PALABRAS DEL PRESIDENTE
EN EL CONSEJO COMUNAL 122
Barragán, Quindío, 14 ene. (SNE). La
siguiente es la intervención del presidente de la República, Álvaro
Uribe Vélez, en el Consejo Comunal de Gobierno 122 realizado
en Barragán, Quindío:
“Esta mañana estaba la Cordillera, inusualmente descubierta,
porque cuando uno la cruza se asoma el nevado del Tolima, enseguida
una capa muy densa de nubes y de pronto alcanza uno a ver en alguna
forma una partecita de Ibagué. Esta mañana estaba
totalmente despejada y ustedes ven el río Magdalena hasta
la cúpula de los nevados.
Y cuando entra el avión al Quindío, creo que se
ve el paisaje más bello del mundo. Este es el pedacito de
cielo que mi Dios le regaló a Colombia, le provoca a uno
quedarse sosteniendo y mirando este paisaje, este jardín
y además —también- combinado por la laboriosidad
de ustedes. ¡Cómo lo manejan de bien!
Al aterrizar a la orilla del río Barragán había
un paisano con un sombrero parecido a los míos —el
sombrero mío es de 11 mil pesos, el de él es más
carito, si hubiera cambiado con él le tengo que encimar-
y le dije: ¿qué tienes aquí? y me dijo: ‘un
alquiladero de caballos, es que está viniendo mucho turista,
les alquilamos caballos, hay unos paseos ecológicos muy
bellos’.
Y enseguida salude a otro paisano, también con un sombrero
blanco y le dije: ¿qué tienes aquí?, me dijo: ‘un
alquiladero de lanchas’. Y le dije: ¿usted cordillerano
con lanchas?, ¿esta loma aquí para arriba con lanchas?
y me dijo: ‘si, el turismo, alquilamos unas barquitas para
que la gente se embarque por el río Barragán se van
a La Vieja y la gente goza mucho.
¿Cómo les fue muchachos en esta temporada? Y me
dijeron: ‘llovió mucho pero nos fue muy bien’.
En seguida llegó un hombre, un compatriota humilde, muy
festivo, muy alegre, a regalarme una gaseosa y una bolsa de agua.
Y le dije: vendémela, pero no me la regale, no te vas a
varar’. Y dijo: ‘no, me fue muy bien esta temporada’.
La verdad es que hemos pasado unos años muy difíciles:
ese precio del café tan deprimido, el turismo trancado por
el terrorismo, desconfianza en la inversión económica.
No estamos en el paraíso, pero creo que hay tendencias positivas.
Primero, con subsidios del Gobierno Nacional,
después con
un gran esfuerzo para que los Estados Unidos entrara de nuevo a
la Organización Mundial de Café, con un gran esfuerzo
para promover los cafés especiales, con un gran esfuerzo
para las tiendas de café, ahí hemos venido recuperando
el precio con un factor bien importante para el ingreso de los
campesinos.
Este Gobierno experimentó con 5 mil hectáreas de
maíz en las zocas de café en el año 2002,
el año pasado fueron más de 50 mil. Entonces, esos
terrenos que se mantenía ociosos mientras el café zoqueado
se recuperaba, ya en 55 mil hectáreas se está produciendo
maíz, lo que hace que un intervalo improductivo se haya
convertido en un intervalo productivo.
Además creo que ya fueron más de 15 mil hectáreas
de fríjol. Eso ayuda al ingreso de nuestros agricultores
en medio de grandes dificultades, porque la reevaluación
ha jugado contra el precio interno del café.
Así y todo, la Ley tributaria de 2002 garantizó que
en este país, por primera vez, el porcentaje más
alto del precio internacional se trasfiera en precio interno a
los cafeteros. La contribución más baja.
Creo que el año pasado —y quiero agradecerle al Congreso
de la República aquí representado por un distinguido
grupo de Senadores y Representantes-, por primera vez en la historia
de Colombia, al productor cafetero colombiano le esta llegando
mas del 92 por ciento del precio externo. Pienso que ese es un
buen paso para estimular esta economía.
Pero una economía muy diversificada, afortunadamente ve
uno en el Quindío el plátano, la yuca —con
esas grandes posibilidades para producir alcohol-, confío
que este año el país vea producción de alcohol
carburante no solamente en estos ingenios caucanos, vallecaucanos,
en el de Risaralda, sino también alcohol carburante en el
Cesar a partir de yuca, en el Meta a partir de yuca y que instalemos
la primera planta de biodiesel a partir de palma africana. Allí tenemos
grandes posibilidades para el campo.
Pero volviendo al cuento del paisano mío que alquila caballos,
del paisano mío cordillerano y montañero como yo
que alquila lanchas, del hombre que vende frasquitos de agua, volvemos
al tema del turismo. Un gran progreso en el Quindío, una
gran posibilidad para la Patria.
La verdad es que las cifras son sorprendentes,
la movilización
de colombianos, el impacto del turismo en el empleo, la irrigación
de recursos. Y cumplimos algo con lo cual yo no habría sido
capaz de comprometerme: el país, el año pasado, recibió más
de un millón de visitantes extranjeros. Si a mí,
en agosto, en diciembre de 2002, me hubieran dicho: ‘dénos
una cifra de visitantes de extranjeros del 2005, yo no habría
sido capaz’. Pero ahora lo que tenemos que hacer es llegar
a dos millones.
Y no nos podemos quedar retrazados, hay
que buscar los recursos de donde sea para habilitar este aeropuerto
de El Edén y
ponerlo a recibir vuelos internacionales, a ver si no solamente
llegan los turistas del país, sino masivamente turistas
del extranjero como lo requiere este departamento.
Pero estaba demorando esta intervención a que llegará el
General Herazo (Jairo Antonio, comandante de la 8ª Brigada
del Ejército), porque en esta, mi primera intervención
pública de 2006, quiero resaltar ante todos los colombianos
el papel ejemplar de nuestro Ejército, de nuestra Policía,
de nuestra Fuerza Aérea, de nuestra Armada y de nuestro
DAS para garantizar el turismo.
Si no fuera por la tarea abnegada de los
soldados y policías
de la Patria, el país no tendría este resurgir de
una industria generadora de empleo, irrigadora de recursos, de
una industria de convivencia, del turismo que es la industria de
la alegría.
Desde Barragán, aquí en el pie de la cordillera
del Quindío, quiero hacer llegar un aplauso, en nombre de
todos los colombianos, a la Fuerza Pública por su desempeño
en esta temporada turística.
¡Que todos los soldados y policías de la Patria sientan
un mensaje que se les envía desde el corazón de cada
colombiano, un mensaje de gratitud!
Señor General Pérez (Hernando), usted ha asumido
la Tercera División, tenemos mucha confianza en derrotar
en esta área de la Patria definitivamente el terrorismo.
Nuestro aplauso de gratitud también es la reiteración
de nuestra confianza de que vamos a derrotar el terrorismo definitivamente.
Una Patria sin guerrilla, sin paramilitares,
sin corrupción,
sin narcotráfico. Una Patria que reivindica a los pobres.
Señor General Herazo, usted pertenece a una nueva generación
de generales de la Patria, el pueblo quindiano está agradecido
por el dinamismo que usted ha demostrado en los pocos días
que ha estado al frente de la Brigada. Esta cordillera tan cerca
de Armenia y se la había tomado el terrorismo.
Tuvimos, afanosamente, que instalar el
batallón de alta
montaña y nos quedan dificultades, todavía hay que
capturar unos bandidos en La Línea que aún se constituyen
en amenazas a los turistas y esos bandidos suben por Cajamarca — El
Toche a La Línea y muchas veces remontan la cordillera y
queman unas casas de finca —como quemaron al principio de
diciembre en la cordillera arriba en Salento-: ¡derrótelos
mi General Herazo! Usted pertenece a una nueva generación
de generales de la República que quiero consagrar como la
generación de la victoria final, en bien del pueblo colombiano.
En compañía de todos los altos oficiales de la Policía,
del señor General Gómez Guzmán (Mauricio)
comandante de la Región de Policía, de los comandantes
del Quindío, Risaralda y Caldas, devolvamos plenamente a
esta región la paz.
Tenemos dificultades, nadie puede negar
que hay dificultades en ese occidente de Risaralda, hemos superado
bastante las dificultades
del occidente de Caldas, pero allá en ese triangulo del
occidente de Risaralda donde se juntan Chocó, Risaralda,
Antioquia y donde también se asoma el Valle del Cauca, hay
dificultades y allá tenemos que derrotar esos bandidos.
Señores Generales: la Patria tiene
mucha esperanza en ustedes.
Hoy tenemos dificultades en el Putumayo,
pero en la medida que no aflojemos esta determinación, en la medida que haya una
conjunción espiritual del Gobierno y del pueblo y del Gobierno
y del pueblo no solo entre sí, sino con la Constitución
y las Fuerzas Armadas de la Patria, a esos bandidos los vamos a
derrotar en todas partes. Para bien de esta Nación, para
que prospere la economía, para que haya empleo, para que
podamos reivindicar a los pobres de la Patria.
¿Saben cuál es el problema del Quindío ahora?:
que como se ha devuelto la paz a muchas regiones turísticas,
entonces ahora la gente se riega en muchas partes del país,
ese turismo se dispersa buscando una u otra región, pero
en la medida que más consolidemos el avance hacia la recuperación
plena de la paz, más confianza va a haber de propios y de
extraños.
Y es muy importante, señor General Pérez, señor
General Herazo y señor General Gómez que derrotemos
los grupos terroristas que todavía hacen daño en
el oriente del departamento de Caldas.
Y que su acción, señor General Pérez, en
esta cordillera hacia el norte y hacia el sur, coordinada con la
acción de los señores generales, coroneles, oficiales
y suboficiales, de las tropas del Ejército de la Patria
acantonadas en el Tolima y en el Huila: ¡derrotemos en esta
cordillera la presencia del terrorismo que se ha sentido campeona
durante tantas décadas!
Por supuesto, en el propósito de acabar el terrorismo,
el Gobierno reitera toda la voluntad de combatirlo militarmente
y de abrir las puertas de la negociación. Creo que uno de
los mejores aportes que el Quindío le ha hecho a la Patria
es que el doctor Luís Carlos Restrepo Ramírez sea
el Alto Comisionado de Paz en un momento tan difícil.
Dirigir conversaciones de paz es muy difícil, todo paso
genera controversia, por eso hay que tener mucha paciencia y mucha
persistencia. Pero ahí vamos viendo los resultados: 22 mil
desmovilizados en este Gobierno. Eso no se consigue fácil
y la idea es que la política de Seguridad Democrática
envíe dos mensajes: un mensaje de autoridad a quienes deseen
persistir en el terrorismo, mensaje de que se les va a derrotar.
Y un mensaje de confianza y de reconciliación a quienes
quieran negociar, reinsertarse.
Esa Seguridad Democrática que los combate mientras persistan
en el terrorismo, es la misma que les da todas las garantías
en el momento que tomen la decisión de negociar, en el momento
que se reinserten.
El proceso de reinserción no es fácil. Córdoba
tiene cerca de 9 mil habitantes. 22 mil reinsertados es dos veces
y medio la población de Córdoba, imagínense
ustedes. Ese tema es muy difícil.
Ya estamos encontrando algunas fuentes
de empleo para los reinsertados, ese es un gran reto del país este año y lo vamos
a enfrentar: capacitación y empleo para los reinsertados.
Esta semana será designado el funcionario dedicado únicamente
a la gestión de empleo para los reinsertados. Entonces,
esta política valiente, abnegada, de sacrificio, de los
soldados y policías de la Patria con el terrorismo, de la
mano de la política de paz —que conduce el Alto Comisionado-
nos tienen que conducir a una Colombia sin guerrilla, sin paramilitares,
sin narcotráfico, sin corrupción.
Sería muy importante poder dedicarle hoy un buen rato al
tema agrícola aprovechando la presencia del presidente de
la Federación Nacional de Cafeteros, Gabriel Silva Lujan —presencia
que tanto le agradecemos- y para que también el Ministro
(de Agricultura) Andrés Arias le cuente desde acá al
país, las decisiones que se han tomando con las tierras
de Estupefacientes. Nos demoramos para introducir correctivos,
pero ahí vamos en el camino.
Uno no aprende las cosas con la rapidez
y la facilidad con que quisiera, todos los procesos tienen etapas
de aprendizaje. Si a
mí me preguntaran: ‘¿Presidente, dénos
una lista de equivocaciones de su Gobierno?, diría: una
de las equivocaciones de este Gobierno, haber empezado tarde a
introducir correctivos en el Consejo Nacional de Estupefacientes.
Un correctivo: tierra que quede con sentencia
ejecutoriada de extinción de dominio, que no se le entregue más a
arrendatario, sino a campesinos. Ya vamos en casi 60 mil hectáreas.
Y veníamos discutiendo en el segundo semestre del año
pasado y tomamos la decisión en esta primera semana, hay
alrededor de 260 mil hectáreas sin sentencia definitiva,
pero intervenidas por Estupefacientes, que se las habían
entregado de antaño y este Gobierno siguió con esa
costumbre equivocada, a arrendatarios, ¿por qué?
Entonces, se ha tomado la decisión
de terminar esos contratos de arrendamiento y entregarle esa
tierra a organizaciones campesinas,
desplazados, victimas y reinsertados. Creemos que eso es un paso
muy importante.
A eso se le suman 39 mil millones de pesos
que va a destinar este año el Ministerio de Agricultura —y que nos aprobó el
Congreso- para comprar tierras para desplazados, algún aporte
para los indígenas y se suma un presupuesto que se consolida
en 28 mil millones de los dos años anteriores y este del
Ministerio del Interior, para comprar tierras para resolver los
problemas de indígenas del Cauca. Creo que esto nos ayuda.
En el tema de la propiedad de la tierra,
que es tan pertinente hablarlo en este departamento que no tiene
concentración,
Colombia venía bien hasta la aparición del narcotráfico,
Colombia venía asistiendo a un proceso de división
de la tierra, el proceso natural por el paso de una generación
a la otra, los esfuerzos que se habían hechos en reforma
agraria. El narcotráfico, la guerrilla y el paramilitarismo
invirtieron ese proceso y hasta el año 2003 vimos, nuevamente,
invertida la tendencia peligrosamente hacía la concentración
de la propiedad de la tierra. Eso hay que combatir.
El Gobierno no va a hacer demagogia asustando
a los productores honestos del campo con acciones de reforma
agraria, pero el Gobierno
no puede permitir que siga la concentración de la tierra
en cabeza de narcotráfico, guerrilla y paramilitares, por
eso el Congreso de la República en una de las primeras leyes
que le aprobó a este Gobierno, propuesta por el entonces
ministro (del Interior) Fernando Londoño, es la ley que
facilita los procesos de extinción de dominio.
Tenemos muchísima confianza que este año se avance
más en la aplicación de esa ley, se avance tanto
en la Fiscalía como por parte de los jueces de la República
y que eso nos permita resolverle problemas a reinsertados, a comunidades
negras, a comunidades indígenas, a víctimas y a desplazados.
Creo que ese es un tema bien importante para trabajarlo dentro
de las metas prioritarias de este año.
Es también y bien importante que hablemos del Plan 2.500,
los esfuerzos viales que se están haciendo en todo el país.
Esta mañana la señora Gobernadora (Amparo Arbeláez
Escalante) y el Ministro de Obras (Andrés Uriel Gallego)
me mostraban una inversión que ya hicimos producto de uno
de estos Consejos Comunitarios, de la Española — Barragan
parte, y me hablaban de los nuevos contratos que están empezando.
Este plan de obras tiene un origen feliz,
no fue impuesto, fue producto de una concertación en estos Consejos Comunitarios,
con el Congreso de la República, con los gobernadores, con
los alcaldes, con los concejales, con los diputados, con la base
comunitaria.
Quedan faltando muchas vías, es cierto, pero ejecutemos
bien estos contratos, con toda transparencia, como con toda transparencia
se han adjudicado. Todas las adjudicaciones se hicieron en audiencia
pública, le delegamos a dos departamentos la contratación,
a Caldas y al Cesar y tenemos también la plena confianza
de que allí imperó la transparencia en esa adjudicación.
Vamos a hacer unas reuniones regionales
en todo el país,
con el Ministro, el director de INVIAS (Mauricio Ramírez
Koppel), los alcaldes, los gobernadores, para estar evaluando cómo
avanza el Plan 2.500 porque hay proyectos viales del Plan 2500
en todo el país. Hoy es muy importante que nos den un informe
de cómo está avanzando en el Quindío.
Me cuenta el doctor Luis Carlos Restrepo
que al pasar por La Línea,
cuando venía a Filandia a visitar a su familia, encontró muchos
turistas que aparcaban el carro a la vera del camino y caminaban
en búsqueda de la boca del túnel. Este año
vamos a avanzar con el Gobierno Japonés para tener los recursos
de crédito que permitan que tan pronto termine el primer
contrato, que es el del túnel básico, podamos seguir
con las obras complementarias para que el país tenga ese
túnel.
Le voy a pedir a mis compatriotas que ese
túnel lo llamemos
el túnel del Segundo Centenario. ¿Por qué?
Porque el 7 de agosto del 2019 la Patria cumplirá dos siglos
de vida independiente. Estamos haciendo un esfuerzo de debate democrático
y este año se va incrementar, para que con la base del pueblo
colombiano interviniendo, como actora fundamental, el país
defina una visión de la Colombia que queremos para el 7
de agosto del 2019. Con unas metas parciales, exigentes, como las
del 20 de julio del 2010 cuando cumpliremos 200 años del
Grito de Independencia. Y metas parciales periódicas.
Aquí hay que trabajar la visión de largo plazo y
el trabajo cotidiano. Si uno se dedica simplemente, al trabajo
cotidiano y no hay una visión de largo plazo, la gente se
desestimula porque dicen: ‘para donde va este esfuerzo, no
sabemos’. Pero si se propone una visión de largo plazo
y nos ponemos a soñar y a dormir y no trabajamos cotidianamente,
la gente se desilusiona, la ilusión se torna en frustración,
porque la gente dice: ¿para qué esa visión,
si no hay trabajo, no hay ganas, no hay dedicación, no hay
disciplina para lograrla? Y tenemos entonces, que empujar la visión
de largo plazo y el trabajo cotidiano.
¡Qué bueno que las nuevas generaciones de colombianos,
cuando vengan por esta carretera: doble calzada Bogotá — Girardot
en plena construcción!
¿Cómo se llama ese sitio
en el Tolima antes del Espinal, Ministro?
Andrés Uriel Gallego, ministro de
Transporte: San Rafael…
Presidente de la República: A San
Rafael, contratada la doble calzada.
¿De San Rafael a Ibagué en licitación?
Andrés Uriel Gallego, ministro de Transporte: Si
señor…
Presidente de la República: hasta Cajamarca en doble calzada
y el Túnel de la Línea. Y Dios mediante, la doble
calzada de Buga a Buenaventura.
Que la nueva generación de colombianos vea un país
distinto, que les de ilusiones y que cuando entren a ese túnel
de Ibagué para acá o de Armenia para allá,
haya un aviso grande con la bandera de la Patria que diga: “el
túnel del Segundo Centenario que conducirá la luz
para la felicidad de las nuevas generaciones”. Queremos estas
obras comprometan a las nuevas generaciones de compatriotas.
Y es muy importante examinar hoy también la política
social. Tengo que decir que en el Gobierno no he encontrado sino
uno más andariego que yo, tengo que decir que en el Gobierno
no he encontrado sino uno que duerme menos horas que yo, que es
el Ministro de Protección (Diego Palacio Betancur), con
gran dedicación le empieza a mostrar al país unos
buenos resultados en lo social, faltando mucho.
Cuando ya tenemos seis departamentos con
los cuales el Ministro logró acuerdos para tener plena cobertura de salud —son
ellos La Guajira, Cesar, Arauca, Casanare, Antioquia y Huila-,
Ministro, rápidamente hay que llegar al suyo. ¿Cuántos
quindianos de estrato uno, dos y tres nos faltarían para
tener aquí plena cobertura?
Diego Palacio Betancur, Ministro
de Protección Social: Presidente, Sisbén 1 y 2, son cerca de 80 mil personas para
poder tener universalización en el Quindío.
Presidente de la República: ¿ Y
usted esta listo si la Gobernadora le ayuda?
Ministro de Protección Social: Presidente tuvimos una reunión
con la Gobernadora y con algunos alcaldes en diciembre, y creo
que si no podemos con todo el departamento, por lo menos con los
municipios de la cordillera existe un acercamiento por parte de
los alcaldes que creo, vamos a poder hacer un avance importante.
Presidente de la República: ¿Y por qué no
lo dejan hoy definido?
Ministro de Protección Social: Yo
estoy listo, Presidente.
Presidente de la República: Déjenlo hoy definido,
pero déjenlo definido con este cronograma: arrancar con
los municipios de la cordillera esta bien, pero también
fijar unas fechas, así no sean inmediatas, para que busquemos
todos los recursos presupuestales y la totalidad de los quindianos
de los estratos 1, 2 y 3 queden con Régimen Subsidiado.
Porque esta Patria necesita decirle al
mundo: “hemos fortalecido
la democracia, hemos derrotado el terrorismo, estamos procediendo
con generosidad en la reinserción y de la mano de la autoridad
llevamos la política social”. Eso es muy importante
para el buen nombre de Colombia, de los colombianos ante la faz
del mundo.
No son excluyentes la política de Seguridad y la política
Social van de la mano.
La política de Seguridad posibilita la política
social porque trae confianza, genera empleo, se expande la economía.
Y a su vez, la política social demuestra las bondades de
la política de Seguridad y la hace sostenible en el corazón
del pueblo.
Una política de Seguridad en un Estado Democrático
no se sostiene sino en la medida que esa política de Seguridad
tenga buen recibo en el corazón del pueblo. Que el pueblo
la quiera, como la quieren esos paisanos míos que alquilan
aquí caballos y lanchas a los turistas y al otro que me
brindo la bolsita de agua. Que el pueblo colombiano, la base popular
sienta cariño por sus Fuerzas Armadas y por la política
de Seguridad. Por eso tenemos que llevar de la mano las dos: la
política de Seguridad y la política Social.
Diego, usted y yo no podemos hoy irnos
de aquí sin una
cosa concreta: la plena cobertura de régimen subsidiado
de salud para que de inmediato, en la cordillera y con un poquito
más de larga en el tiempo mientras busca los recursos, en
el plan —para que quede todo el departamento-.
Es que es muy importante decirle al turista
internacional: vaya al Quindío que va a encontrar el mejor clima del mundo,
vaya al Quindío que encuentra la gente más atenta
del mundo, vaya al Quindío que encuentra el paisaje más
lindo del mundo y encuentra plena cobertura en salud.
Confío que esta Patria en dos años, haciendo un
esfuerzo entre todos, puede tener plena cobertura en salud para
los estratos 1, 2 y 3, como hay que lograrlo en educación.
Tengo confianza en eso, compatriotas, que con un trabajo esforzado
de todos lo logramos.
Muchas gracias querida comunidad”. |