Guachetá (Cundinamarca), 9 may. (SNE).- Una suma de mil
millones de pesos se reunió este martes para enfrentar
los desastres causados en 14 municipios de los departamentos
de Cundinamarca y Boyacá afectados por la ola invernal.
El presidente Álvaro Uribe Vélez y su equipo de
Gobierno se desplazaron a primera hora del día a la zona
azotada por el invierno para coordinar las ayudas y decidir los
lineamientos del Plan de Acción que se adoptará para
apoyar a los afectados.
En un improvisado consejo comunal, el director de la Oficina
de Prevención y Atención de Desastres, adscrito
al Ministerio del Interior y Justicia, Eduardo José González,
presentó un balance de la ayuda que se ha entregado a
la zona perjudicada desde el jueves pasado cuando el Gobierno
Nacional hizo presencia.
De los mil millones de pesos, 520 millones son aportados por
el Gobierno Nacional; 250 millones por la Gobernación
de Cundinamarca y 220 millones por la Corporación Autónoma
Regional CAR.
EL BALANCE
González señaló que el balance general
es que en la zona son 14 municipios y 11 de ellos están
afectados.
El consolidado para el departamento de Cundinamarca es que están
afectadas 1.122 familias y 5.900 personas.
En cuanto al número de viviendas perjudicadas, el informe
señala que hay 688 unidades familiares en la parte rural
¿QUÉ SE HA HECHO?
De acuerdo con lo explicado por González ante el Presidente
de la República, se han realizado las siguientes acciones:
- Primera: se activaron los comités locales en los diferentes
municipios por parte de los alcaldes.
- Segunda: se activaron los dos comités regionales, el
de Cundinamarca, en cabeza del Gobernador, Pablo Ardila; y el
de Boyacá, en cabeza del Gobernador, Jorge Eduardo Londoño;
y del coordinador de desastres.
- Tercera: se entregaron ayudas humanitarias inmediatas de acuerdo
con las solicitudes presentadas por los departamentos.
A Cundinamarca se entregaron 60 millones de pesos consistentes
en: 500 kits de mercado, 300 kits de aseo, 100 kits de cocina,
colchonetas, frazadas, láminas y 6 mil sacos de polipropileno.
Para el departamento de Boyacá se entregaron 70 millones
de pesos representados en ayudas humanitarias de acuerdo con
la solicitud efectuada por el Comité Departamental de
Atención y Prevención de Desastres.
Adicionalmente, el Gobierno estuvo presente con todas las entidades
el día jueves en el municipio de San Miguel y se dieron
respuestas concretas por parte de las diferentes entidades, y
muy especialmente en el tema de agricultura en donde estuvieron
el Banco Agrario de Colombia; el Instituto Colombiano Agropecuario
(ICA); el Fondo para el Financiamiento del Sector Agropecuario
(Finagro), y se definió un plan de acción a seguir.
- Cuarta: ese día jueves todos los alcaldes, por unanimidad,
pidieron decretar la situación de calamidad para estos
municipios. El viernes 5 de mayo se firmó la resolución
18 de declaratoria de situación de calamidad para todos
los municipios.
González reveló que el próximo jueves habrá una
nueva reunión convocada por el Ministerio de Ambiente
para recibir alcalde por alcalde los datos consolidados, y con
los recursos se definirán las prioridades para atender
la emergencia.
En opinión del presidente Uribe Vélez, ese plan
de acción debe tener en cuenta las siguientes prioridades:
atención inmediata de las personas afectadas; el empleo;
cómo se van a recuperar las vivienda perdidas; y la recuperación
de la producción agropecuaria; y el tema de fondo a cargo
de la CAR es cómo se va a resolver el problema estructural
del conjunto de lagunas.
ZONA DE CALAMIDAD PÚBLICA
El director de Prevención y Atención de Desastres
recordó que a través de la resolución 18
sedeclaró la situación de calamidad pública
en 21 municipios de Cundinamarca y Boyacá, afectados por
la fuerte ola invernal.
De acuerdo con la resolución la medida cubre a los municipios
de Guachetá, Carmen de Carupa, Ubaté, Cucunubá,
Fúquene y Simijaca en el departamento de Cundinamarca.
Lo mismo que a San Miguel de Sema, Chiquinquirá, Ráquira,
Muzo, Quípama, Buenavista, Coper, Maripí, Otanche,
San Pablo de Borbur, Briceño, Pauna, Susa, La Victoria
y Tunungua en el departamento de Boyacá.
En estos municipios se han producido avalanchas, deslizamientos
e inundaciones que han ocasionado afectaciones en bienes, líneas
vitales y sectores productivo, agrícola, pecuario y ganadero.
Según la Dirección, el reporte entregado a la
Dirección de Prevención y Atención de Desastres “el
desbordamiento de la laguna de Fúquene ha inundado más
de tres mil hectáreas, afectando predios, potreros para
ganado lechero, cosechas, vías puentes y viviendas”,
así como la economía local y regional.