Presidente Uribe firmó, como
testigo de honor, el contrato que permite desembolsar $60 mil
millones al hospital
SITUACIÓN DEL HOSPITAL MATERNO INFANTIL ERA MOTIVO DE
ANGUSTIA PARA EL GOBIERNO
Bogotá, 9 oct (SNE).- Al celebrar la
firma del contrato que permite el desembolso de 60 mil millones
de pesos para contribuir
a la salvación del hospital Materno Infantil de Bogotá,
el presidente Álvaro Uribe Vélez dijo que es un
“paso
importante”, y que la crisis del centro hospitalario
era “motivo de angustia permanente” para el Gobierno
Nacional.
“Muchas felicitaciones a ustedes que lo
han hecho posible, y celebro mucho que podamos dar este paso,
porque confieso que era un motivo
de angustia permanente para el Gobierno Nacional saber que algo
tan doloroso, sucediendo aquí en un sitio cercano, todavía
no tenía solución”, expresó.
El Mandatario se refirió al hecho durante la firma este
lunes, en la Casa de Nariño, como testigo de honor, del
contrato con la Beneficencia de Cundinamarca por un préstamo
condonable de 60 mil millones de pesos para ayudar en la salvación
del Materno Infantil.
Quiero saludarlos y celebrar que la Nación se haya podido
incorporar a este proceso que lo necesitaba Bogotá y lo
necesitaba el país”, dijo.
Uribe Vélez explicó por qué el carácter
de condonable que tiene el crédito: “Muchos colombianos
me han preguntado: ¿bueno, pero por qué es un crédito?
Porque es un aporte condicionado, que se puede volver regalo.
Si efectivamente se cumple todo lo estipulado en el conjunto
de condiciones, ese dinero no hay que pagárselo a la Nación.
Si se incumplen las condiciones, obra como un crédito
y se debe pagar a la Nación”.
Adujo que los aportes condicionados que el Gobierno ha orientado
hacia la salvación de hospitales, “han ayudado
a producir muy buenos resultados”.
La firma del contrato –dijo–, “es una buena
noticia, en medio de dificultades que se presentan todos los
días, pero también una buena experiencia, porque
por la vía de la reestructuración responsable,
de los aportes presupuestales condicionados, hemos logrado que
salgan adelante en el país 128 hospitales que estaban
moribundos”.
Reveló que en este proceso de salvación de hospitales
el Gobierno se encontró con dos tipos intereses políticos
opuestos, cada uno en un extremo. En un extremo el interés
político de que no se podían reestructurar y de
que había que mantenerlos intactos. Y en el otro lado,
el interés político que quería que simplemente
los hospitales se murieran.
“Nosotros no quisimos alinearnos con ninguno
de esos dos extremos. Ni con el extremo que los iba a conducir
a la ruina por evitar
la reestructuración, ni tampoco quisimos alinearnos con
el extremo que simplemente, en medio de la indiferencia, quería
dejarlos morir”, sostuvo.
Y agregó: “Nos propusimos un camino de la mitad:
el camino de contribuir a salvarlos vía reforma, vía
reestructuración, vía racionalización de
costos, vía garantía de sostenibilidad fiscal”.
Para el Mandatario, ningún problema hospitalario se resuelve
enviándoles dinero, sin que se garantice que los recursos
contribuyen al salvamento definitivo de las entidades.
“Nada resuelve, ningún problema se resuelve, enviándole
un dinero a un hospital, para que ese hospital pase penas, supere
dificultades seis meses y recaiga en la enfermedad”, aseveró.
“Lo que se requieren –dijo–, son soluciones que hagan
estas entidades sostenibles, que las conviertan en entidades
equilibradas, en entidades que le puedan prestar el mejor servicio
a la comunidad, que tengan que vivir con rigor administrativo,
con austeridad, pero también sin la angustia de que el
mes entrante se van a cerrar por falta de fondos”.
“Tengo mucha fe que este paso sea un paso
definitivo para lograr que finalmente podamos mostrar en Bogotá, en la Fundación,
otro modelo. Hacemos votos por ello, y vamos a seguir en la tarea
de reestructurar todas las clínicas del Seguro Social,
y de avanzar en la reestructuración de los hospitales
públicos del país”, afirmó el presidente
Uribe.
Agradeció el aporte hecho al proceso por parte del alcalde
de Bogotá, Luis Eduardo Garzón, y el gobernador
de Cundinamarca, Pablo Ardila, así como el papel de mediador
y supervisor que cumplió la Procuraduría General
de la Nación.
UNA PRUEBA DE LO QUE SE PUEDE LOGRAR
Para el ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, el hecho
de haber sorteado las dificultades a lo largo de un proceso
de un año, “es prueba de lo que se puede hacer
cuando las voluntades empujan en la misma dirección
y logran un resultado que de pronto había poca gente
que pensaba que fuera posible”.
Dijo que para el Gobierno Nacional es “motivo de satisfacción
este trabajo coordinado, serio y constructivo”, que concluyó este
lunes con la firma del acuerdo que garantiza recursos para ayudar
al salvamento del Materno Infantil.
Resaltó el interés, seguimiento y voluntad de sacar
adelante las soluciones tanto del Gobernador de Cundinamarca
como del Alcalde de Bogotá, así como la veeduría
permanente y el ánimo constructivo del Procurador General
de la Nación.
“Aquí se sientan las bases para que de manera definitiva,
en los meses que vienen, logremos cerrar esta problemática
y logremos que la Fundación juegue el papel que está llamado
a jugar en la ciudad y el departamento”, señaló el
Ministro de Hacienda.
HABLA EL PROCURADOR
Por su parte, el procurador general de la Nación, Edgardo
Maya, dijo que “es satisfactorio que hoy se dé este
resultado, con una mediación que hemos tenido durante
un año, buscándole una solución al problema
de la Fundación San Juan de Dios e inicialmente al Materno
Infantil”.
Anunció que la Procuraduría vigilará el
buen uso de los recursos del crédito condonable otorgado
por el Gobierno Nacional.
“Hay un manejo que va a vigilar la Procuraduría también,
que es el manejo fiduciario que se va a hacer de estos 60 mil
millones de pesos, es un crédito condonable, o sea que
tienen que cumplirse determinados requisitos, como lo dijo el
señor Presidente, para que la Nación no solicite
la reversión del valor por incumplimiento de lo pactado,
indicó.