PALABRAS DEL PRESIDENTE URIBE ANTE
EMPRESARIOS VALLECAUCANOS
Cali, 10 may. (SNE).- Las siguientes son
las palabras del presidente Álvaro
Uribe Vélez, al intervenir en el Encuentro Regional de
Empresarios, organizado por la seccional de la Federación
Nacional de Comerciantes (Fenalco).
“Me es muy grato reunirme nuevamente con ustedes, en medio
del entusiasmo que contagia al Valle del Cauca. Esta mañana,
cuando apenas despuntaba el sol, el señor Gobernador (del
Valle, Angelino Garzón) me dio la triste noticia de un
nuevo derrumbe en la carretera de Buenaventura.
Todo es superable, pero es una tragedia que nos duele mucho,
porque me ha confirmado el señor (brigadier) general (Hernando)
Pérez, comandante de la (Tercera) División Militar,
que el alud terminó la vida de una señora y de
dos niñitas.
Eso es lo triste. Aludes de tierra, derrumbes, los sacamos.
La vía la recuperamos. Allí ya están trabajando
los ingenieros militares a ver cómo se destruyen y se
remueven esas rocas. El Instituto Nacional de Vías está movilizando
toda la maquinaria a ver cómo damos rápidamente
paso.
Pero quiero reiterar ante ustedes, apreciados compatriotas del
Valle del Cauca, el compromiso del Gobierno Nacional con la doble
calzada Buga-Buenaventura.
Hace cuatro años, por la situación fiscal, porque
teníamos enfrente desafíos tan grandes como Emcali,
como el MIO, yo no me atrevía al principio del Gobierno
a comprometerme con esa vía.
Tengan ustedes la certeza de que este final del Gobierno, que
termina el 7 de agosto, es un compromiso total con esa vía.
Vengo a reiterar ante ustedes, a pedirles que me avalen, que
no los hago quedar mal, que esa es una prioridad del Gobierno
Nacional.
Ya se han separado 375 mil millones de pesos de diferentes presupuestos,
para empezar con esa doble calzada, es la cuota inicial, y para
mejorar lo que es la vía Simón Bolívar,
la vía vieja que va por Anchicayá, que la necesitamos
habilitada para carga pesada, así no sea en óptimas
condiciones, por dos circunstancias: primero, para atender emergencias
en la vía principal, y segundo, porque una vez empiecen
los trabajos de la construcción de la doble calzada, seguramente
va a haber interrupciones y dificultades que van a obligar a
utilizar la vía vieja debidamente rehabilitada.
Yo quiero agradecer inmensamente esta generosa reunión.
Las palabras que me abruman de doña Rosita Jaluf de Castro
(presidenta de la junta directiva de Fenalco Valle). Y sería
muy importante que escucháramos al doctor Julián
Domínguez, en representación de la Cámara
de Comercio.
Yo creo que la agenda, como la estamos conduciendo con el Gobernador,
los alcaldes, los parlamentarios. La senadora Claudia Blum de
Barberi, como presidente del Congreso de Colombia, ha hecho un
magnífico esfuerzo de persistencia en lo que es la agenda
nacional con relación al Valle del Cauca. No solamente
la proposición de la agenda sino un seguimiento periódico.
Y la Cámara de Comercio de Cali nos ha permitido adelantar
un magnífico ejemplo. Porque casi todas las regiones de
Colombia pedían que tuviéramos un alto consejero
presidencial para la región. A mí me parecía
muy difícil. Era replicar en el Gobierno Nacional un modelo,
reproducir, revivir un modelo centralista.
Se nos creaba una fronda de funcionarios muy copiosa, difícil
de coordinar y de administrar. Y creo que el experimento que
adelantamos con la Cámara de Comercio nos puede ayudar
mucho, respetando toda la institucionalidad de la descentralización,
la institucionalidad de las gobernaciones, la institucionalidad
de las alcaldías. Simplemente se hace un convenio con
la Cámara de Comercio para que haga, autorizadamente,
un seguimiento riguroso del cumplimiento que tiene que darles
el Gobierno Nacional a las obligaciones con el Valle del Cauca
y con la ciudad de Cali.
Si lo tuvieran a bien, yo terminaría la introducción
con dos o tres comentarios y podríamos escuchar al doctor
Domínguez para que él nos fije claramente la agenda,
doña Rosita y doctor Guillermo.
Bueno. Miren: la noche que tuve la oportunidad de amanecer en
frente de la televisión, respondiendo preguntas de mis
compatriotas sobre el TLC, cuando hablábamos de la Agenda
de Competitividad, algún compatriota ilustre dijo esa
noche: eso que está diciendo Uribe, eso no se puede hacer.
La verdad es que yo creo que hay una relación virtuosa,
un círculo virtuoso, entre el TLC y la Agenda de Competitividad.
El TLC obliga a adelantar esa Agenda de Competitividad, pero
también da las posibilidades de financiarla. Es bien importante.
Nos obliga a adelantarla. Ante la inminencia de un TLC, el país
no puede seguir con la Agenda de Competitividad simplemente como
proclamación de discurso electoral. Tenemos que darnos
a la tarea de sacarla adelante. Pero el TLC ayuda a financiarla.
Sacarla adelante no quiere decir que se pueda hacer todo rápidamente.
En un cuatrienio se pueda hacer todo lo que se requiere en el
país en materia de competitividad. Pero si se prioriza,
si se toman las decisiones políticas, si nos llenamos
de voluntad política, si empezamos, vamos avanzando, y
esa Agenda de Competitividad toma una velocidad imparable.
Hace cuatro años, cuando empezaba el Gobierno, veíamos
muchas dificultades para el Túnel de la Línea.
Había habido dificultades en dos licitaciones que no se
pudieron adjudicar, las dificultades con la financiación,
dificultades con los seguros, etcétera.
Con el señor Ministro de Obras, tomamos la decisión
de que separáramos unos recursos del presupuesto nacional,
hiciéramos la excavación básica del Túnel
de la Línea, que no esperáramos tener toda la plata
junta para empezarlo, porque si uno espera tener toda la plata
junta para empezar estas obras, y eso es válido para la
Agenda de Competitividad, pues nunca la va a empezar.
Y entonces nos propusimos avanzar con él de tal manera
que se constituyera ya no en un sueño sino en una obra
en plena ejecución, de que se constituyera en una obra
que obliga a los diferentes gobiernos a llevarla a su conclusión.
Pues eso ha sido bueno, porque regresó la credibilidad
en la obra y al mismo tiempo nos ha abierto las posibilidades
de financiarla.
Y cito el tema del Túnel de la Línea porque nos
ilustra cómo cuando hay voluntad política para
acometer las obras, que el TLC obliga a acometerlas, y cuando
hay horizontes de expansión de la economía, que
pueden mejorar los recursos del Estado, entonces la voluntad
política es garantía de que se emprendan las obras
y la perspectiva de mejores recursos del Estado es garantía
de que se van a financiar.
Hace pocos meses, una misión del Banco del Japón,
interesada en la financiación del Túnel de la Línea,
se propuso visitar a Colombia. El Ministro me contó y
le dije: Ministro, no los vaya a llevar a una oficina a mostrarles
un power point, se le duermen, bostezan, no los haga venir a
eso. Mejor mándeles un video al Japón, si a eso
fueran a venir. ¿Yo qué hago con ellos? Móntelos
en un helicóptero y llévelos a La Línea,
muéstreles la excavación.
En efecto, esa excavación ya tiene hoy 3.200 metros.
Los japoneses se admiraron. No los tuvimos en el ambiente, aburrido,
de cuatro paredes, en una oficina, sino que estuvieron en las
laderas de la Cordillera Central, por ambas bocas, la boca del
lado del Tolima y la boca del lado del Quindío, viendo
cómo avanzan las obras.
Se llenaron de optimismo y ya se está concretando una
financiación, a 40 años de plazo, con una tasa
de interés muy baja, que si ponemos ese dinero a valor
presente es un crédito muy, muy favorable. Tan favorable
es que ese crédito vale pagarlo el 35 por ciento de lo
que valdría pagar un crédito en condiciones ordinarias.
Entonces por eso los bancos multilaterales, para calificar la
situación financiera de Colombia, contabilizan ese crédito
por mucho menos, gracias a que es un crédito concesional.
Yo creo que ese es un buen ejemplo.
¿Sabe qué dijeron los japoneses? Los japoneses
dijeron: Ya aquí hay 3.000 metros excavados, plena prueba
de la voluntad política de acometer la obra.
Y Colombia, por el sendero de la recuperación de la seguridad,
por el sendero de nuevos mercados, Colombia de miras al TLC,
Colombia tiene un camino por delante de crecimiento de la economía
que hará posible que estos créditos se paguen.
Por eso, en agosto de 2002, yo recuerdo que asumí la
Presidencia el miércoles 7 de agosto en la tarde, y al
otro día a las cinco y media de la mañana estábamos
aterrizados en el aeropuerto de Valledupar para empezar en las
calles, en un consejo comunitario, todavía desorganizado,
donde estaban los ciudadanos, las autoridades, las Fuerzas Militares
y de Policía, el proceso de recuperación de las
carreteras colombianas.
Ese día empezamos a sacar de esas carreteras de la Costa
Caribe a guerrilleros y a paramilitares, y a devolvérselas
a los ciudadanos de bien de nuestra Patria.
Eso fue jueves, al amanecer. Por la tarde tuvimos una reunión
en el departamento del Caquetá, donde todos los alcaldes
estaban arrumados, en búsqueda de exilio, en la Gobernación,
no podían ejercer por presiones de los grupos terroristas.
Hoy por fortuna vamos ganando, pero no hemos ganado todavía,
pero vamos por el camino. La totalidad de los alcaldes de la
Patria pueden ejercer sus atribuciones en todos los municipios.
Eso fue jueves en la tarde. Y en la noche del viernes hicimos
el primer consejo comunitario en Cali, para tratar el tema de
Emcali. Pienso que la empresa está bastante recuperada,
han sido cuatro años de ardua labor, de momentos difíciles,
de discusiones. Cuando las discusiones son francas, y uno discute
dejando que se expresen sin filtros las conclusiones del alma,
pues esos debates no son siempre muy delicados. Hay veces que
son duros, pero francos, y eso está bien.
Yo quería invitarlos a pensar dos cosas sobre Emcali:
primero, que le pongamos mucha fe al fondo de solidaridad, porque
el fondo de solidaridad tiene muchísimas razones lógicas
para su existencia.
En esta Patria hemos encontrado mucha contradicción política
entre los amigos de empresas estatales de servicios públicos
y los amigos de empresas privadas de servicios públicos.
Hemos encontrado mucha contradicción entre las empresas
y los usuarios.
Yo creo que el fondo de solidaridad nos ayuda a sintetizar ambas
contradicciones. Por un lado a sintetizar la contradicción
entre empresa pública y empresa privada de servicios públicos.
Emcali continúa como una empresa estatal industrial y
comercial de la ciudad de Cali, de servicios públicos.
Y el fondo de solidaridad es un fondo que reúne a todos
los usuarios, que parte de lo que está pagando se le lleva
a ese fondo de solidaridad. Tienen una retribución, y
al mismo tiempo les va a dar una palanca de administración.
Porque el propósito es que en el momento de la devolución
de Emcali a la ciudad, haya un contrato muy bien elaborado, que
le dé al fondo de solidaridad toda la participación
en la vigilancia de la administración, para garantizar
a futuro una muy buena administración de Emcali.
Yo creo que todos los ciudadanos, participando, a través
del fondo de solidaridad, sintiéndose aportantes del fondo
de solidaridad, sintiendo que son corresponsables de la administración
de la empresa, yo creo que eso se constituye en una garantía
de buen gobierno futuro, y se supera la contradicción
entre los que quieren que todo sea estatal y los que desconfían
del Estado. Porque mantenemos una empresa estatal también
con un convenio de buen manejo, con un fondo de solidaridad donde
participan todos los ciudadanos.
Y creo también que eso nos ayuda, a través de
la vigilancia ciudadana, a eliminar esa contradicción
entre el prestador del servicio y el usuario del servicio. Que
cuando una persona abra la llavecita del acueducto, sepa que
no solamente es usuario de ese acueducto, sino que también,
a través de un fondo de solidaridad, está vinculado
y es un corresponsable de la buena administración de los
servicios.
Pero creo que debemos pensar muy a largo plazo el futuro de
Emcali. Creo que es necesario pensar que no se nos agote en la
parte de telefonía. Preservando plenamente la propiedad
estatal de la empresa, yo vengo a proponer a todos ustedes que
estudiemos que Emcali, preservando plenamente la propiedad estatal
de la empresa, haga alianzas estratégicas con empresas
más modernas en materia de telefonía y de servicios
de comunicaciones, para que no se nos atrase.
Miren, sería muy grave que este esfuerzo de recuperación
se viera en alguna forma desestimulado a futuro, con el crecimiento
de la telefonía móvil, con el decrecimiento de
la telefonía fija, con la necesidad de proveer servicios
de banda ancha, de desatrasar a la ciudad y al departamento en
materia de internet.
Por eso mi propuesta es: hagamos otro esfuerzo, el esfuerzo
que Emcali recuperada, preservando totalmente la propiedad pública,
realice alianzas estratégicas que le permitan ir siempre
a la vanguardia en materia de prestación de los servicios
de comunicaciones. Que podamos tener allí una esperanza
de internet, grande, importante, de banda ancha, etcétera.
Se que hay un sector del comercio que se ha quejado por el proceso
de construcción del MIO. Y tienen razón.
Yo vengo a reiterarles lo siguiente: el Gobierno está dispuesto
a buscar con ese sector una línea de crédito, gestionada
a través de Bancóldex, de las mejores condiciones,
que le permita a ese sector recuperarse de los traumas que de
alguna forma le haya podido causar la construcción de
las obras del MIO, en frente de sus locales.
Está conmigo el doctor Gustavo Ardila, y yo le voy a
pedir que, con la coordinación del doctor Juan Lozano,
avancemos en contacto con Fenalco Cali, con Fenalco Valle del
Cauca, para mirar cuáles son los comerciantes afectados,
a ver cómo se les puede ayudar con una línea de
crédito en condiciones que realmente les sirva.
Y finalmente déjenme proceder como viejo amigo de ustedes
y abusar algo. Miren, me pusieron muy nervioso porque en una
declaración que dí en Pereira sobre la necesidad
de hacer la carretera que va al Chocó, y que comunica
al centro del Chocó, con el Pacífico, con Nuquí,
causó aquí muchas preocupaciones. No, no se preocupen,
déjenme abusar de ustedes con toda la amistad que les
profeso y el cariño que siento por esta tierra: la carretera
de Buenaventura con la ayuda de Dios la hacemos, y no puede faltar
de ahora en adelante presupuesto para que esa carretera se vea
avanzar permanentemente.
Aquí yo creo que por tener, por haber tenido en tantas
décadas de la historia, tanta lentitud para las obras,
por haberlas prometido durante tanto tiempo, por no realizarlas,
por no emprenderlas, entonces se crea una situación muy
difícil. Porque entonces cuando se vislumbra la posibilidad
de empezar una obra, nos hacen creer que cualquiera otra que
se anuncie se va a excluir con ella.
Yo creo que el tema no es de rivalidad entre regiones, sino
de exigirle al Gobierno que las haga. Las tenemos que hacer y
tengan ustedes la fe de que hay todo el compromiso para sacar
adelante esta obra de Buenaventura, que es trascendental para
el país.
Miren, allá, el departamento del Chocó es un departamento
bien extenso de sur a norte y bien angosto de oriente a occidente.
El departamento prácticamente es un eje de sur a norte.
En la parte sur el río San Juan estructura ese eje y en
el norte lo estructura el río Atrato.
Y el departamento es un departamento que está partido
entre ese eje estructurante y su Costa Pacífica. No tiene
comunicación. Se levanta un helicóptero en Quibdó,
una avioneta, y ahí rapidito ve allá el Mar Pacífico.
Sin embargo, no tienen comunicación. Llevan muchos años
de frustración porque no se han construido los 65 kilómetros
que faltan por comunicar esa parte interna de departamento del
Chocó con su Costa Pacífica.
Nosotros hemos venido trabajando en este Gobierno en los estudios
de ingeniería, en los estudios ambientales. En este momento
está en la fase de licencia ambiental, y el país
no le puede negar al Chocó esa carretera.
Yo les voy a rogar un favor: cualquier preocupación por
cualquier atraso en Buenaventura en lo que corresponda a este
Gobierno, acósenme a mí, acósenme a mí.
Pero no piensen que la carretera que se va a hacer en el Chocó podría
excluir la prioridad que se debe asignar a Buenaventura. Hay
que manejar muy hermanadamente todas las aspiraciones de las
regiones de la Patria, y yo creo que, pensando en grande y procurando
actuar en grande, vamos sacando estas reivindicaciones adelante
en toda parte.
Quería hacerles esta introducción muy respetuosamente,
y entonces si les parece escuchamos al doctor Julián Domínguez”.