La tala de bosque para sembrar coca y amapola,
si causa de daño ambiental
“GLIFOSATO NO ES UN RIESGO PARA LA SALUD HUMANA, NI CAUSA
DAÑO AMBIENTAL”: CICAD
Bogotá, 15 dic. (SNE).- El herbicida glifosato utilizado
en Colombia para la fumigación de cultivos ilícitos
de coca y amapola, no afecta la salud humana, el medio ambiente,
ni a los animales, como si lo hacen la deforestación y la
quema indiscriminada de bosques.
Ese fue le concepto principal presentado en abril de 2005 por
la Comisión Interamericanapara el Control del Abuso de Drogas
(CICAD), división de la Organización de Estados Americanos
(OEA), en respuesta a la solicitud formulada por los gobiernos
de Colombia, Estados Unidos y Reino Unido, sobre el riesgo que
podría representar el uso de dicho producto.
“Es importante reconocer que el impacto aquí no es
por el uso del glifosato sino que el acto inicial de deforestar
y quemar es la causa primaria de los efectos en el ambiente. Con
la evaluación del riesgo se concluyó que el glifosato
y el Cosmo-Flux®, tal y como se usan en el programa de erradicación
de Colombia, no presentaban un riesgo significativo para la salud
humana”, dice el resumen ejecutivo, presentado en su momento
por la CICAD a la opinión pública.
Los expertos señalan en el informe, que en Colombia el
glifosato se utiliza ampliamente en la agricultura y para fines
totalmente diferentes a la erradicación de la coca y la
amapola. “Solamente del 10 al 14 por ciento del uso total
en Colombia es para el programa de erradicación”,
dicen.
Destacan que el programa de erradicación, por medio de
la aspersión aérea en Colombia, se realiza con modernas
aeronaves y equipo de aspersión de última generación,
que brindan precisión y que son similares a los usados en
la aspersión de bosques en otras partes del mundo.
“Como resultado del uso de la mejor tecnología de
aspersión y navegación disponible en la actualidad,
la probabilidad de asperjar accidentalmente sitios que no estaban
en la mira es poca y se estima que es menos del uno por ciento
del total de la superficie asperjada”, precisa.
Al referirse puntualmente a los posibles efectos que pueda tener
el uso de este químico en la población, el informe
agrega que los estudios epidemiológicos llevados a cabo
en diversas partes del mundo no han sugerido una asociación
fuerte o consistente entre el uso del glifosato y resultados específicos
en la salud humana.
“En Colombia se llevó a cabo un estudio epidemiológico
preliminar para evaluar cualquier asociación que pudiere
existir entre el glifosato y el resultado en la reproducción,
el tiempo transcurrido para quedar en embarazo en los humanos.
Este estudio no encontró ninguna asociación entre
el tiempo para quedar en embarazo y el uso de glifosato en el programa
de erradicación por aspersión aérea”,
sostiene.
Por el contrario, el informe revela que los métodos usados
para la siembra de estos cultivos ilícitos si afecta la
salud humana y causa un daño ambiental, que en algunos casos
es irreparable.
“Tanto la coca como la amapola se cultivan intensamente
en un proceso que involucra la deforestación, la siembra
de los cultivos y la protección contra plagas tales como
malezas, insectos y organismos patógenos. Todas estas actividades
pueden tener repercusiones en la salud humana y en el ambiente
y algunas, como la deforestación, en un alcance significativo”,
reza el documento.
Este estudio fue realizado por expertos científicos, contratados
directamente por la CICAD, lo que le da la suficiente credibilidad
ante la comunidad internacional.