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4 de Octubre

RUEDA DE PRENSA DEL PRESIDENTE ELECTO DE MÉXICO, FELIPE CALDERÓN

Bogotá, 4 oct (SNE). La siguiente es la rueda de prensa ofrecida por el presidente electo de México, Felipe Calderón, al culminar un encuentro que sostuvo con su homólogo de Colombia, Álvaro Uribe Vélez.

Declaración del presidente electo de México, Felipe Calderón: “ Comienzo por agradecer al Gobierno y al pueblo de Colombia y en especial el presidente Uribe, por la cordial recepción que me ha dado el día de hoy y por la oportunidad de reunirnos a lo largo de esta mañana.

Hablé con el señor presidente Uribe, entre otras cosas, de mi deseo de que acepte la invitación para acudir a la ceremonia en la que tomaré posesión el primero de diciembre próximo, y con gusto les comunico que el presidente Uribe ha aceptado. En consecuencia, salvo alguna causa mayor, estará con nosotros en la Ciudad de México el primero de diciembre.

También hemos tenido reuniones de trabajo en un ambiente cordial y laborioso. El presidente Uribe y un servidor repasamos los principales temas de la agenda bilateral, y conversamos sobre asuntos de interés recíproco.

Entre otras cosas, le manifesté mi interés de establecer y fortalecer mecanismos bilaterales tendientes, desde luego, a estrechar la relación entre Colombia y México.

Un punto en el que abundamos fue acerca de los intercambios comerciales entre nuestros respectivos países, y del crecimiento que han tenido tanto exportaciones como importaciones en el marco del acuerdo comercial que tenemos, desde su entrada en vigor, que ha implicado un crecimiento del comercio mutuo en cerca de un 300 por ciento.

El tratado de libre comercio ha sido, a la luz de estos datos, exitoso, y debemos seguir adelante en la promoción de los intercambios comerciales entre nuestros países.

He tomado nota de la sensibilidad de ciertos sectores productivos de Colombia y, por supuesto, mi compromiso de revisar y atender todos aquellos puntos que puedan mejorar la relación comercial y, en consecuencia, la relación bilateral entre Colombia y México.

En este mismo sentido nos congratula también el hecho de que el Gobierno de los Estados Unidos haya expresado su intención de firmar un Tratado de Libre Comercio con Colombia, y expresamos nuestro deseo de que las negociaciones concluyan de manera exitosa para este país hermano.

No tengo duda de que el camino de integración de los países latinoamericanos, pasa por encontrar mecanismos comerciales que acerquen beneficios a nuestros productores y consumidores en nuestros respectivos países.

Quiero expresar mi agradecimiento al señor presidente Uribe por su voluntad y disposición para intercambiar experiencias de asesoría en temas vitales para México. En concreto, los temas de seguridad pública y de justicia penal sobre los cuales hemos conversado esta mañana.

Como lo he planteado a los mexicanos, la seguridad pública será una de mis prioridades. Tenemos que recuperar la tranquilidad de las calles, garantizar la seguridad de las familias mexicanas, proteger sus vidas y su patrimonio, ante la delincuencia, el crimen organizado y el narcotráfico.

No podemos permitir que haya poderes de facto que atenten todos los días contra la sociedad y que desafíen la autoridad del Estado mexicano.

Colombia ha tenido una intensa batalla por erradicar sus terribles males. Hoy he tenido la oportunidad de escuchar aportaciones derivadas de la experiencia que han adquirido los cuerpos de seguridad del Estado colombiano en la lucha. Queremos aprender de las mejores experiencias y aplicar acciones contundentes en la lucha contra la inseguridad de nuestro país, que aquí en Colombia se ha traducido en la política de Seguridad Democrática.

Por otra parte, he reiterado al presidente Uribe nuestra disposición permanente a colaborar con Colombia en los asuntos que su Gobierno determine.

Manifesté mi particular beneplácito por el hecho de que Colombia se haya integrado al Plan Puebla-Panamá, y hablamos de nuestro interés recíproco para ampliar el horizonte de este Plan, así como nuestra intención de fortalecer el diálogo entre México y Colombia con relación a nuestros vecinos centroamericanos.

Por otra parte, le comenté del interés de México por fortalecer institucional y políticamente a la Organización de Estados Americanos, como un foro privilegiado de debate, cooperación, e intercambio multilateral.

Escuché con atención los puntos de vista del Doctor Uribe en este y otros temas, y establecimos el compromiso de llevar a cabo encuentros frecuentes, con agendas concretas, una vez que yo tome posesión en México, y empezar a trabajar así formalmente en fortalecer nuestras relaciones en todos los aspectos.

México y Colombia habrán de mantener y de estrechar sus lazos de amistad y sus vías de cooperación. México está comprometido a ello y el próximo gobierno que encabezaré, honrará sus compromisos.

Muchas gracias y estoy a sus órdenes para sus preguntas”.

Pregunta Camilo Restrepo, de Caracol Radio: Me interesa conocer la disposición o el interés que tendrá su Gobierno, digamos en recuperar las relaciones con nuestra vecina Venezuela, recordando pues la descalificación del presidente Chávez en su elección y también una posición que quisiera conocer de usted, y es el tema del planteamiento que ha hecho el presidente Chávez al presidente Uribe para que aclare si se siente amenazada por su política armamentista. Estas han sido unas últimas declaraciones que ha dado en las últimas horas y que parecen ser muy provocadoras. ¿Cuál es su opinión frente a ese emplazamiento que hizo el presidente Chávez al presidente Uribe, y su política frente al Gobierno de Venezuela?

Presidente electo de México: México está plenamente conciente de su compromiso, de su responsabilidad con América Latina por propiciar la integración latinoamericana y la cooperación. En mi gobierno no escatimaré esfuerzo alguno por establecer relaciones productivas, provechosas, y que concilien y acerquen a los pueblos. Y por esa razón tengo absolutamente bien claro que la relación entre países hermanos está mucho más allá de las fuerzas o debilidades personales de los liderazgos.

De manera tal que en mi caso siempre habrá una disposición concreta y definida por estrechar relaciones con todos los países de América, sin excepciones, incluido Venezuela y Cuba, y espero que esa disposición sea correspondida, en beneficio de esos países también.

Y por lo que toca el tema concreto, estoy seguro de la responsabilidad con la que el presidente Uribe se ha conducido y conduce en estos temas, y me parece que es un Presidente que tiene muy en alto el interés de los colombianos, por encima de cualquier otro interés particular.

No conozco yo los detalles de este tema, ni tampoco quiero entrometerme con una declaración en un asunto que no es de mi propia competencia.

Finalmente le diré que México tiene enorme fortaleza institucional, que ojalá alcancen algunos de los países que nos critican, y que en ese caso la Presidencia de México depende del voto de los mexicanos y de lo que resuelvan las instancias nacionales, y no de ninguna otra opinión.

Pregunta Guadalupe Contreras, de Canal 11: Son dos temas, pero sí quisiera un poco conocer sus puntos de vista sobre distintos ámbitos de los temas. Son uno Guajaca y el otro el narcotráfico.

Sobre el asunto de Guajaca, sabemos que hoy es un día importante en este diálogo. Sin embargo, ya las partes en conflicto no han decidido su participación. Quisiera conocer su punto de vista si considera que fue un error legitimar instancias de diálogo, si no cree que ya a la actual administración se le fue de las manos el conflicto, y que será quizás un hecho que se le herede a usted que lo tenga que enfrentar de alguna manera. Y también un tanto su opinión si usted estaría dispuesto a dialogar con guerrillas en el caso de México o con grupos armados. Eso con relación al tema de Guajaca.

Y sobre el narcotráfico, específicamente si hubo algún acuerdo, algún mecanismo de cooperación México-Colombia que se vaya a implementar durante su administración en materia de cooperación para combatir el narco.

Presidente electo de México: Soy alguien que entiende perfectamente el valor de la política, el valor del diálogo, y esa debe ser la vía siempre privilegiada para resolver las controversias entre países o dentro de un país.

En el caso de Guajaca, ese debe ser el camino y debe intentarse hasta que ese camino halla sido agotado, y no será ciertamente el Gobierno mexicano, estoy seguro, el que cierre esa puerta.

Independientemente de que también, estoy seguro, que las acciones que realice el Gobierno del presidente Vicente Fox y sus funcionarios, llevarán a resolver este problema, por cualquiera de los instrumentos que tiene a su disposición el Estado mexicano y que recibiere una administración pública con el menor número de problemas abiertos posible, incluyendo el caso de Guajaca.

Mi deseo es que se encuentre una solución pronta, porque hay una alteración de los derechos de los ciudadanos, que es injusta. Se puede tener la opinión que se quiera de un Gobierno, pero lo que no se puede aceptar es que los niños de uno de los Estados más pobres de México estén un mes sin escuela.

Se puede discrepar del propio Gobierno estatal o federal, pero me parece que no se puede dar como algo aceptable que a los ciudadanos se les pida un salvoconducto para entrar a su propia casa.

Se podrá pensar lo que se quiera de los medios de comunicación, pero me parece que no puede cualquiera, por su propia fuerza, apoderarse de una estación de radio o de televisión. Y me parece que el Estado debe ser garante de todos estos derechos, y que, como garante de esos derechos, debe fortalecer las vías privilegiadas de solución de este conflicto, entre ellos el diálogo, independientemente de que su responsabilidad está en solucionar estos temas.

Sé que el presidente Uribe ha sido un Presidente que ha enfrentado con enorme valor y acierto el tema del narcotráfico en Colombia. Y me externó su disposición de colaborar con México para encontrar los mecanismos de diálogo y ayuda recíproca que nos permitan sumar esfuerzos para combatir este flagelo en nuestros respectivos países.

Pregunta María Antonia Castiblanco, de CM&: Dos pequeñas inquietudes. Una, con respecto a su disposición al diálogo. Colombia está ad-portas de iniciar un proceso con las Farc, el grupo guerrerista más importante de nuestro país, y se requieren de unas condiciones especiales. Su país, que ha ayudado en el proceso por ejemplo con el ELN, ¿está dispuesto a aportar en este caso para crear esas condiciones? ¿El presidente Uribe le hizo alguna petición en ese sentido? ¿Cómo ayudaría México, el Gobierno mexicano, en este caso?

Y segundo, en materia comercial, ¿cómo va a ser en adelante el intercambio comercial entre Colombia y México? ¿Cuáles van a ser las inversiones? ¿Es posible un acuerdo bilateral de libre comercio, qué se ha pensado en este tema?

Presidente electo de México: Bueno, el primer tema, nosotros, y yo en lo personal seré muy respetuoso del Gobierno de Colombia y de las decisiones y políticas que asuma para resolver los asuntos que tiene con su gente. Y habrá siempre la disposición del Gobierno mexicano de contribuir, en la medida y en la forma que disponga el Gobierno colombiano, para resolver ese y otro tema.

Pero refrendo, reitero, insisto, en que seremos escrupulosamente respetuosos de las decisiones del Gobierno de Colombia.

Y sobre lo segundo, a mí me interesa ampliar los vínculos comerciales y de inversión con Colombia. Tenemos un tratado de libre de comercio, en el que participamos los dos, en el marco del G-3. Y ese tratado de libre comercio puede ser ampliado y fortalecido, porque estoy convencido de que la ampliación del comercio y la inversión entre Colombia y México no puede traer otra cosa más que resultados a nivel general positivos para ambas economías.

Para que allá mejores productos a disposición de los consumidores, como es el caso del acceso, por ejemplo, a telefonía móvil, a autopartes y vehículos fabricados en nuestros respectivos países, que beneficia claramente a los consumidores. O como es el acceso a materias primas o insumos, que aumentan la competitividad de nuestras respectivas economías.

Somos países hermanos, y esa hermandad tiene que traducirse en beneficios económicos que pueden alcanzarse, entre otras cosas, a través del fortalecimiento de los instrumentos comerciales que están a nuestra disposición, independientemente de que nosotros estamos atentos y deseamos que el propósito y el proyecto de que Colombia tenga un tratado de libre comercio con Estados Unidos fructifique a la brevedad en beneficio del pueblo colombiano.

Pregunta Ivone Melgar, de Excelsior: Me gustaría saber si usted pudo platicar con el Presidente colombiano sobre la experiencia de combinar mano firme contra la delincuencia y diálogo político a favor de la concordia social. En el caso del narcotráfico es obvio, en el caso de la delincuencia organizada es obvio, hay que aplicar la ley. Pero en el caso cuando la ley se trasgrede por actores políticos, ¿cuándo esos actores políticos son interlocutores y cuándo son delincuentes? ¿Si habría recibido algún consejo de qué es primero, primero la mano firme, después el diálogo, o si puede hacerse esto de manera simultánea?

Presidente electo de México: Bueno, platicamos y compartimos una serie de principios y convicciones, entre otros, el hecho de que nadie puede estar exento del cumplimiento de la ley, y que la responsabilidad del Gobierno es precisamente aportar a la convivencia, no sólo reglas claras sino también la posibilidad de que esas reglas claras sean cumplidas.

Y también yo, por ejemplo, veo en la disposición del presidente Uribe al diálogo, incluso con grupos armados existentes en Colombia, un necesario equilibrio precisamente entre la autoridad del Estado, responsable de aplicar la ley, y la disposición siempre a encontrar a través del diálogo vías de entendimiento. Que a final de cuentas se da hoy y siempre, la mejor vía para que los seres humanos nos entendamos.

Hay en la historia de México, en Ocampo, en Guillermo Prieto, en muchos próceres de nuestra historia, una referente continua a este principio, al principio de que es hablándonos y no matándonos como debemos entendernos.

Gracias y mucho gusto”.

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