PALABRAS
DEL PRESIDENTE DURANTE EVALUACIÓN DEL PLAN 2.500 EN SANTANDER Piedecuesta, Santander, 18 mar (SNE). El
siguiente es el discurso del presidente Álvaro Uribe Vélez, durante el seguimiento
y la evaluación del Plan 2.500 en esta zona del país.
“Quiero agradecer muchísimo la oportunidad de reunirnos
hoy, para hacer esa evaluación de obras físicas en
el departamento. Quiero agradecer muchísimo las generosas
palabras del señor alcalde de Piedecuesta, y felicitarlo
por proyectos tan promisorios, de tanto impacto social.
La realidad es que se reconcilia uno con la Patria, con su presente,
con su futuro, cuando ve la producción de mora de castilla
aquí, la industrialización, el impacto en el empleo,
el impacto en el orden público, el impacto en el ingreso
campesino, y todo el potencial exportable.
Que bueno que hayamos podido trabajar con Piedecuesta en temas
con el de saneamiento básico, que está definida con
la concesión Comuneros, el carril adicional que va a ayudar
mucho para el tema de Metrolinea.
Que bueno que estemos adelantando un programa social bien importante,
en aumento de régimen subsidiado, en el Instituto Colombiano
de Bienestar Familiar, en niños, restaurantes escolares,
en ancianos, en el SENA, y que toda la política social tenga
en Piedecuesta un epicentro muy importante como lo tienen tantos
municipios del departamento con temas adicionales como el tema
de Familias en Acción.
Quiero agradecer las palabras del señor Gobernador y decirle
lo siguiente: no es el tema de hoy, pero es bien importante resaltar
que en lugar de dejar morir hospitales públicos, se ha hecho
un enorme esfuerzo en este Gobierno para salvarlos.
Diría yo que Santander y Boyacá están a la
cabeza, con la reestructuración de la red pública
hospitalaria. Vamos a buscar con el Ministro de Protección,
como se ayuda Santander en lo que aun resta después de los
esfuerzos hechos.
Es reconfortante saber que en las primeras reuniones en esta tierra,
siempre había tres alarmas: la alarma de Coopcentral, la
alarma de la Universidad Industrial de Santander y la alarma del
hospital González Valencia y esas alarmas están hoy
despejadas.
El hospital universitario empieza a perfilarse como un modelo
ante el país. La Universidad Industrial ha venido avanzado
sólidamente, y no solamente entre todos salvamos a Coopcentral,
sino que se ha hecho una gran tarea de salvamento del cooperativismo
nacional.
Hace dos días, gracias a la confianza en la economía
colombiana, la venta de la cartera de Coopdesarrollo, vinculado
a Megabanco, permitió lo siguiente: no solamente recuperar
casi 700 mil millones que había perdido el Estado, Fogafín,
dineros del seguro de depósito, sino recuperar en su totalidad,
los aportes de 3 mil cooperativas que eran afiliadas a Coopdesarrollo.
Frente al cooperativismo más que discurso hay que mostrar
resultados. Que bueno que podamos decir en esta tierra que es cuna
del cooperativismo nacional, que después del esfuerzo que
tomó meses, para salvar a Coopdesarrollo, ahora, estén
salvadas todas las cooperativas que en su momento se arruinaron,
por la quiebra, después de haber salvado a Coopcentral,
ahora estén salvadas todas las cooperativas, que en un momento
anterior se arruinaron por la quiebra de Coopdesarrollo y de Megabanco.
Y adicionalmente, después de pagarle a esas tres mil cooperativas,
los aportes que tenían embolatados por la quiebra de Megabanco,
Coopdesarrollo, van a sobrar entre 80 y 110 mil millones para ponerlos
de semilla en el cooperativismo, para lo que llamamos la segunda
revolución del microcrédito.
Efectivamente, hemos transitado, yo diría la primera revolución
del microcrédito. Cuando empezó este gobierno la
cartera para los microempresarios de la Patria, ascendía
a 732 mil millones. En diciembre del año pasado era de dos
billones 970 mil millones, pero todos los días hay más
demanda, la gente quiere invertir en su pequeña empresa,
crecer, generar empleo, uno de ve ímpetus exportadores en
todo el país, como los que acabamos de registrar en la intervención
del señor Alcalde, avalando en su palabra los hechos de
Piedecuesta, de la mora de castilla en Piedecuesta.
Entonces hay que crear con las cooperativas, con las fundaciones,
con los bancos públicos y privados, una red de colocación
de crédito popular, que empiece a tener un capital semilla
muy importante, como el capital que se rescató esta semana
al permitir la recuperación de la confianza en el país,
esa operación de venta de la cartera de Coopdesarrollo.
Un capital semilla para crear en todas las instituciones financieras
públicas y privadas, el banco de las oportunidades, todas
comprometidas en una red de colocación para que los sectores
medios y populares de la Patria, finalmente puedan tener acceso
amplio a los recursos de crédito.
Ha sido grato trabajar ese esquema cooperativo en Santander, y
superar dificultades.
Que bueno, que el Gobernador anuncie que el departamento está listo
para llegar a un acuerdo con el Gobierno Nacional, para la plena
cobertura en régimen subsidiado de salud.
Cuando empezó el Gobierno, Colombia tenía 10 millones
y medio de afiliados al régimen subsidiado de salud; hoy
tenemos 18 millones 600 mil y estamos afiliando otros 150 mil colombianos
y al terminar este Gobierno, el país queda preparado para
lograr en tres años la plena cobertura en régimen
subsidiado de salud, se ha logrado ya en seis departamentos: La
Guajira y el Cesar, Arauca y Casanare, Antioquia y Huila. Que bueno
que Santander sea el próximo y que se haga en el curso de
las próximas semanas.
Pero me he comprometido a dos cosas: primero, para que lo de hoy
rinda, dedicarnos exclusivamente a un temario de obras públicas
y segundo, realizar rápidamente en Floridablanca, un consejo
comunitario semejante al de hoy, para evaluar exclusivamente política
social en el departamento.
Tercero, confío en que rápidamente esté aquí la
Dirección Nacional de Planeación, con el Ministerio
de Transporte, para mirar la participación de Santander
en lo que se llama la Agenda de Competitividad. Todo plan de infraestructura
que se está discutiendo con los colombianos, para que los
gobiernos que vengan, lo tengan en su consideración a fin
de que el país gane competitividad.
Confío que eso lo haga rápidamente Planeación
Nacional con una presencia en Bucaramanga para discutir todos estos
temas y también del Ministerio de Transporte.
Procederíamos de la siguiente manera hoy: evaluar Metrolínea,
evaluar el Plan 2.500; un informe de la concesión metropolitana
de Bucaramanga y un informe del avance de las obras para recuperar
la carretera Cúcuta-Bucaramanga, que ha estado perdida prácticamente.
Y el señor Alcalde va a presentar, el señor alcalde
Honorio Galvis, un informe sobre los viaductos, el de la novena,
porque cuando le propusimos a Bucaramanga, nosotros le propusimos
a Bucaramanga el sistema de Metrolínea, era alcalde el doctor
Iván Moreno y estaba recién iniciada la discusión,
vino la elección del doctor Honorio Galvis, y el nos presentó el
temor de que al financiar Bucaramanga su parte en Metrolínea,
sacrificaran las obras que el tenía proyectadas de la carrera
novena, donde se propone la ciudad con unos viaductos de gran importancia.
Esa financiación la pudimos atender gracias al mejoramiento
en Telebucaramanga y a la participación del municipio en
las utilidades de Telebucaramanga y eso a su vez le facilitó entrar
a cumplir con el 30 por ciento que le corresponde, en la parte
de Metrolínea, de jurisdicción de Bucaramanga. Empezaríamos
con la evaluación de Metrolínea.
El programa que queremos hacer hoy, hace parte de nuestro programa “Contratistas
Visibles” que todos los contratistas den la cara, no solamente
nosotros los funcionarios públicos, los parlamentarios,
los diputados, los concejales, los alcaldes, los gobernadores,
tenemos que estar en permanente contacto con el pueblo, respondiendo
por nuestros actos, sino los contratistas del Estado.
Eso es parte esencial del Gobierno comunitario, ese es un presupuesto
fundamental para la eficiencia, para la transparencia. Entonces
vamos a escuchar sobre cada contrato al contratista, al interventor
y los comentarios de la comunidad.
Quiero recordar el sistema como se contrató el Plan 2.500
y lo recuerdo porque me preocupa que cuando apenas están
comenzando las obras, ya estén diciendo que va a faltar
plata, lo que hay que hacer es ejecutarlas.
A mi me parece no buena la costumbre del país, de que se
adjudique un contrato y antes de ejecutarlo dicen, falta plata.
Ejecútenlo, y apenas esté bien ejecutado miramos
que queda haciendo falta, y estoy seguro que si lo ejecutaron bien,
si las instituciones, sus representantes, la comunidad, adquieren
conciencia de que eso se ejecutó transparente y eficientemente,
pues se buscarán adiciones, pero empezar al revés
es gravísimo, empezar quejándose de que falta plata.
Quiero decir esto: el Gobierno Nacional ha pagado cumplidamente
esos anticipos y ante un grupo de ciudadanos, testigos de excepción,
tan importante como el que ustedes integran les quiero decir: el
Gobierno Nacional está preparado para no fallar un día
en los pagos de estas obras, para no fallar un solo día
en el pago de las actas de construcción de todas estas obras.
Entonces yo si pediría empezar con ejecución de
obras y no con quejas de que va a faltar plata.
¿Cómo se hizo esta contratación? De la siguiente
manera, en aras de la transparencia. Se le pidió a los proponentes
entregar dos sobres; en un sobre la propuesta técnica y
administrativa, y en el otro sobre la propuesta económica.
Primero se abrió el sobre de la propuesta técnica,
jurídica y al examinar esas propuestas, los calificadores
decían: estos cumplen con los pliegos quedan seleccionados,
estos no cumplen con los pliegos quedan descartados.
Al grupo de seleccionados se le llama y se abre el sobre de la
propuesta económica y se le adjudica a la propuesta más
baja entre los seleccionados.
Yo recuerdo que aquí Camacol Santander, tuco objeciones
a ese esquema, pero yo creo que es un esquema interesante para
el país, porque es de transparencia y de competencia y de
lograr que alcance la platica para hacer grandes obras.
Yo he tenido varias experiencias en este Gobierno de Colombia
en materia de recetas caras. Si hubiera sido por las recetas caras
iniciales, no habríamos podido hacer una sola obra en las
zonas de interconexión, y si ustedes recorren hoy las zonas
de interconexión, verán como ha mejorado el sistema
de energía, gracias a que descartamos las recetas caras
y hemos procedido con transparencia.
Algún día pregunté: ¿Cómo vamos
a reconstruir el caserío de Bahía Cupica, si el solo
servicio de energía para Bahía Cupica vale 15 mil
millones, y empecé a preguntar: por qué, por qué,
por qué, por qué y a entrar en dudas. Arreglamos
todo eso por 1.600 millones. Si ustedes van a Bahía Cupica
hoy encuentran una microcentral a 10 u 11 kilómetros del
pueblo, produciendo energía de la mejor calidad y encuentran
el pueblo con los mejores servicios públicos. El país
tiene que eliminar definitivamente esa mezcla perversa de recetas
caras y corrupción. Necesitamos recetas con costos alcanzables
y total transparencia.
Yo si pediría a los contratistas, por ahora no se quejen
ni nos manden poner quejas. Porque veo que están diciéndole
en el país a muchos gobernadores y alcaldes, es que no nos
alcanza la plata, cuando apenas acabamos de adjudicar las obras,
y no les adjudicamos caprichosamente, sino a lo que propusieron
los proponentes. Por eso estas audiencias públicas.
Ahora, públicamente el día que nos demos cuenta
que hay que hacer unos ajustes se harán. Hay unos contratos
donde ha habido que autorizar unos ajustes. Por ejemplo en la Costa
Caribe, antes de poner la sub-base y la base, ha sido necesario
en unos tramos aumentar la cuota de los terraplenes por problemas
de inundaciones, destrucciones del invierno anterior, etcétera.
Aquí hay un buen programa de vías terciarias, que
también es bueno que miremos hoy, como es necesario que
miremos hoy en qué van las obras de reconstrucción
de la tragedia invernal del año pasado. Por eso como el
tema es denso lo queremos dedicar exclusivamente a ver obras públicas
hoy.
Quería invitarlos a estas reflexiones: las necesidades
de competitividad del país, la misma competitividad al interior
de la Comunidad Andina, la que se requiere en el Tratado de Libre
Comercio con los Estados Unidos, todo eso nos impone un gran esfuerzo
en infraestructura.
Yo encuentro en todos los departamentos colombianos que están
reclamando que la Nación pavimente más vías
secundarias. Yo no veo manera de otro Plan 2500 de vías
departamentales. Nosotros estamos preparando en la discusión
pública, lo que es el nuevo plan de carreteras. Pero ese
nuevo plan de carreteras, el que financie la Nación, creo
yo, cualquiera sean los titulares de los próximos gobiernos,
debe ser un plan de obras de competitividad.
La Nación no tiene recursos para resolver todos los problemas
de vías terciarias, para seguir pavimentando las vías
departamentales y para atender las vías de competitividad.
¿Qué proponemos?, proponemos lo siguiente, alcaldes
y señor gobernador, que para suceder el Plan 2500 se prepare
un nuevo plan de vías departamentales a cargo de los departamentos.
La Nación ayudaría a financiarlo de la siguiente
manera: la Nación gestiona un crédito internacional
de 1.000 millones de dólares, con plazos amplios y bajas
tasas de interés. Plazos de 20 años. Hoy la situación
financiera del país nos ha permitido adquirir, contraer
créditos en muy favorables condiciones.
Esos 1.000 millones de dólares los gestiona la Nación,
los avala la Nación y los departamentos los ejecutan y los
pagan. Los ejecutan en el plan de vías departamentales,
y a medida que los departamentos vayan amortizando cuotas de capital,
la Nación se puede comprometer con ellos a contratar nuevos
recursos internacionales. Si hoy abonaron, amortizaron 100 millones
de dólares de esa deuda, que inmediatamente se consiga un
crédito por lo mismo y que lo ejecuten. Entonces se mantendría
un fondo rotatorio para vías departamentales con el aval
de la Nación, con la gestión de la Nación,
con el pago de los departamentos, y con plazos, los más
amplios que podamos obtener en los organismos multilaterales de
crédito.
Yo quiero dejar esa reflexión hoy, al gobernador, a los
alcaldes, a los distinguidos congresistas, diputados y concejales,
y a la comunidad santandereana.
En cuanto a vías terciarias. Este año tenemos 135
mil millones para vías terciarias. En este departamento
hay un programa bonito pero insuficiente. ¿Cuál es
la propuesta alcaldes?, que los recursos de este año se
contraten en su totalidad con los municipios asociados. Pero recuerden
la última palabra, asociados. No hacer convenios con municipios
individualmente considerados, sino con municipios asociados, que
pueden pertenecer a asociaciones, o simplemente integrarse en uniones
temporales para ese convenio.
Pienso que eso nos puede ayudar mucho, ¿por qué?,
porque hay una suspicacia recíproca, muchas veces la Nación
dice: no, yo no hago convenios con tal municipio, tuve una mala
experiencia, se robaron una plata, hay politiquería. Y los
municipios dicen, por qué no nos delegan, cuáles
son los intereses mezquinos de la Nación, los intereses
turbios.
En la medida que haya contratación, no con un municipio
individualmente considerado, sino con una asociación o una
unión temporal de municipios para ese efecto, cada uno de
los socios tiene que ser el garante de los otros, y todo eso tiene
que contribuir a que haya total transparencia y total confianza.
Entonces, la decisión tomada en el Ministerio, en Invías,
es contratar la totalidad de los 135 mil millones aprobados por
el Congreso para vías terciarias este año, con asociaciones
de municipios o con uniones temporales de municipios.
En cuanto al Metrolínea que sería la primera obra
para examinar hoy. Le voy a dar la palabra al Alcalde de Floridablanca,
médico, confirme la buena noticia, que ya eso no está condicionado
sino cerrado. Este médico es un gran Alcalde pero nos ha
dado un trabajo. |