| Ronda
de Guayaquil permitió lograr
los primeros “paquetes de acuerdo”
TLC DEBE SERVIR PARA AMPLIAR LAS PREFERENCIAS DEL ATPDEA
Guayaquil, Ecuador, 29 oct. (SNE). Al finalizar
la quinta ronda de las negociaciones que buscan lograr un Tratado
de Libre Comercio
con Estados Unidos, una cosa quedó clara por parte de los
cuatro negociadores: el acuerdo debe servir para ampliar los beneficios
que se tienen actualmente.
En la rueda de prensa los negociadores
de Colombia, Hernando José Gómez,
Estados Unidos, Regina Vargo, Ecuador, Cristian Espinosa, y Perú,
Pablo de la Flor, reiteraron que es natural pensar que la negociación
se hace para obtener más de lo que ya se tiene.
“Estas conjeturas sobre el Atpdea y su consolidación
quedan atrás y ahora angustiémonos por otras cosas
y es claro que ningún país al final va a poder terminar
negociando un TLC donde tenga menos acceso del que tenía
al iniciar el proceso de negociación”, dijo Gómez.
Por el contrario –agregó- debemos tener más
acceso del que teníamos al comenzar la negociación
y entendemos que es un proceso recíproco donde todos debemos
ganar con resultados satisfactorios que mostremos a nuestra opinión
pública, sector privado y Congreso.
En tal sentido el negociador colombiano
se mostró satisfecho
por los avances alcanzados en esta ronda e insistió en la
necesidad de acelerar un poco el proceso para lograr el objetivo
propuesto.
“Lo que necesitamos es buscar fórmulas para que el
Porshe no ande a 20 sino 80 kilómetros por hora, una velocidad
segura para evitar que no caigamos por un barranco pero que nos
garantice terminar en un término razonable y ojalá dentro
de los plazos que tenemos previstos”, aseguró el funcionario.
Por su parte la jefe de negociación del equipo estadounidense,
dijo que cuando se amplió el Atpa y se convirtió el
Atpdea hasta el 2006, la idea era dar un período de transición
para que se pudiera pasar de un acuerdo de preferencias andinas
a un trato mucho más amplio y de más larga duración
como el TLC.
“Estamos conscientes de los beneficios que se pueden lograr
si se concluyen estas negociaciones dentro del tiempo previsto
que es el mes de enero”, aseguró Vargo.
Al tratar de explicar que es mejor tener
un buen acuerdo en algo que dejar escapar la posibilidad de tener
un mayor comercio bilateral,
la negociadora norteamericana dijo que un término que se
podría utilizar para capturar este sentimiento es ‘más
vale pájaro en mano que ciento volando’.
Nuestro objetivo final –añadió- es concluir
un acuerdo que pueda ser plenamente apoyado por el congreso de
los cuatro países.
LOS LOGROS
El Jefe del equipo negociador colombiano,
reconoció que
en Guayaquil se lograron los primeros paquetes de acuerdo que se
empezarán a reforzar y terminar de concretar en la próxima
ronda a realizarse en Tucson, Arizona, Estados Unidos.
De acuerdo con el presidente del Consejo
Gremial de Colombia, Luis Carlos Villegas Echeverri, se avanzó en muchos capítulos
como el tema laboral en el cual se logró el compromiso del
universo de normas multilaterales que deben ser aplicadas en la
relación económica desde el punto de vista del derecho
de los trabajadores.
“Es decir, acervo de normas de la OIT eso quiere decir que
los trabajadores colombianos van a tener una garantía en
el sentido de que sus beneficios de hoy en materia de salario mínimo
y cobertura de seguridad social no pueden ser modificados hacia
abajo, es decir, que es lo mínimo que pueden tener y que
de ahí en adelante lo que se puede es mejorar en esa materia”,
explicó Villegas.
De igual forma se avanzó en servicios financieros, en el
tema de establecimiento de sucursales. Allí se acordó que
se exigirá una presencia comercial, un capital determinado
y un cierto manejo de los riesgos al captar el ahorro del público
colombiano si hay problemas en la matriz o en la sucursal.
“Es decir la tesis que había manejado Colombia que
debía tener presencia comercial y no simplemente con un
maletín, se aporbó”, dijo el dirigente gremial.
En el tema de inversiones se avanzó en lo referente a la
solución de controversias entre inversionistas con lo cual
se definen las reglas de juego.
MIPYMES
Uno de los sectores que obtuvo mayores
avances fue el de las pequeñas
y medianas empresas que tuvieron cuatro logros fundamentalmente:
dos acuerdos de cooperación (uno con la Corporación
Andina de Fomento y otro con el Banco Interamericano de Desarrollo),
una posibilidad de encuentro para el desarrollo de franquicias,
y una normatividad para evitar estructuras monopólicas en
materias primas para las pymes.
“Presentamos una posición a la importación
de bienes usados o remanufacturados excepto cuando se trate de
bienes de maquinaria, avanzamos en el tema de compras de maquinaria
y nuestra aspiración al ingreso en materia de compras estatales
a Estados Unidos, en la necesidad de no consagrar estructuras monopólicas
en las materias primas para las pequeñas y empresas, y en
necesidad de abrir el mercado de servicios profesionales para pequeños
profesionales colombianos en Estados Unidos como ingeniería,
ciencias de la salud”, explicó Juan Alfredo Pinto,
presidente de la Asociación Colombiana de Pequeñas
y Medianas Empresas, Acopi.
Por su parte, el Viceministro de Desarrollo
Empresarial, Carlos Alberto Zarruck, explicó que el convenio con el BID es en
materia de barreras técnicas de acceso al mercado para identificar
obstáculos técnicos de las pymes en su ingreso a
Estados Unidos.
“Este proyecto de casi tres millones de dólares para
analizar las barreras no arancelarias que impidan el mercado real
a Estados Unidos”, dijo Zarruck.
El en convenio de la CAF se buscará el desarrollo de la
asociatividad de las pequeñas y medianas empresas no sólo
en los países sino en la región andina con el fin
de poder tener mayores ventajas competitivas a la hora de ingresar
a Estados Unidos.
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