DECISIÓN DE DERROTAR LA DROGA ES AUTÓNOMA: URIBE

Bogotá, 20 jul (CNE). La determinación de derrotar la droga en el país es autónoma del Gobierno Nacional y no depende de que los países industrializados quieran o no ayudar en la lucha contra este flagelo.

Así lo advirtió hoy el presidente de la República, Álvaro Uribe Vélez, al reiterar que este problema ha corrompido a Colombia y a la sociedad, se ha infiltrado en las instituciones, ha financiado a los grupos violentos, es el fertilizante del terrorismo y ha destruido un millón 700 mil hectáreas de selva tropical

“Esa droga, que tanto ha corrompido a Colombia, la tenemos que derrotar definitivamente. Nosotros tenemos que ser los campeones mundiales del esfuerzo y de los resultados. Los países industrializados, si nos ayudan a derrotar la droga aquí y si la derrotan allá, cuánto mejor. Pero nuestra determinación no depende de que quieran ayudarnos o no. Nuestra determinación es autónoma”, enfatizó el Jefe de Estado.

De igual forma, el Gobierno tiene la determinación de luchar –con su Fuerza Pública– contra el terrorismo y contra la violencia, y de recuperar la seguridad, todo con el total respeto a los Derechos Humanos y al ordenamiento jurídico, sin interferir en la acción de la democracia, respetando sus resultados, aceptando la crítica.

“Aspiramos a que llegue un momento en el cual en Colombia no pueda haber una sola queja contra las instituciones en materia de Derechos Humanos. Ganarles a los terroristas este desafío, con limpieza en el acatamiento a la ley, con limpieza en Derechos Humanos, le va a dar a Colombia una medalla en la historia de las democracias del mundo”, dijo Uribe, durante la conmemoración de los 193 años de la Independencia.

El Mandatario agregó que esta condición de respeto a los Derechos Humanos, en todos los procesos de recuperación de la Seguridad Democrática, ha permitido que hoy en día las instituciones del Estado gocen de creciente apoyo por parte de la Comunidad Internacional.

“Que el mundo sepa que aquí hay tanta energía para derrotar el terrorismo, como para defender los Derechos Humanos, como para defender el pluralismo. Nosotros no reconocemos enemigos en la crítica. Nosotros no reconocemos enemigos en quienes piensen de manera diferente. Voces críticas, expresiones de ideologías diferentes, todas bienvenidas, pero todas respetando la Constitución, respetando la convivencia”, enfatizó.

Al recordar la frase de la carta enviada por el Libertador al Congreso de Ocaña en 1828 que dice: “Dadnos un Gobierno en que la ley sea obedecida, el gobernante respetado y el pueblo libre”, el Presidente dijo que el deber del Estado y de la Fuerza Pública es obedecer la Ley, dar cumplimiento a ésta y derrotar la violencia.

“El nuestro es un Gobierno con toda la determinación de derrotar la violencia. Aquí no hay dubitaciones. Aquí todos los días amanecemos más tonificados para derrotar la violencia”, expresó.

Y recordó que el país sólo tiene dos enemigos contra los que hay que luchar decididamente: el terrorismo y la corrupción.

“Este no es un Gobierno de caprichos del Mandatario. Este no es un Gobierno de dogmatismos. Este no es un Gobierno de abusos de la Fuerza Pública. Este es un Estado de Leyes. Y este es un Gobierno de Leyes. Procedemos en el marco de lo que emana del Capitolio Nacional, en el marco de las leyes de Colombia. Y eso nos da toda la autoridad moral para poder afianzar nuestra voluntad. Para que esa voluntad sea de hierro para derrotar el terrorismo. Para que el Gobierno sea respetado, el Gobierno tiene que cumplir la Ley. El Gobierno tiene que demostrar pulcritud en todas sus actuaciones. El Gobierno tiene que demostrar que avanza serena pero firmemente en el camino de la derrota de la corrupción”, sostuvo.

Finalmente el Jefe de Estado recordó que el 20 de julio de 1810 hubo un Florero Llorente para la Independencia de la Nación. Hoy, ese Florero de Llorente lo constituye el hecho que los ciudadanos están cansados del terrorismo y saturados de la arrogancia y del cinismo de los terroristas.

Por lo que dijo: “Nosotros no queremos que la Patria se convierta en una colcha de retazos de imperios de terroristas feudales. Nosotros vemos en el terrorismo, en su ensañamiento contra el Pueblo de Colombia, un Florero de Llorente que desata nuevas y creativas energías en la Fuerza Pública y en las instituciones democráticas, para derrotar el terrorismo y reconquistar la independencia material, la libertad efectiva de los colombianos”.