No se puede avanzar hacía una zona de
encuentro en medio de carros bomba
“CUANDO HAYA UNA SEÑAL DE BUENA FE, SE REANUDAN
DIÁLOGOS PARA ACUERDO HUMANITARIO”
Montevideo (Uruguay), 4 nov. (SNE).- El presidente de la República, Álvaro
Uribe Vélez, afirmó este sábado, ante la
sesión Plenaria de la ‘XVI Cumbre Iberoamericana
de Jefes de Estado’, que el Gobierno está dispuesto
a reanudar los diálogos en busca de un acuerdo humanitario “en
el momento que haya una señal de buena fe, una decisión
de estos grupos (FARC) de suspender acciones terroristas”.
Durante su intervención, el Mandatario relató que
esa respuesta fue la misma que entregó en la reunión
previa con la Comisaria de Relaciones Exteriores de la Unión
Europea, Benita Ferrero, quien pidió información
sobre ese tema.
“Colombia como país democrático no puede
avanzar hacia una zona de encuentro con terroristas, mientras
la respuesta de los terroristas sea con carros bombas”,
sostuvo.
El Jefe de Estado recordó que desde el 28 de mayo del
presente año (tras las elecciones presidenciales) abrió un
camino para buscar procesos de paz con las FARC, para buscar
un acuerdo humanitario que permitiera la liberación de
de Ingrid Betancourt y de otros 80 colombianos que la guerrilla
tiene secuestrados, donde “la respuesta de estos señores
del terrorismo fue explotar carros bombas”.
Exaltó que actualmente se adelantan diálogos en
Cuba, para la búsqueda de la paz con el ELN (segunda guerrilla).
Uribe Vélez puso como ejemplo de voluntad de diálogo
del Gobierno, la desmovilización de 40 mil terroristas
en los últimos cuatro años, de los 60 mil que existían
cuando empezó su primer mandato. De estos, dijo que 30
mil pertenecían a grupos de paramilitares y casi 8 mil
a guerrillas.
“Nosotros sin procesos de paz formales, en nombre de una
política de seguridad hemos desmovilizado cerca de 8 mil
guerrilleros, por los resultados, es el proceso de paz más
ambicioso de la vida colombiana, surgido del ejercicio de autoridad,
no del apaciguamiento de los terroristas”, explicó.
Al presentar las cifras, el Mandatario aprovechó el escenario
para solicitar a la comunidad internacional ayuda en el proceso
de reinserción.
“Encontramos un país con 60 mil terroristas bien
armados, financiados por el narcotráfico, y ya hay 40 mil de ellos desmovilizados. Nos cumple un deber costoso, muy
exigente, que es reinsertarlos, para lo cual necesitamos toda
la cooperación internacional”, pidió.
Justificó esa ayuda, al sostener que el terrorismo en
Colombia ha sido causa de la pobreza, que no sólo ha producido
el éxodo de 4 millones de colombianos, con un desplazamiento
interno de más de 2 millones, sino que ha afectado la
economía del país, estancando el crecimiento y
la inversión social, llegando a niveles de pobreza que
amenazaban con destruir la unidad de la Nación.
En sus encuentros con el Presidente y el Primer Ministro de Portugal,
Aníbal Cavaco Silva y Jospeh Sócrates, respectivamente,
y con la Comisaria Europea para las Relaciones Exteriores, el
Jefe de Estado colombiano recibió el apoyo de Europa en
la lucha contra el terrorismo.