General Rafael Reyes Prieto
1904-1909
Nació
en Santa Rosa de Viterbo, el 5 de diciembre
de 1849-Murió en Bogotá, el 18 de febrero
de 1921.
Militar
y estadista boyacense, presidente de la República
durante el período 1904-1909,
conocido como el "Quinquenio".
Con abuelos de ascendencia castellana, José
Gregorio Ambrosio Rafael Reyes Prieto era
hijo de Ambrosio Reyes Moreno, quien, viudo
y con cinco hijos, contrajo segundas nupcias
con doña Antonia Prieto y Solano, de cuya
unión hubo cuatro hijos, a saber: Enrique,
María, Rafael y Néstor. Don Ambrosio murió
cuando el hijo mayor de su segundo matrimonio,
Enrique, tenía cinco años.
Al poco tiempo, la numerosa familia Reyes se trasladó de Santa Rosa a Duitama.
Elías Reyes, hermano medio de Rafael y primogénito
de don Ambrosio, tenía en Popayán una incipiente
y próspera casa de comercio, a donde decidió
ir a trabajar, a los 17 años, Rafael Reyes.
Pronto se unieron a la empresa sus dos hermanos
y su madre, el negocio se llamó Elías Reyes & Hermanos. Esto le permitió a Rafael, a partir de 1868, iniciar su vida de viajero
y descubridor. Por esos años fue la fiebre
de la quina, que desde mediados del siglo
XIX era el negocio por excelencia de los
colombianos. No se quedó ni un palmo de los
Andes, entre el Ecuador, Antioquia, Cundinamarca
y el Chocó, por recorrer; Reyes señalaba
las zonas más apropiadas para explotación,
y detrás iba una legión de empresarios y
contratistas que, al igual que él y sus hermanos,
derribaban árboles y selva que luego se convertían
en miles de millones de dólares. Rafael Reyes
no sólo buscaba la quina, sino colonizar
la región y descubrir rutas de comunicación.
Así, redescubrió el río Putumayo, río navegable
que comunica a Colombia con el Amazonas;
estableció la navegación a vapor por él y
abrió caminos desde Sofía, la cabecera del
río, hasta Pasto; activó el comercio de exportación
de mercancías y dio gran auge económico a
Pasto. Cuando fue presidente de Colombia,
viajó de nuevo por el Amazonas, el Orinoco
y el Magdalena buscando desarrollar las comunicaciones y diversificar la economía del país.
Reyes
fue un gran enamorado de la región amazónica,
lo que lo Llevó a conseguir allí varias propiedades.
Diez años vivió Rafael Reyes en las selvas
del sur del país; desde Pasto se desplazó
por el río Ica (Putumayo) a Río de Janeiro,
en 14 días, allí pasó dos meses. En la ruta
a Río de Janeiro, la Llegada de los expedicionarios
a Belén de Pará, despertó el interés de las
autoridades y de los periodistas; pronto
en Río de Janeiro se supo de ellos, facilitándose
las conversaciones con el emperador don Pedro
n, quien ofreció embarcaciones y apoyo económico
para que continuaran con las exploraciones.
A los 24 años Reyes se enamoró en Popayán
de Sofía Angulo Lemus, y al poco tiempo se
formalizó el compromiso de matrimonio, efectuado
cuando Rafael Reyes logró cierta holgura
económica, cuatro años después, en 1877.
Doña Sofía falleció en Bogotá en octubre
de 1898, y Reyes no se volvió a casar por
respeto a sus hijas.
Hacia
1884, la empresa privada que tenía con sus
hermanos empezó a declinar: varios vapores
habían sucumbido, unos colonos fueron diezmados
por las enfermedades y otros emigraron; además,
su hermano Néstor se perdió en las selvas
del Amazonas; un año más tarde, la empresa
de los hermanos Reyes desapareció. En 1885
Reyes contaba con 35 años y estaba en Cali.
Fracasado en sus negocios, se hizo militar
de ocasión. El presidente Rafael Núñez lo
llamó a participar en la reconquista de Panamá,
donde oficialmente estaba al mando el general
de división Miguel Montoya, pero en la práctica
mandaba Reyes. Se organizó, entonces, una
expedición marítima desde Buenaventura hasta
Panamá y un pontón abandonado fue el medio
de transporte para la tropa, por lo que se
conoce como "la aventura del pontón". Cuando la expedición llegó a Panamá, restablecieron las autoridades civiles
y militares, y en pocos días las fuerzas
de los Estados Unidos desocuparon el istmo.
Obtuvieron la rendición del rebelde panameño
Azpurría, y Reyes presidió el consejo de
guerra verbal donde Petricelli y Cocobolo
fueron condenados a la horca por el incendio
de Colón el 6 de mayo.
Prestán,
el dirigente incendiario de Colón, fue ahorcado
el 18 de agosto, tres meses después en un
consejo de guerra verbal presidido por Pedro
Nel Ospina; no obstante, la responsabilidad
recayó sobre Reyes. Mientras tanto, el presidente
Rafael Núñez daba al Estado una organización
centralista y autoritaria. Acabada la Constitución
de 1863, se originó la guerra de 1885, de
donde salió aniquilado el partido liberal
y fortalecido el partido conservador. El
11 de noviembre de 1885, cuando se instaló
el Consejo Nacional Constituyente, Reyes
ocupó una curul, pero su participación en
la redacción de la Carta Magna fue poco afortunada,
pues Miguel Antoruo Caro se opuso a todas
las iniciativas presentadas por él.
El
gobierno encargó a Reyes una "misión confidencial" en Europa: Conseguir algunos empréstitos. En 1887, al regreso de su malograda
misión, Núñez nombró a Reyes ministro de
Fomento. En 1888 regresó a sus actividades
particulares y adquirió la hacienda Andorra,
cerca a Tocaima, donde rehizo su perdida
fortuna. A causa de la baja de precios de
los principales productos de exportación
del país (café y caucho), Reyes planteó la
necesidad de crear nuevas industrias. Llevaba
cerca de 15 años estudiando el desarrollo
de la industria bananera en Colombia, debido
al interés que desde entonces mostraba Estados
Unidos en el consumo del banano. En 1894,
debido a la apremiante situación económica
del país, Reyes decidió ir a Costa Rica a
investigar la industria bananera, que desde
entonces empezó a desarrollarse en Colombia.
Durante el Quinquenio, Reyes se preocupó
especialmente por promover el estudio y cultivo
del banano; él mismo dirigió una comisión
especial del gobierno en 1908, para estudiar
algunas fuentes de riqueza del país que contribuyeran
a mejorar la difícil situación económica.
Hacia
1890, Reyes adquirió fincas en el Valle del
Cauca. Fue electo senador por el Cauca, y
en 1892 fue candidato a la Vicepresidencia.
El Regenerador Núñez murió en septiembre
de 1894, y el 23 de enero estalló una rebelión
en Bogotá. Reyes estaba en su hacienda Andorra,
a donde un grupo de liberales leprosos del
lazareto de Agua de Dios proyectaba ir para
hacerlo prisionero; pero Reyes les salió
al encuentro y llegó a Bogotá el 24 de enero.
Tenía 45 años cuando estalló la guerra del
95; ganó en la batalla de Enciso, un valle
que queda entre Málaga y Capitanejo. Tras
el triunfo en Enciso, el ejército se desorganizó
y se rindió luego en Capitanejo, el 16 de
marzo. Poco después, Reyes fue llamado al
Ministerio de Gobierno, donde se granjeó
la mala voluntad de algunos grupos conservadores,
pues además de haberse preocupado por evitar
una alianza entre liberales de Colombia y
Ecuador, . para prevenir así un próximo levantamiento
revolucionario, sostuvo que los partidos
deberían tener representación proporcional
en las corporaciones colegiadas. Después de dejar el Ministerio de Gobierno, Caro
lo envió como ministro plenipotenciario a
Francia para alejarlo del país.
En
1896, la mayoría conservadora del Congreso
propuso a Reyes como candidato a la Presidencia,
especialmente por ser un gran militar. Durante
gran parte del proceso electoral, 1896-1898,
Reyes estuvo en París. En 1898 su nombre
fue eliminado de entre los candidatos. Se
encontraba aún en París, recientemente viudo,
cuando el 18 de octubre de 1898 estalló otra
revolución en Colombia. El secretario de
la embajada, Guillermo Valencia, le insinuó
ponerse al frente del ejército del gobierno,
pero él decidió no intervenir en el nuevo
conflicto y menos si era para servirle al
señor Caro. El golpe de Estado dado a Manuel
Antonio Sanclemente por el vicepresidente
José Manuel Marroquín, el 31 de julio de
1900, no resolvió el problema interno del
gobierno; la guerra continuaba y el país
seguía en manos de los conservadores nacionalistas.
En
París, Reyes fortaleció viejas relaciones
de negocios, particularmente con los propietarios
de la casa Fould Frères, y compró un barco
de guerra para contrarrestar la ayuda internacional
a la revolución liberal. En 1901 fue delegado
a la n Conferencia Internacional Americana
con sede en México, donde expuso su visión
moderna de los problemas políticos y de la
primacía de lo económico sobre las demás
complicaciones nacionales; esto aumentó sus
diferencias en Colombia con liberales y conservadores
históricos. A Reyes le obsesionaba el progreso,
colonizar nuevos territorios y construir
grandes obras públicas, ideas que puso a
consideración en un folleto para la sesión
del 30 de diciembre de 1901. A pesar de las
burlas iniciales, el proyecto se discutió,
valoró y fue aprobado unánimemente. Reyes
decidió radicarse en México. En octubre de
1902 terminó la guerra de los Mil Días, y
un año después se separó Panamá.
Rafael
Reyes fue elegido presidente de un país en
ruina para el período 1904-1910, en unas
elecciones donde no participaron los liberales,
sólo las dos fracciones del conservatismo.
Ejerció durante el período conocido como
el Quinquenio Reyes o la Dictadura Reyes.
Se posesionó con los lemas: «Paz, concordia
y trabajo» y «Menos política, más administración»,
pero sus actos de gobierno rápidamente generaron
oposición y él no demoró en actuar enérgicamente.
Determinó destierros y confinamientos, sin
importarle el partido al que pertenecían
sus opositores, quienes muchas veces eran
conservadores; Reyes iba perdiendo simpatía
entre éstos, y ganándola entre los liberales.
Creó un ambiente tan difícil que su mandato
duró sólo hasta 1909. Clausuró el Parlamento
y convocó una Asamblea Nacional Constituyente,
donde los liberales (minoría) participaron
con todos sus derechos. La última guerra
perseguía reformar la Constitución del 86,
Reyes, investido de facultades extraordinarias,
invitó a la nación a una reforma de la Carta Magna.
La
Asamblea, convocada el 1 de febrero de 1905,
se instaló el 15 de marzo, y en menos de
un mes dictó diez actos legislativos que
suprimieron los cargos de vicepresidente
y designado, al igual que el Consejo de Estado,
y reformaron la Constitución, entre otras
cosas, para que el período presidencial de
Reyes durara 10 años (1905 a 1914). Durante
su gobierno hubo participación por primera
vez de industriales y terratenientes, quienes
modernizaron las políticas económicas de
una sociedad atrasada materialmente. También
se dictó la ley de representación de minorías,
hecho fundamental que cambió el estilo de
la lucha partidista y disminuyó las posibilidades
de guerra, al permitir una participación
más equitativa; además, fue el primer intento
serio, desde 1886, por establecer relaciones
más civilizadas entre los dos partidos. En
acto legislativo de 1905, Reyes consagró,
por primera vez en el país, la representación
proporcional en los cuerpos colegiados. El
programa político de Reyes se distinguió
por su carácter centralista, dirigido a aumentar la participación del Estado en la economía
y en los antiguos estados soberanos, los
que en 1904 subyugó completamente para evitar
que se formaran, en Antioquia, Santander
y Cauca, fuertes centros de presión regionalista
que alimentaran brotes separatistas como
el que concluyó con la separación de Panamá.
Entre
las obras que contribuyeron notablemente
al desarrollo del país están: su política
de monopolios fiscales de licores, tabaco
y degüello; el impulso del financiamiento
estatal para la inversión pública en caminos
y carreteras con la creación del Ministerio
de Obras Públicas, la promoción del ferrocarril
de Girardot y la continuación del Capitolio;
se ocupó de la instrucción pública, especialmente
del sector obrero; restableció las relaciones
con Venezuela; y se ocupó por estabilizar
la moneda, para lo cual creó el Banco Central
en 1905. La firma del tratado Averbury-Holguín
en 1905 permitió, a través del crédito internacional,
sanear la deuda externa del país y desarrollar
la industria minera, textil y azucarera,
las refinerías, las fábricas de alimentos,
de vidrio, y papel; cultivar el banano, el
café y el algodón, y proporcionar créditos
bajos para la agricultura de exportación.
Reyes profesionalizó y modernizó a las fuerzas
armadas; en 1907 fundó la Escuela Militar
de Cadetes de Bogotá y la Escuela Naval de Cartagena; en 1909 fundó la Escuela Superior de Guerra. En 1908 dividió
al país en 34 departamentos y erigió a Bogotá
como distrito especial. Desarmó a la población
civil y estableció el monopolio de las armas
por parte del Estado. Consagró el código
de reconocimiento a los derechos de las minorías,
buscando una paz que garantizara el progreso
económico, al tiempo que en el exterior trataba
de mejorar la imagen del país.
Después
de haber ganado la última guerra, el partido
conservador no admitía que los liberales
estuvieran participando en el gobierno; además,
se sentían traicionados por Reyes. El 10
de febrero de 1906 Reyes sufrió un atentado
en Bogotá, cuando iba con su hija Sofía,
en el sector de Barro Colorado. Los asaltantes:
Salgar, González, Aguilar y Ortiz, fueron
fusilados en el mismo lugar del delito, aunque
todos señalaban al general Pedro León Acosta
como el jefe de la conspiración. La persecución
y los atropellos no se hicieron esperar,
en Bogotá la Policía Secreta fue una amenaza
social. Después de presenciar el fusilamiento
de los actores materiales, los jefes de la
conspiración, unos veinte, fueron desterrados
a Bocachica. En 1909 Reyes enfrentó una crisis
de opinión por la firma del arreglo entre
Panamá, Estados Unidos y Colombia. Reyes
buscaba restablecer las relaciones entre
Estados Unidos y Colombia, deterioradas desde
1903 por los sucesos del Canal de Panamá;
el 28 de febrero de 1905 nombró como ministro plenipotenciario en Washington al liberal Diego Mendoza Pérez. Pero éste fracasó
en su misión de acercamiento de las dos naciones.
Enrique Cortés lo reemplazó y propuso que
el problema fuera tratado por los tres países,
ya que tenía dimensiones tripartitas. El
9 de enero de 1909 se firmó un tratado en
el que Estados Unidos reconocía a Colombia
una indemnización por Panamá, y recibía autorización
para que sus barcos usaran los puertos nacionales.
Este
tratado fue visto como amenaza pública y
se argumentó que el ministro Enrique Cortés
no tenía facultades legítimas para hacerlo.
Reyes trató de que fuera aprobado sin ninguna
modificación por la Asamblea en sesiones
extraordinarias, pero experimentó una fuerte
oposición encabezada por Nicolás Esguerra.
El 9 y el 13 de marzo hubo sendas manifestaciones
promovidas por la juventud universitaria
en rechazo de Reyes, y surgió el nombre de
Enrique Olaya Herrera para presidente. Reyes
renunció y dejó al mando al general Jorge
Holguín, su consuegro, quien desde el 11
de marzo de 1909 era el designado. Reyes
reasumió el mando el 14 de marzo. A finales
del Quinquenio apareció la Unión Republicana,
que aglutinaba a liberales y conservadores
inconformes con el gobierno. Reyes emprendió
viaje el 3 de junio, y camino de la Costa
Atlántica, en Gamarra, encargó el mando al
ex vicepresidente Ramón González Valencia,
pero éste no aceptó; entonces, Reyes entregó
el poder al general Holguín. Una vez en Santa
Marta, se fue como pasajero en el buque Manistí. Su dimisión se oficializó el 27 de julio de
1909. En un exilio voluntario, el general
Rafael Reyes viajó por varios continentes
durante 10 años; residió varias veces en
Madrid. Murió en Bogotá de pulmonía, el 18
de febrero de 1921. |