Bogotá, 3 may. (SNE).- El viceministro de Defensa, Jorge
Mario Eastman, señaló este miércoles que
el Gobierno ha implementado tres grandes reformas para la Fuerza
Pública en pensiones de invalidez y sobrevivencia, sin
antecedentes en el país.
Recordó que la primera fue la Ley 923 de 2004 que fue
el nuevo régimen de pensiones de las Fuerzas Militares.
Señaló que por primera vez “el soldado profesional
dejó de ser un paria social”, pasó a tener
una categoría, a tener una pensión de invalidez
que no tenía en el régimen anterior y estaban casi
en un destierro social.
La segunda fue la Ley 973 donde se permitió la afiliación
de los soldados a la Caja Promotora de Vivienda Militar desde
el año 2005. Ya pueden cotizar y ser parte de la Caja
para acceder a los subsidios de vivienda y el manejo de cesantías.
Y tercera, se expidió hace poco una norma para volver
a recuperar la dignidad de los soldados, como héroes de
la Patria remunerados por los servicios prestados al país.
En el caso de la pensión de incapacidad se rebajó del
75 al 50 por ciento la incapacidad para acceder a ella; en la
pensión de sobrevivencia antes se requería una
antigüedad de 15 años y ahora de 5 años; se
autorizó una prima de orden público para los soldados
profesionales.
En un conversatorio con pensionados del SENA, de la Fuerza Pública,
del Seguro Social, y de otras entidades públicas y privadas,
el presidente Álvaro Uribe Vélez recordó que
el pago en pensiones en la Fuerza Pública es el más
directamente asumido por el presupuesto nacional.
Además, las jubilaciones a los soldados y policías
de la Patria se les están pagando cumplida y oportunamente.
EN SALUD Y VIVIENDA
Eastman señaló que antes de la expedición
del nuevo régimen de pensiones los soldados no tenían
régimen jurídico.
Planteó que en el caso de la vivienda, la solución
más rápida podría ser que en el caso de
los fondos que se constituyen para la entrega de los subsidios
de vivienda, se les permita participar por ser soldados heridos
en combate en una bolsa abierta especial con las mismas características
de la población afectada por la violencia.
Planteó que para hacerlo más rápido se
podría incluir esa propuesta en el proyecto de ley de
presupuesto de 2007 que se presentará en julio al Congreso,
asignándose algo de los 350 mil millones de pesos que
se dedicarán a subsidios de vivienda a una bolsa especial
para ellos.
Sobre la salud, el Viceministro defendió la compra centralizada
de medicamentos para todas las Fuerzas por el ahorro en los costos.
En el primer año se ahorraron 20 mil millones de pesos,
el segundo año 12 mil millones y en una compra de medicamentos
que se cerró ayer se logrará ahorrar otros 10 mil
millones de pesos.
“Son 40 mil millones que se revierten al sistema, no es
que se manden al Fosyga, ni al Ministerio de Hacienda, se queda
para mejorar el sistema”, especificó.
Reveló que para la atención de los pensionados
de las Fuerzas o en retiro se contrató una nueva clínica,
la Gilberto Echeverri Mejía, en honor al ex ministro de
Defensa sacrificado.
En el caso del Hospital Militar, el Viceministro señaló que
la reforma tiene varias facetas, pero que la más importante
en el mediano plazo es recuperar la calidad del Hospital.
Hoy como el Hospital no tiene que salir a competir la calidad
se vino abajo, no vende servicios. Por eso se trabaja conjuntamente
con el Ministerio de la Protección para lograr la certificación
del Hospital a final del presente año, vender servicios
y mejorar la calidad de los servicios.
REFORMA AL TEQUENDAMA
Con respecto a las reformas que se van a introducir a entidades
del sector Defensa, Uribe señaló que hay unas reservas
constituidas en edificios como los del hotel Tequendama y el
del antiguo hotel Hilton.
Reveló que al principio del Gobierno se discutió si
se vendían esos edificios o se dejaban para aprovecharlos
mejor, y la conclusión fue mantenerlos para no volver
plata menuda.
El Mandatario indicó que se decidió dejar los
edificios, darles mejor uso y consideró que en el caso
del Hotel Tequendama se tiene que llegar rápidamente a
tener un operador y no operarlo directamente.
Dijo que el principal problema es que por operarlo directamente
toca hacer licitación para todo y así es muy difícil
competir contra otros hoteles.
“El paso es encontrar un operador que le entreguemos el
hotel preservando la Fuerza Pública la propiedad del edificio”,
reveló el presidente Uribe.
Para el viceministro de Defensa, al Tequendama hay que mirarlo
en conjunto y no solamente como hotel pues es necesaria una transformación
del centro internacional y de las Residencias Tequendama.
Dijo que se viene trabajando en una consultoría con el
Banco Mundial -que debe concluir en 2 meses- donde se precisarán
el diagnóstico y las condiciones a seguir, es decir que
el hotel seguirá siendo hotel pero se entregará su
operación a una firma privada experta.
En el caso del Centro Internacional se debe reformar y volver
a ser un verdadero centro internacional. Y sobre las Residencias
Tequendama la idea es recuperar el último piso transformándolo
en un restaurante lujoso, y que allí se vuelvan a alojar
personalidades como políticos, gobernadores, alcaldes
que vienen a Bogotá.