Al
término de este año
COLOMBIA CONTARÁ CON POLÍTICA
DE SEGURIDAD ALIMENTARIA Y NUTRICIONAL
Bogotá, 21 oct (SNE). Antes de culminar
este año, el país contará con una Política
de seguridad Alimentaría y Nutricional, diseñada
por el ICBF con el apoyo de diversas entidades gubernamentales.
Esta política tiene como objetivo central
que los colombianos habitantes de todas las regiones dispongan,
accedan y consuman alimentos en suficiente cantidad y calidad
y estará dirigida en su mayoría a las personas
de las zonas más vulnerables.
Para el desarrollo de
esta política
en el país el Instituto contempla ocho líneas de
acción:
- Seguridad alimentaría
- Protección al consumidor
mediante el control de la calidad de los alimentos
- Prevención
y control de deficiencias de micronutrientes
- Prevención
y tratamiento de enfermedades infecciosas y parasitarias
- Promoción
y protección y apoyo de la lactancia materna
- Promoción
de la salud, alimentación y estilos de vida
saludables
- Evaluación y seguimiento en
aspectos nutricionales y alimentarios
- Formación del recurso humano en políticas
de nutrición
y alimentación
Para
cumplir estas líneas de acción,
el Gobierno Nacional contará con el apoyo de las administraciones
municipales y departamentales.
“Esta política es un trabajo de
mucha entidades y busca generar un marco de referencia para que
haya un mejor acceso y disponibilidad de los alimentos, mediante
acciones que cada ente departamental y municipal puede desarrollar
de manera específica. Promover la Seguridad alimentaría
significa que todos participemos”, dijo la directora del
ICBF, Beatriz Londoño.
Según las cifras, los índices
de nutrición en Colombia han mejorado en los últimos
años, pero siguen siendo altos en su mayoría en
el campo. Uno de cada cinco niños de las zonas rurales
sufre de retardo de crecimiento en comparación con uno
de cada ocho en las ciudades. Un 19.5 por ciento de los niños
menores de 5 años de la zona rural presentan desnutrición
crónica.
“Contradictoriamente es mayor la desnutrición
en el área rural y la cifras son aterradoras. Es responsabilidad
de todos los colombianos reflexionar y no pasar a actuar, que
estamos haciendo cada uno de nosotros, desde la familia, desde
la comunidad desde los grupos con los que trabajamos”,
expresó la Directora del ICBF.
Así mismo, existen zonas en el país
con márgenes críticos de desnutrición por
encima del promedio nacional de desnutrición que es de
13.5 por ciento. Departamentos como Cauca y Nariño presentan
un promedio de desnutrición de 24.5 por ciento, Tolima,
Huila y Caquetá de 18.9 por ciento y Bolívar, Sucre
y Córdoba de 18.2 por ciento.
En el caso de las mujeres embarazadas, la desnutrición,
y especialmente la deficiencia de yodo, puede producir en sus
hijos diversos grados de retraso mental. Así mismo, en
la primera infancia, la anemia por carencia de hierro puede retardar
el desarrollo psicomotor y afectar el desarrollo cognoscitivo
mediante la reducción del coeficiente intelectual en unos
nueve puntos.
Además, el problema alimentario y nutricional
en el país no solo está relacionado con insuficiencia
o falta de disponibilidad de los alimentos, sino especialmente
con una desigual distribución de los ingresos y de la
capacidad de demanda y consumo de los alimentos, tanto entre
los diferentes estratos de la población, como entre regiones
del país y entre los espacios urbanos y rurales
“Tenemos que tener en cuenta que un niño
que tiene una desnutrición crónica, en un niño
que tiene dificultades para la actividad física, para
el juego, para poder estudiar y se genera una brecha frente a
los niños de sus misma edad y en condiciones óptimas”,
LAS ACCIONES DEL GOBIERNO
Es por ello que el Gobierno Nacional por medio
del ICBF, desarrolla en todo el país diferentes programas
enfocados a elevar los índices nutricionales de los menores.
De esta manera 2.4 millones de niños cuentan con desayunos
y almuerzos escolares.
Además el pasado mes de septiembre el
Instituto cumplió con la meta propuesta para todo el cuatrienio
de entregar 500 mil desayunos infantiles a igual número
de niños menores de cinco años.
El nuevo objetivo es ampliar la cobertura y
beneficiar a otros 500 mil infantes. Es decir, llegar a un millón
de pequeños con este refuerzo nutricional.
Por medio de los programas de Hogares Comunitarios,
Hogares Fami y Hogares Infantiles, la entidad garantiza una mejor
nutrición a las poblaciones más vulnerables; menores
de siete años, madres gestantes y madres lactantes.
Adicionalmente a partir de de el próximo
mes de diciembre el ICBF con un complemento alimenticio a cerca
de 400 adultos mayores de escasos recursos del país.
“No solo hay un aumento en relación
con años anteriores en materia de presupuesto, también
en relación con el número de personas a atender
con estos programas de nutrición”, concluyó Beatriz
Londoño.
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