el país, pero en particular el desempleo entre los jefes de hogar.

“El microempresario que resuelve su problema, el cónyuge o la cónyuge gana tranquilidad, hay más tiempo para atender a los hijos, tiene un gran impacto en la disminución del desempleo de jefes de hogar y en la disminución de las tasas de deserción escolar”, anotó el mandatario.

Recordó que entre los años 1994 y 2000 Colombia vio crecer el desempleo de jefes de hogar del 4 al 10 por ciento, simultáneamente con un crecimiento de la deserción escolar. Ahora, el desempleo de jefes de hogar está en el 5 y medio por ciento, pero la meta es que al final de este Gobierno la cifra baje al cuatro por ciento.