A nivel
nacional, inicia programa de explicación a la ciudadanía
PRODUCTO POR PRODUCTO, URIBE EXPLICA BENEFICIOS DEL TLC
- No habrá problemas con la papa, cebolla, trigo, cebada,
flores, metalmecánica, artesanías, hortalizas,
carbón.
- Se resuelven preocupaciones en maíz,
pollo, porcicultura.
Sogamoso, 25 feb. (SNE).- Producto por producto, el presidente Álvaro
Uribe Vélez inició un programa para despejar los
temores y las preocupaciones de los ciudadanos y pequeños
empresarios y cultivadores, sobre los beneficios y los riesgos
que se correrían con el Tratado de Libre Comercio (TLC)
que se negocia con los Estados Unidos.
En el marco del Consejo Comunal de Gobierno número 126
realizado en Sogamoso (Boyacá), el Jefe de Estado solucionó una
a una las inquietudes de los ciudadanos y despejó los temores
sobre el fututo de los productos que cultivan o fabrican.
El Mandatario señaló que Colombia está ad
portas de culminar la negociación del TLC y que mantiene
una permanente comunicación con los ministros de Comercio
y Agricultura, Jorge Humberto Botero y Andrés Felipe Arias,
y con el equipo negociador comandado por Hernando José Gómez.
Uribe anunció que en las próximas semanas y en cada
evento al que asista seguirá escuchando y resolviendo las
preocupaciones de los ciudadanos sobre el TLC y les informará los
beneficios del Tratado de Libre Comercio.
“Voy a dedicar estas semanas a un diálogo con los
colombianos sobre el TLC. El Gobierno está preparado para
proceder con toda la franqueza, producto por producto”, reiteró.
Papa: No debe haber preocupación para los productores porque
la papa es un producto que no se comercializa internacionalmente
en su estado fresco. Además, Estados Unidos no subsidia
la papa a sus agricultores, y tercero, hay grandes posibilidades
de exportar papa industrializada, especialmente la papa criolla
o amarilla.
Este tema ha sido permanentemente discutido con la Federación
de Cultivadores de Papa (Fedepapa).
Pollo: El beneficio: los avicultores se beneficiarán del
maíz importado con cero arancel, para la alimentación
de los pollos.
El riesgo: como los estadounidenses no consumen los muslos, estos
son muy baratos. La estrategia es buscar primero, un largo período
de desgravación; segundo, una cláusula de revisión
a unos años y tercero, que cualquier importación
la hagan entre los mismos avicultores de Colombia y Estados Unidos
para que el ingreso que le llegue a los colombianos lo apliquen
a erradicar la enfermedad de New Castel, que es una peste que no
ha dejado a nuestros empresarios exportar pollo.
Trigo y Cebada: El Presidente recordó que prácticamente
el trigo y la cebada desaparecieron de Colombia a principios de
los años 90, con la apertura, pero se mantienen dos focos
de producción en Nariño y en Boyacá.
El Gobierno les cumplió a los trigueros presentando en
el Congreso un patrimonio que crearon los molineros, respaldado
en una fiducia. Reiteró el compromiso del Gobierno de garantizar
la compra de cosecha y en el momento de necesitarse un subsidio –que
no se ve en el corto plazo- se entregaría.
Cebolla larga: No tiene problema, por el contrario, tiene todas
las posibilidades de exportación.
Artesanías: No se afectará el trabajo de los artesanos
colombianos, como se cree erróneamente. Por el contrario,
la artesanía quedará desgravada en los Estados Unidos
y se facilita la exportación de artesanías colombianas.
Además la pequeña empresa colombiana queda totalmente
protegida en el TLC como lo ha informado el presidente de ACOPI,
Juan Alfredo Pinto.
Carne y Leche: Uribe dijo que en precios el país es altamente
competitivo frente a los Estados Unidos. Inicialmente habrá la
posibilidad de exportar una buena cantidad de queso pero para abrir
totalmente el mercado estadounidense en carne y leche, se necesita
avanzar mucho en el tema sanitario, especialmente demostrar que
se ha erradicado la aftosa.
Hortalizas: Es un producto ampliamente beneficiado con el TLC.
Maíz: Colombia consume 3,5 millones de toneladas al año,
apenas produce un millón de toneladas y el resto lo importa.
Con el TLC se debe facilitar la importación de lo que no
producimos y garantizar la compra de la cosecha nacional.
De los Estado Unidos se están importando cerca de 2 millones
de toneladas y eso se seguirá importando. Hoy se está definiendo
en las mesas de negociación un mecanismo para garantizar
la absorción de la cosecha local.
Acero: El TLC beneficia a los productores de acero. El sector
metalmecánica se estimulará para exportar.
Carbón: El Mandatario dijo que lo que le está sucediendo
a Colombia con el carbón es una aventura, y el TLC nos beneficia
ampliamente. Lo que hay que hacer es mejorar las carreteras de
Boyacá al río Magdalena para abaratar los costos
de la exportación de este mineral desde Boyacá.
Insumos agrícolas: En el tema de los precios de los insumos
agrícolas el Presidente señaló que desgraciadamente
no se han podido bajar como lo ha querido el Gobierno.
Se piensa que por la revaluación del peso deberían
bajar de precio pero como son derivados del petróleo, no
han bajado.
“Ahí no hemos tenido solución y nada le pasa
con el TLC porque el problema viene de atrás”, dijo.
Turismo: Se beneficia ampliamente. Uribe recordó que en
2002 al país llegaban unos 500 mil turistas extranjeros
y en 2005 ingresaron más de 900 mil, es decir que se duplicó en
lo corrido del Gobierno.
“El TLC es inversión, el TLC obliga a mejorar la
infraestructura, con el TLC no puede haber más disculpa
para no hacer las dobles calzadas, para no mejorar la infraestructura.
Si algo creo yo que se va a beneficiar Colombia del TLC y un departamento
como Boyacá, es de visitantes extranjeros”, señaló.
El turismo cuenta con unas exenciones tributarias para la construcción
de nuevos hoteles, la remodelación de los actuales y la
promoción del ecoturismo.
Frutas: En algunas regiones de Boyacá se produce manzana,
ciruela, durazno pero no se prevé que Colombia llegue a
ser exportador hacia los Estados Unidos, por dos motivos. Primero
porque allá se produce y segundo, lo compran en Chile.
Hay otras frutas de otros departamentos que sí se beneficiarán
con el TLC.
Alcohol carburante y biodiesel: Se benefician totalmente del TLC.
Si hoy Colombia tuviera para exportar de estos dos productos, nos
lo comprarían todo.
Ya están produciendo las 5 primeras plantas productoras
de alcohol carburante en el Valle, Cauca y Risaralda, se están
dando los últimos pasos para empezar la planta de la Hoya
del Río Suárez, de interés para Boyacá y
Santander.
En cuanto a la panela, algo se ha mejorado el precio gracias al
alcohol carburante pues en la medida en que se exporte más
carburante, y el TLC nos abre las puertas, se podrá garantizarle
a los paneleros que no los sigan arruinando.
Educación: No se afectará la calidad de la educación
porque este tema no se toca en el TLC.
“La soberanía de Colombia no se deja maltratar en
el TLC, ni ellos van a intervenir en nuestra educación ni
nosotros en la de ellos. Lo único que vamos a conseguir
es acuerdos para certificar en Colombia profesionales de allá,
y en Estados Unidos, profesionales colombianos”, garantizó el
Jefe de Estado.
Productos de arcilla: En el caso de los productos de arcilla como
los ladrillos, las tejas, en TLC no los afecta en nada. Al contrario,
Estados Unidos está importando elementos para la construcción
desde Colombia.
Porcicultura: Uribe dijo que hay un alivio y hay un riesgo. El
alivio: es la reducción que se presentará en el precio
del maíz pues ingresará de Estados Unidos con cero
arancel.
El riesgo: la desgravación para la importación de
todos los productos puede ser a los cinco años.
TEMAS LABORALES
El sector laboral se decía que se iba a afectar, pero no
es cierto. Colombia tiene que cumplir con todas las disposiciones
laborales, prestacionales y de seguridad social para poder exportar.
Uribe reiteró la determinación del Gobierno de revisar
a todas las empresas exportadoras e importadoras para exigirles
que estén al día en los salarios, prestaciones sociales
y en la afiliación a la seguridad social. Las que no estén
al día no podrán ni exportar ni importar.
Además en el mundo entero se está desarrollando
el principio de que los tratados de comercio tienen que empezar
por el compromiso de los países que los suscriben, de respetar
los derechos de los trabajadores. |