Santa Marta, 29 feb (SP). “A mis compañeros de Gobierno y a mí nos da mucho gusto estar en esta Segunda Reunión Temática de la Región Caribe Colombiana. Creo que la que hicimos hace algunos viernes en Barranquilla, sobre el tema de educación, fue bastante útil.
Por supuesto, de estas reuniones siempre queda el trago amargo de todo lo que falta, en un país en donde faltan recursos en todos los niveles. Pero creo que fue bastante útil.
El Gobierno comunitario, apreciados compatriotas del Caribe, para referir a él de manera muy simple, es un Gobierno que busca creciente participación ciudadana en las tomas de decisiones, en la ejecución de las decisiones, en la evaluación de las decisiones, en la vigilancia de las decisiones. Eso conduce a mayor eficiencia en la asignación de los recursos y a mayor transparencia y a mayor equidad.
Algunas prácticas de Gobierno comunitario: Los sábados, generalmente, tenemos los consejos comunitarios; venimos dándole ahora preferencia a toda la zona de frontera del oriente colombiano: el Amazonas, el Vichada, el Arauca, el Vaupés.
Hace dos sábados no se pudo hacer por, bendito sea mi Dios, por un problemita de salud del suscrito, pero ese sábado se aprovechó para hacerle un control de gestión al tema de Etesa, al tema salud, al tema regalías, al tema de toda la política económica. Y mañana hay una nueva reunión con el Secretario de Comercio de Estados Unidos y con una delegación parlamentaria norteamericana y me duele no poder hacer, por esta reunión, consejo comunitario, pero ustedes saben que el Gobierno es devoto por estas instancias de participación comunitaria.
Los lunes estamos haciendo los consejos de seguridad, el último fue en Barrancabermeja, que tienen una primera sesión con participación amplia de la comunidad y después con las Fuerzas Militares y de Policía, la Fiscalía.
Y estamos procurando los viernes en la tarde hacer estas reuniones temáticas regionales. Ya se hizo la reunión de educación en Cali. Yo no pude ir ese día por razones de salud, pero estuve toda la tarde en la Presidencia de la República siguiéndola y participando a través de un teléfono, y vamos a ver cómo podemos continuar con esta disciplina del trabajo comunitario, además de muchos foros que se atienden de manera participativa.
Quiero compartir con ustedes una gráfica muy elemental. Quiero decirles que yo he sido pésimo estudiante de dibujo, por falta de aptitudes, de canto. Soy muy sordo; es un defecto para el canto, una virtud para la política. Tengo buen estado físico, pero soy muy tieso; me va mal en la gimnasia, que necesita flexibilidad, y de pronto se traduce también en la manera de mirar la vida pública colombiana donde me falta flexibilidad.
Pilares de Gobierno
Este mal dibujante ha venido pensado en una manera muy simple de concebir lo que pensamos de la Patria.
Entonces, hemos venido pensando este Gobierno en función de una casita: En el vértice superior del techo una palabra: ‘confianza’, palabra clave, confianza para nuestra Patria, confianza para vivir en Colombia, para invertir en Colombia, para estudiar en Colombia, para vivir la vida en Colombia.
Y esa casita tiene tres pilares: el primero de ellos, seguridad desde la democracia, muy importante resaltarlo desde la democracia. América Latina vivió esos proyectos de seguridad de ingrata recordación desde la dictadura, auspiciados por la doctrina de seguridad nacional.
Segundo pilar: inversión, confianza inversionista desde la responsabilidad social. Es bien importante. La responsabilidad social traducida en, primero, transparencia en la contratación, en la solución de disputas, en la tributación, transparencia. Segundo, solidaridad de los inversionistas con las comunidades, especialmente en temas como el ambiental. Y hay uno de los temas que hoy nos concita: ¿Cómo va a ser la solución definitiva al problema de contaminación y de dificultades al turismo y a los residentes que crea el embarque de carbón en los puertos de Santa Marta?
He dicho yo que la falta de solidaridad de inversionistas en el mundo con las comunidades, cuando los gobiernos no han intervenido debidamente, ha causado finalmente revuelos populares que han instalado dictaduras, destruido democracias, creado conflagraciones.
Algunos colombianos me comentaban con mucha preocupación la intervención del Gobierno el año pasado en la Jagua, en tres consejos comunitarios. A mí me pareció muy buena; inusual, pero muy buena. Porque lo que se estaba convirtiendo en una conflagración, se ha convertido en un diálogo muy constructivo.
Yo les diría que el equilibrio se logra de la siguiente manera: los gobiernos no pueden ser hostiles a la inversión, tampoco indiferentes frente a los reclamos populares. ¿Qué hicimos en la Jagua? ¿Qué estamos haciendo? Practicar ese equilibrio.
Algunos populismos del mundo son hostiles a la inversión. Algunos neoliberalismos del mundo son totalmente indiferentes a los reclamos de la comunidad; ni lo uno ni lo otro. Creo que ha sido bien interesante esa experiencia, muy difícil, por ciento, de reunirnos en una plaza de la Jagua con los inversionistas, con las autoridades locales, nacionales y con la comunidad.
Creando ambiente para los inversionistas y sensibilidad para responder a la comunidad. Esa solidaridad es necesaria. Sin ella no es sostenible la confianza inversionista, porque la ciudadanía termina incendiada contra la inversión.
En la Costa tengo, en este Caribe de la Patria tengo dos preocupaciones en ese tema: el tema del carbón en todas las playas de Santa Marta y el tema del carbón en el departamento del Cesar, donde hay que practicar esa responsabilidad social de la inversión con las comunidades, especialmente en materia de medio ambiente.
Y el tercer tema de responsabilidad social, es el tema de fraternidad en las relaciones laborales. Ni de capitalismo salvaje ni de odio de clases; esos dos extremos han sido perversos para la humanidad. Fraternidad.
Y el tercer pilar, aquí, es el de cohesión social. Están integrados. Hace pocos días, con unos profesores de la Universidad de Harvard que vinieron y estuvieron reunidos con muchos alcaldes y gobernadores, fueron también al consejo de ministros, ellos criticaban, algunos gobiernos extranjeros, por tratar muchos puntos a la vez. Y yo les decía, de pronto el Gobierno nuestro está incurriendo en eso. Es que son tantas las necesidades colombianas que es muy difícil priorizar. Y falta de todo. Entonces, faltan mil cosas en salud y faltan mil cosas en educación y faltan mil cosas en infraestructura.
Y donde falta de todo es imposible seguir aquella recomendación que le hacen a uno los profesores de ciencia política: ‘Dedícate a dos o tres cosas’. Aquí es bien difícil. No es sino escuchar las intervenciones juiciosas y llenas de compromiso del Alcalde y del Gobernador. La cantidad de temas que tienen que atender. Y todos urgentes.
Lo que veíamos en esa reunión es que estos tres pilares y el techo, la palabra confianza, están integrados. Si no hay seguridad, no hay inversión. Y la seguridad es uno de los presupuestos -esencial, pero no el único- para la inversión. Porque además de la seguridad está el modelo de Estado: ¿Es estatista? ¿Es abierto a la inversión? Colombia ha definido lo segundo.
Esta la lucha por la salud fiscal de la Nación, la reducción del endeudamiento, el déficit, la necesidad de hacer reformas que tantas veces generan tantas controversias. Todas esas huelgas de Francia. Cuando de pronto yo veía un pantallazo de televisión con esas huelgas decía: ‘Dios mío, y aquí que ya hemos pasado recientemente esas reformas, como la de pensiones, en la constitución’.
El tema de las transferencias, tan difícil. Tan difícil porque hay que buscar un equilibrio entre la promoción de la descentralización y el buen cuidado para no quebrar la Nación.
Miren, este año, solamente, tengan en cuenta esta cifra, el Gobierno Nacional le tiene que trasladar al Seguro Social, para pagar pensiones, 6 billones 400 mil millones; solamente de transferencias al Seguro Social. El Seguro Social recauda, más o menos, dos billones en cotizaciones, pero necesita otros 6 billones 400 para pagar pensiones, y eso lo tiene que trasladar el Gobierno Nacional.
Entonces son reformas muy difíciles y, finalmente, todo el mundo queda disgustado. A mí me dicen alcaldes y gobernadores: ‘Pero si usted ha hecho una carrera política en la provincia’, que es cierto. Y yo les contesto: ‘Pero si quebramos la Nación se acaba la descentralización’.
Ya vimos, ya vimos que hubo años en que esos giros se hicieron imposibles. Muy difícil esos equilibrios. Y enseguida escriben los economistas, críticos del Gobierno: ‘El Gobierno es manirroto: por complacer al Congreso, cedió lo que no podía ceder en transferencias’.
Reformas de entidades del Estado
Y hemos reformado, para la salud fiscal de la Nación, 419 entidades del Estado. ¿Y cuánto falta? La primera, Telecom; la última, Ecopetrol. Toda una dificultad. Veo ahora que está en la fase final de ingeniería de detalle, la Refinería de Cartagena; aquí veo a una de sus grandes promotoras, la Senadora (Piedad) Zuccardi, al principio del Gobierno hablábamos de la Refinería de Cartagena y yo veía eso como algo inalcanzable por los costos.
Pero que recorrido político tan difícil, desprenderla de la parte central de Ecopetrol y convertirla en empresa mixta, ahora con un socio, con un socio europeo, creo que es suizo, que va a permitir invertir 2 mil millones de dólares y convertirla al nivel de una de las mejores refinerías en el mundo. Ecopetrol pone el 50 por ciento; el socio suizo, el 50 por ciento. Todas esas reformas son muy difíciles.
La reforma de las clínicas, que apenas empieza y que tiene aquí en Santa Marta una gran expresión. La Clínica Campo Serrano de hoy, administrada por la Fundación Cardiovascular de Bucaramanga, es incomparable con la Clínica Campo Serrano de hace dos años.
Esa reforma de las Clínicas del Seguro Social o la Clínica Enrique de la Vega de Cartagena, operada hoy por la Fundación Religiosa de San Juan de Dios, incomparable con la Clínica que administraba el Seguro Social.
Y esas reformas generan mucha controversia política y muchas dificultades. Cuando yo veo que mis compatriotas acudieron en medio millón a capitalizar a Ecopetrol digo: ‘Cómo hemos evolucionado’. Dejar atrás esos radicalismos políticos, ideológicos que impedían esa reforma en Ecopetrol, cuando la tendencia prevalente en América Latina quisiera ser hoy el estatismo total, Colombia se atreve a dar ese paso, que va a ser enormemente positivo para el país, de capitalizar hasta ahora el 10 por ciento, con recursos de particulares colombianos, a Ecopetrol.
Pero ese proceso reformista tiene que seguir para que el Estado sea sostenible, eficiente. El Estado tiene que escoger entre el burocratismo o el servicio eficiente a la comunidad. Son reformas sin acabar el Estado, sin desmantelarlo.
Yo recuerdo que a mis compañeros de Gobierno y a mi nos dijeron: ‘Miren, firmen dos partidas de defunción. Firmen la partida de defunción de Telecom y la partida de defunción de Paz del Río, cuando llegamos. Y dijimos: ‘No. Vamos a reformarlas’.
‘Ah, es que Telecom no se necesita, ahí está el sector privado’. Dijimos: ‘No. Hay que conservar un patrimonio público; nadie sabe que puede pasar en fallas de mercado, cómo atender comunidades remotas’. Y yo creo que ese proceso permitió salvar a Telecom y su funesto impacto sobre el presupuesto. Imagínense, tenía valor negativo; hoy tiene valor positivo. Si no tuviera hoy con qué pagar pensiones, que iba para no tener con qué pagar pensiones, el Gerente de Telecom le estaría cobrando al Ministro de Hacienda, este año, 650 mil millones, chequecito para pagar pensiones.
Y el otro tema, sin un peso, en un país requiriendo conectividad y no tenía un peso para inversión. Ahora está ejecutando una inversión de 8 billones en el país.
Estas reformas son difíciles, pero ayudan mucho a la salud fiscal de la Nación.
Estímulos a la inversión
La parte tributaria. Yo quiero siempre llamar la atención de la Región Caribe de la Patria para utilizar los incentivos tributarios. Creo que el Congreso sabiamente nos ha ayudado a cambiar una tendencia en la orientación económica de Colombia: el país era muy negado, muy renuente a introducir estímulos a la inversión y los han introducido.
Ahora se puede hacer una zona franca donde se quiera. La atractividad del Caribe para instalar zonas francas es única. Ya no tiene que ser en un lote predeterminado, sino donde se quiera. Ahora no tiene que ser un conjunto de empresas, puede ser una sola. Los puertos pueden ahora ser zona franca. Eso, eso con todos los beneficios que trae, les quita cualquier excusa para hacer las reformas que tienen que hacer, especialmente aquí en Santa Marta. Temas que vamos a tratar hoy.
Los estímulos al turismo: Un país que le ha dado 30 años de exención tributaria a los nuevos hoteles. Los estímulos a los cultivos de tardío rendimiento: diez años de exención tributaria después de que un cultivo de tardío rendimiento empiece su periodo productivo. El estímulo general a las inversiones: toda inversión que se hace hoy en Colombia tiene un 40 por ciento de deducción tributaria.
Si ustedes tienen una empresa, invierten 100 pesos, se ganó 200, pueden deducir de esos 200, 140. Ya no van a pagar impuesto sobre 200, sino sobre 160.
La Ley que nos permite firmar pactos de estabilidad a 20 años con el sector privado. Ahora el Ministro, el 16 de marzo, aspira a presentar el proyecto, uno de los proyectos que falta, que es el proyecto para introducirle unos ajustes al sector financiero, a fin de que pueda ser, de que, por ejemplo, los fondos de pensiones puedan intervenir en más áreas, contribuir más al desarrollo nacional.
Entonces, lo que nos decían estos profesores, ‘hombre, lo que vemos en lo de Colombia es que sí hay muchos temas pero están integrados, están integrados. Yo creo que eso es importante para persistir. Sin seguridad no hay inversión y sin inversión, la política social se queda en el discurso, que es lo que mi generación oyó: más discurso social que resultados sociales.
Yo creo que en lo social el tema es ganarle con los resultados la batalla al discurso. Y si se logra avanzar en cohesión social, se logra legitimar el tema de seguridad y el tema de confianza inversionista.
Crédito a los departamentos
No alcanzamos a tratar hoy el tema de infraestructura, todo. Yo los voy a invitar a tratar estos temas: el Plan 2500, donde vamos, especialmente, a detenernos en los contratos que van mal. Porque la meta es sacar adelante todo el Plan 2500, que tienen unas obras muy importantes para toda la Patria y para el Caribe colombiano.
Segundo, el crédito a los departamentos. Esa es una de las razones de la presencia del Ministro de Hacienda aquí. Porque no alcanzamos a empezar nuevas vías departamentales, entonces está la oferta de ese crédito a los departamentos. Ustedes saben que hay dos ofertas de crédito, una para el Plan Departamental de Aguas, que hoy no lo alcanzamos a tratar aquí.
Tengo tres buenas noticias del Caribe y los quiero felicitar. ¿Dónde está el Gobernador de La Guajira? Hombre, yo le quiero dar una felicitación muy especial. Esta mañana comunicó la decisión de que echa para adelante totalmente el Plan Departamental de Aguas. Eso merece un aplauso, Gobernador (Jorge) Pérez Bernier.
Una segunda noticia muy importante: en Magdalena empieza una nueva fase, que fue pionero. Uno tiene que procurar tener la menor subjetividad: a todo señor, todo honor. Y hablar de las cosas buenas es muy necesario. Generalmente hablamos de las malas. Hay que hablar de las buenas.
Mire, el Magdalena no tenía regalías. El Gobernador Trino Luna y los parlamentarios se empeñaron, hasta que las conseguimos.
Pero, qué decisión tan responsable. Dijeron: ‘De entrada van al Plan de Agua’. No dilapidaron un peso. De entrada la pusieron en el Plan de Aguas y ya están empezando la segunda etapa. Y me dieron esta mañana la buena noticia de que no solamente empiezan la segunda etapa, sino que conectan Taganga.
O sea que, un gran avance para todo el litoral turístico de Santa Marta. Veo que podemos sacar adelante el Plan de Aguas en todo el Caribe.
El segundo crédito es para vías, para vías departamentales.
Yo les quiero hacer los siguientes comentarios: en mi concepto, todo el Caribe puede con ese crédito. Saludo al Gobernador de San Andrés, muchas gracias, Gobernador, por acompañarnos.
La Guajira puede con el crédito de vías departamentales. El Cesar puede con ese crédito. El Magdalena puede, de los tres es el menor, porque es el que menos regalías tiene, pero puede.
El Atlántico no tiene regalías. Es un departamento sin regalías, pero bien manejado. En mi concepto van muy adelante en agua, va a complementar ahora el Plan Departamental y puede con el crédito de vías.
Bolívar. Tiene muchas dificultades, pero le han crecido mucho las regalías. Yo creo que, bien orientado, puede con el crédito de vías.
Sucre ha tenido muchas dificultades. ¿Está produciendo ya, (Manuel) Mahiguashca (Viceministro de Minas) cuántos pies cúbicos de gas al día? Treinta millones. Me decía el Ministro de Minas, no nos acompaña porque tiene que viajar al Canadá. Está en la junta de Ecopetrol y empata con un viaje a Canadá.
Me decía que esa producción de gas Sucre puede subir a 50 millones de pies cúbicos. A Sucre yo creo que lo espera un panorama más despejado en regalías. A mí me parece que hay que ayudarle a Sucre a que obtenga los dos créditos.
Córdoba. Puede con ambos. Quiero agradecerle a la Gobernadora, porque en pocas horas que tiene de haberse posesionado y ha sido muy eficiente. Se metió a ayudar a resolver el problema de los acueductos del Bajo Sinú y del operador del Plan Departamental de Aguas. Da gusto ver unas decisiones claras, tajantes, en pocas horas y con toda la transparencia.
Ese departamento tiene grandes posibilidades, porque ahí hay un salto enorme. Es un departamento que ha pasado de recibir, en su conjunto, 30 mil millones de regalías al año. Yo creo que este año, sumando las regalías de la Corporación del Valle del Sinú, 80 mil, las del departamento y las de algunos municipios, va a superar 200 mil millones.
Mi preocupación sería el Atlántico, que la despejo totalmente, porque no hay regalías, pero hay muy buen manejo. Y San Andrés, que creo que no le cabe sino un crédito, lo otro lo tenemos que seguir atendiendo con recursos del Gobierno Nacional.
Quería también proponerles en eso dos alternativas. Primero, por este tema de revaluación -y le pediría ahora al Ministro de Hacienda que dé una conversadita aquí en un salón aparte, con un a delegación de bananeros - por este tema de revaluación, el Gobierno Nacional ha tomado una decisión: la decisión de, en lo posible, no contratar empréstitos en moneda extranjera, que deban monetizarse en Colombia. Porque eso presiona más la tendencia revaluacionista.
Tendencia revaluacionista bien particular, porque, por ejemplo, la empresa privada colombiana hoy, en lugar de aumentar su deuda en dólares, la está disminuyendo. Esos capitales de corto plazo que llegan al país no están llegando.
Pero hasta hace quince días, la inversión extranjera directa que había llegado desde el primero de enero, llegaba a 1.500 millones de dólares. Entonces, en mes y medio se está obteniendo, de inversión extranjera directa, todo lo que obtenía el país en un año. Y para diferentes proyectos. Eso nos ha presionado mucho la reevaluación, además del problema mundial del dólar.
El Ministro de Hacienda les trae una propuesta, gobernadores, que es buscar los créditos que faltan de agua y los créditos de vías, en pesos. Para no tener que monetizar y para no crearles a ustedes, a los departamentos, el riesgo de que hoy desembolsen un crédito, con dólar de 1.800 - 1.900, y mañana lo paguen con dólar de 3.000 pesos.
Esa es una propuesta que les traemos y queremos el compromiso de ustedes, si lo tienen a bien, para trabajarla.
Relación departamento – ciudad capital
Y una segunda propuesta: la relación departamento – ciudad capital. Miremos a ver en qué casos el crédito de vías que se le dé al departamento no incluya a la ciudad capital y le damos un tratamiento aparte a la ciudad capital.
Les ruego, al Ministro de Hacienda y al Ministro de Transporte, tomar nota de eso.
Por ejemplo, viendo uno las dificultades de Bolívar, lo poco que pueda conseguir Bolívar en el crédito de vías departamentales no alcanza para compartirlo con Cartagena. Pero piensa uno que Cartagena puede tener su propio crédito.
Lo mismo Barranquilla. Que lo que obtenga el departamento del Atlántico sea exclusivamente para aquello que está por fuera de Barranquilla. Con el Alcalde (de Barranquilla) Alex Char hemos hablado. Estamos esperando un nuevo inventario de pasivos. La ciudad está bastante comprometida -yo he estado echándole cabeza a esta idea, doctora Cecilia Álvarez: que se cree un fondo de infraestructura en Barranquilla y que ese fondo sea el que reciba el crédito-.
Porque la capacidad de endeudamiento que llegue a tener el Atlántico para ese crédito, si la comparte con Barranquilla, lo que va a invertir en el resto del departamento es nada.
Ayer me visitó el Gobernador del Valle del Cauca y me propuso una cosa atrevida: una nueva generación que le tiene menos miedo, que tiene más afecto por el progreso, que miedo a la protesta. Es bien importante eso: tener más amor por el progreso, que miedo a la protesta. Hay que socializar los temas, pero cuando se procede de buena fe, hay razones para socializarlo.
Me dijo: ‘Queremos hacer una vía urbana en Cali, que rompa la ciudad de sur a norte. Y la queremos concesionar con peajes urbanos’. Vino a pedirme la ayuda para eso.
A mí me pareció bien valerosa. Inmediatamente cogí el teléfono y llamé al Ministro de Transporte.
Yo creo que podemos crear un fondo de infraestructura en Barranquilla, Cecilia y Alcalde. Entonces, conseguir el crédito para el departamento del Atlántico y el fondo de infraestructura para la ciudad de Barranquilla.
No se la relación Sincelejo – Sucre. Me parece que es mucho más fuerte el departamento de Córdoba por regalías, que la ciudad de Montería. No se la relación, en esa materia, Valledupar – Cesar; tampoco Riohacha – Guajira.
Mi sugerencia respetuosa en este punto es: donde haya que ayudarle a la ciudad capital a obtener el crédito de vías, diferente al crédito que obtenga el ente departamental, hagámoslo.
Yo le pediría eso que lo consideraran alcaldes y gobernadores y les pediría a los Ministros de Transporte y de Hacienda. ¿Qué se me hizo el Ministro de Transporte? ¿Quién está manejando en el Ministerio el tema de los Planes Departamentales de Vías? Hagamos eso.
Aportes a los municipios
Está el tema de los aportes a los municipios. Es muy importante, gobernadores, que veamos con paciencia la tabla de lo que fue el aporte a los municipios para vías municipales el año pasado y el informe del Ministro, que en ese punto es muy pequeño, de lo que se va a hacer este año.
A cada municipio, independientemente de su tamaño, para vías municipales, se le va a dar un aporte igual. ¿Por qué? Porque empezamos a hacer matriz. Y resulta que las diferencias en población o en necesidades son mayores a las diferencias que podemos establecer en plata. A ninguno se le puede dar más de 170, más de 180 millones y a ninguno, menos de 100.
Entonces, lo mejor es darle una suma igual a cada uno. El año pasado fuimos cumplidos, este año queremos ser cumplidos, en el 2009 también, y el compromiso con el Congreso es que, aun, en el Presupuesto del 2010, que le toca a este Gobierno y a este Congreso, vendría la plata para los municipios.
Corredores
Ahí llevaríamos tres temas de hoy. El otro sería corredores de mantenimiento. Que nos informe Invias cómo van los corredores de mantenimiento en el Caribe.
El otro es los corredores de repavimentación. Unas repavimentaciones nuevas que están previstas. Y esta es una proposición, un compromiso que yo les quiero expresar y que aprecio que puede ser el tema más importante de hoy. Es para atender el reclamo del Caribe.
Las regiones colombianas todas tienen sus justos reclamos, todas. Y son reclamos justos por lo que falta en el país. El Caribe colombiano tiene un sentido y justo reclamo por materia vial; lo tiene mi departamento. Y ha habido una serie de propuestas de ustedes que nosotros las hemos venido estudiando juiciosamente.
El Banco Mundial está estructurando el proyecto que el Ministro de Transporte ha llamado ‘La Ruta del Sol’ Bogotá – Santa Marta. Al Alcalde de Valledupar y al Gobernador del Cesar: está definido que tendría el ramal a Valledupar en doble calzada.
Entonces, nos dicen ustedes, eso está muy bien, pero es que necesitamos las vías transversales. Y lo acaba de plantear el Gobernador Omar Díaz Granados.
Desde hace muchos años hay tres propuestas transversales fundamentales en el Caribe colombiano: la primera, el proyecto del límite con Venezuela, recorriendo todo el litoral, al límite con Panamá. La segunda, la transversal momposina y la tercera, una más al sur.
Después de estudiar mucho esto, propuesta del Caribe colombiano, yo vengo a asumir un compromiso y a buscar que ustedes pulan eso de la manera más constructiva. Un compromiso grande que es el siguiente:
Hagamos unas vías de competitividad en el Caribe, distintas a las ya comprometidas como la ‘Ruta del Sol’. La primera sería el acceso a lo que en el futuro, que en este momento no la podríamos hacer toda, sería la transversal Caribe - Sur.
¿Cuál acceso? Hemos construido el puente de Barrancabermeja, el puente Guillermo Gaviria Correa. Allá, en frente, empieza Bolívar, al norte, y Antioquia, al sur. Tiene una carreterita humilde hacia Antioquia, pero no tiene carretera a los municipios al sur de Bolívar.
¿Cuál es la propuesta? En esos municipios del sur de Bolívar nosotros hicimos la pavimentación Río Magdalena - Cerro de Burgos – Simití - Santa Rosa del Sur.
Hoy estamos pavimentando 30 kilómetros de la carretera Simití - San Pablo, pero es un sur de Bolívar muy incomunicado; la comunicación es el río o cruzar a Santander y al Cesar para llegar a la carretera.
¿Qué proponemos? Invertir 80 mil millones del puente de Barrancabermeja al norte, a ver hasta dónde llegamos. Si podemos llegar a Cantagallo o pasar de Cantagallo. Eso es adicional a lo que se está haciendo allá en el Plan 2500, que es 30 kilómetros del tramo San Pablo – Simití. Eso es el acceso, apreciados parlamentarios, alcaldes y gobernadores, a lo que sería la Transversal Caribe del Sur.
Segundo, la Transversal Caribe de la Depresión Momposina. Hemos construido el puente Gutiérrez de Piñeres para comunicar el departamento del Magdalena con la Isla de Mompós.
¿Cómo va el puente del Banco sobre el Río Cesar? Ya se concluyó también. El problema es la vía. Hemos tenido enormes dificultades con el contratista del Plan 2500. ¿Cuál es la propuesta? Con el departamento de Cesar hicimos un acuerdo que va muy bien. Ellos cofinanciaron el 20 por ciento; el Gobierno Nacional, el 80 y se están pavimentando casi 100 kilómetros que interesan al Cesar, al Magdalena, a Bolívar y a todo el Caribe, que es la carretera Cuatro Vientos - Arjona – Chimichagua - El Banco.
He estado chequeando los contratos y esa avanza bien: esa parte va bien. ¿Cuál es el problema? El tramo del Banco a Guamal, el tramo del Puente a Mompós y la necesidad de repavimentar una carretera, pavimentada en el pasado, que es de Mompós a Bodegas.
Eso es trayecto fundamental de la Transversal Caribe por la Depresión Momposina.
Propuesta: para terminar por lo menos, vengo a proponerles una cosa ambiciosa pero realista, para terminar por lo menos el acceso hasta Mompós y repavimentar hasta Bodegas, en frente de Magangué, nos tenemos que gastar ahí 70, 80 mil millones.
Esos dos proyectos suman 150 mil millones, fundamentales en la visión de competitividad de las transversales del Caribe.
Y el tercer punto sería este: yo no voy a entrar ahí en detalles, sino que se los voy a contar en una oración gramatical, ojalá no muy larga: la doble calzada desde la frontera con Venezuela, en Paraguachón, por todo este litoral, todo este litoral, hasta la frontera con Panamá en Páramo de Letras.
Que quede el Caribe con una competitividad transversal, con una gran agilidad en la comunicación transversal. Pienso que en el estado en que están las cosas y teniendo en cuenta que hay limitación de recursos, esa debería ser la gran obra en que nos comprometiéramos ahora.
El cómo, el con qué. El 8 de agosto de 2002 yo llegué, antes de que saliera el sol al aeropuerto de Valledupar, a empezar la política de Seguridad Democrática. El 8 de agosto de 2006 llegamos, 7:00, 8:00 de la mañana, a Barranquilla, a decir ‘bueno, hemos separado los activos de Corelca, de Corelca. Vamos a venderlos y a dedicar ese dinero solamente a obras de competitividad del Caribe’.
Esta obra que les acabo de describir tiene el más alto costo. ¿Ustedes se imaginan? ¿Esos son cuántos kilómetros de doble calzada?
Ministro de Transporte, Andrés Uriel Gallego: El corredor de Lomas Aisladas a Paraguachón sería el recorrido de 1.050 kilómetros. Pero el conjunto de vías, eso es lo que tenemos aquí, 1.800 kilómetros, Presidente.
Presidente Álvaro Uribe: Eso entraría todo en un contrato. El ideal es que pueda vincular todas las concesiones actuales de la Costa. ¿Con qué lo pagamos? Aquí viene el tema del con qué. La razón de la presencia del Ministro de Hacienda aquí también.
Un patrimonio autónomo, fondo de infraestructura que lo manejaría la Financiera Eléctrica Nacional (FEN). Lo nutriríamos de la siguiente manera: primero, le trasladamos los activos de Geselca, antigua Corelca, y Urrá.
Segundo, el Gobierno Nacional asume toda la deuda, que suma 3,5 billones entre Corelca y Urrá. El Gobierno Nacional traslada eso al patrimonio autónomo de la FEN, saneado.
Segunda fuente, los peajes entregados a las nuevas concesiones; hoy hay 23. Tercera fuente, se agregarían 11 peajes. Cuarta fuente, el capital que los anglicistas llaman ‘el equity’ de los concesionarios.
Al crear el fondo ya se le daría, de inmediato, luz verde al Ministro para que empiecen el proceso de contratación. Al entregar esas acciones saneadas a la Financiera Eléctrica Nacional (FEN), el Ministerio de Minas reserva la facultad de conducir el proceso de venta.
En el momento que se haga la venta, el patrimonio autónomo entrega a los compradores las acciones de los activos que se vendan y el patrimonio autónomo recibe el dinero. Queda representando, exclusivamente, en TES, en papeles del Gobierno Nacional, que se van redimiendo solamente a medida que haya que cumplir obligaciones con los contratistas.
¿Qué efectos tiene eso? Primero, puede empezarse ya el proceso de contratación. Segundo, queda totalmente asegurado ese patrimonio para estas vías. Ya no dependerá de los albures del Presupuesto Nacional.
Yo creo que eso nos permite hacer estas tres obras: la entrada por Barrancabermeja al sur de Bolívar; terminar todo el acceso a Mompós, y la doble calzada Paraguachón - Palo de Letras.
Ferrocarriles y aeropuertos
Tendríamos que mirar también el tema de los ferrocarriles, a ver en qué va la segunda calzada y la necesidad de Santa Marta. Yo creo, Ministro, oyendo al Alcalde y al Gobernador, que necesitamos un pacto cuanto antes con Fenoco, la concesionaria, para ponerle fecha, por firma y pólizas, a la variante del ferrocarril de Santa Marta.
Está el Director de Aeronáutica para que hablemos al menos de los principales aeropuertos de hoy y de los prospectos de concesión. Y están el Viceministro de Minas, la Viceministra de Medio Ambiente, además del Viceministro de Transporte y los empresarios privados para hablar de los puertos.
Para entregar la concesión del descanso, una de las condiciones del Gobierno Nacional, una -asociemos el tema con responsabilidad social- una de las condiciones es que no se dilate más el tema del cargue directo, para evitar la contaminación en el área turística de Santa Marta.
Ha habido un principio de acuerdo con los carboneros, que es muy importante ponerlo esta tarde en consideración de ustedes. Ese sería el temario.
Ahí nos quedan temas por fuera, porque no alcanzamos a tratarlos hoy. Yo estaría dispuesto a otras reuniones. Como es el tema de los dos transmilenios que avanzan en Barranquilla y en Cartagena; faltantes de dineros de ambos. Y también el tema de los proyectos de movilidad para las otras ciudades. Y hay otros temas, como el tema de aguas y eso, que tampoco alcanzaríamos a tratar hoy.
Yo le pediría a Daniel García (Director de Invias) que procediéramos de la siguiente manera: que nos explique, de manera muy rápida y ágil, lo del Plan 2500, con énfasis en los proyectos en los que tenemos dificultades en el Caribe; abrir, inmediatamente, la intervención de ustedes.
Después de eso, unos comentarios de ustedes sobre las propuestas que hemos hecho, de la modalidad de créditos para vías. Después de eso, que Daniel (García) o el Ministro presenten ahí cómo se distribuyó el dinero de los municipios el año pasado y cómo va a ser lo de este año. En cada capítulo viene la intervención de ustedes.
Después entraríamos a cómo avanzan los corredores de mantenimiento en el Caribe y la intervención de ustedes. Después, los nuevos corredores de repavimentación.
Ministro, hasta donde le entendí ayer a usted y a Invias, ya se colgaron los prepliegos de los nuevos corredores de repavimentación.
Ministro de Transporte, Andrés Uriel Gallego. (Inaudible) Presidente, el recurso es directo, tenemos la plata.
Presidente Álvaro Uribe: Después de eso, estas tres obras propuestas con el esquema del fondo de infraestructura; sería el primer gran fondo de infraestructura que tendría el país y nosotros empezaríamos esta misma semana a constituirlo.
Algo importante, porque ustedes saben que a mí me gusta mucho hacer esfuerzos, pero me da mucho miedo hacer promesas. Los activos que entran aquí, al fondo de infraestructura, la Nación no los tiene contabilizados en el programa fiscal de mediano plazo de la Nación. Desde el 8 de agosto del 2006 habíamos reservado eso para una gran obra de competitividad del Caribe Colombiano.
O sea que ahí tenemos otro aspecto positivo. Porque, por ejemplo, en los corredores de competitividad para el resto del país tenemos un déficit de billón 600 mil millones. El Ministro ha dicho que él estira la olla en 900 mil millones más, ahí nos queda un déficit por resolver de 700 mil millones, no resueltos; tenemos que resolverlo.
Yo creo que lo de aquí entra con un gran patrimonio y entra con equilibrio, estas tres grandes obras del Caribe. Y creo que es la gran posibilidad del país de empezar con los fondos de infraestructura.
Inmediatamente entramos en el tema de lo del ferrocarril, especialmente de lo de Santa Marta y lo de los puertos.
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